YPF:
Saliendo del lugar de una economía dependiente
Por Emanuel Bonforti *
En el contexto de la medida soberana de expropiación de la mayoría accionaria de
YPF y de la declaración de interés publico del autoabastecimiento, la
explotación, industrialización, transporte y comercialización de hidrocarburos,
es decir, una vuelta de pagina a un periodo de casi 20 años de desregulación en
materia petrolera, donde fueron las reglas del mercado las que imponían el ritmo
de producción, surge una nueva iconografía en los medios de comunicación y redes
sociales, que pone en sintonía a través de las siglas YPF, tres rostros
presidenciales cuyos apellidos comparten cada una de las letras de la empresa de
manera cronológica y significaron en términos políticos un hito nacional a
partir de sus decisiones que los diferenciaron de sus antecesores y los
enfrentaron a las estructuras de poder económico local que conviven en sintonía
fraternal con los imperios de turno, apoyados en un sistema cultural que
refuerza los valores del dominador.
Si bien la creación de YPF data de 1922, ya en 1891 el diputado Luis Magnasco
comienza a mencionar la riqueza petrolera de Jujuy y Mendoza, claro está, que a
la Inglaterra exportadora de carbón no le causaba ninguna gracia que su “sexto
dominio” consiga autonomía en materia de combustible, de esta manera comienza
con sus métodos elegantes para sabotear cualquier intento de autodeterminación
apelando al soborno de políticos venales y a la presión diplomática en los
incipientes organismos internacionales.
Podemos ubicar la primera medida soberana en términos de riqueza subterránea con
la ley 4167 en 1903 impulsada por el partido Autonomista, quizás en uno de sus
últimos reflejos anti-mitristas, se forma aquí la Comisión de Estudios de aguas
y napas, yacimientos carboníferos e investigaciones geológicas. Su objetivo, era
la búsqueda de carbón, primer caso que a partir de una situación desfavorable en
la balanza comercial, se impulsa una medida soberana, la correlación de fuerzas
entre Argentina y el imperio frustra esta intención, que atenta contra la
ecuación inglesa de combustible importado por cereales y carne.
En este periodo experimental, que termina en 1922, forma parte el descubrimiento
de petróleo en Comodoro Rivadavia, Inglaterra a partir de ahora tratará de
bloquear la llegada de los capitales norteamericanos, como también intentará
evitar que esa materia prima sea sujeta a un proceso de industrialización por
empresas nacionales.
La llegada del primer gobierno democrático y popular en 1916, fue producto de
años de lucha, Yrigoyen llega al poder en un contexto nacional donde la
estructura del país oligárquico seguía teniendo una representación aceitada en
el congreso y activa en la Corte Suprema, en el ámbito internacional la primera
guerra mundial marca la agenda.
El nacionalismo defensivo que muchos consideran a este periodo, producto de no
proponerse una emancipación por vías de la industrialización, posee grandes
gestos de soberanía, la política de neutralidad ante la guerra, el acercamiento
a las naciones latinoamericanas, el atisbo de una política ferroviaria
independiente del imperio con el plan de Huatiquina, el petróleo es considerado
como la segunda gran riqueza y para evitar los vicios terratenientes de nuestra
primera riqueza que tiene como origen el reparto de tierras de Rivadavia, el
Peludo en 1928, propone en el Congreso un régimen legal que ponga en manos del
estado el dominio de los yacimientos, su marco teórico fueron los escritos de
Mosconi, quien considera que la soberanía energética forma parte de la tercera
etapa de la independencia del continente. La mirada latinoamericanista es una
señal emancipatoria que se repetirá de manera pronunciada durante el peronismo y
el gobierno de Cristina Fernández, mientras que los imperios clásicos de ayer y
las corporaciones trasnacionales de la actualidad intentaran segmentar dichos
vínculos a partir de una política que apunta a la balcanización continental.
Durante el gobierno de Yrigoyen, a pesar de las fuertes presiones de la Standard
Oil, no logra obtener ninguna concesión, de ahí que la ganancia neta permita
aumentar las plantas de destilación y extender las agencias de venta, producto
de mantener un combustible barato para el mercado interno.
El golpe del 30 permitió que los británicos intervengan en una empresa mas
dócil, donde se privilegiaron los postulados de libertad de empresa, sociedades
mixtas, y libre empresa integral, YPF pasaba de ser una empresa ejecutora de su
política nacional a una mera empresa comercial y una referencia en la tan
mentada seguridad jurídica.
A partir de 1943, asistimos a un periodo de nacionalización de la economía,
producto de la alianza entre un ejercito de carácter nacionalista –que considera
a la industria como el motor de cualquier proyecto emancipatorio y clave en la
defensa nacional- una clase obrera y algún sector incipiente y oscilante de la
pequeña burguesía, este momento se cristaliza en la recuperación soberana de los
ferrocarriles, los puertos, aguas corrientes, transporte publico, seguros,
bancos, nacionalización del Banco Central, y el comercio exterior.
Nuevamente se avanza en términos legislativos sobre el petróleo, en 1949 se
dicta una nueva constitución que le otorga un carácter nacional a nuestro
patrimonio energético y natural, lo que se pretende es el autoabastecimiento y
la no dependencia imperial en materia de combustible, en un contexto de
expansión económica evitar los cuellos de botella en la producción, forma parte
de este cambio de época la creación de Gas del Estado.
Estados Unidos es quien desplaza a Inglaterra en la hegemonía mundial, y
acrecienta sus decisiones mundiales en materia petrolera, será el encargado de
frenar el impulso nacionalista de Perón, a través de diferentes prohibiciones,
embargos y bloqueos.
La restauración oligárquica a través de la mal llamada Revolución Libertadora,
permitió el ingreso a nuestra economía del FMI, el Banco Mundial y GATT, con
esto la intervención directa de la soberanía petrolera, otra vez un golpe
militar tiene olor a petróleo.
Un golpe fuerte sobre YPF se da a partir de 1976, es el primer intento de
privatización que al no consagrarse, consigue en parte su objetivo, es decir, el
vaciamiento y el desprestigio de nuestra empresa de bandera, quizás la frase que
ilumine mejor este periodo la brinde Roberto Alemann: “cada propietario de la
tierra explote el subsuelo al igual que como sucede con el trigo”. Hablamos de
una transferencia del ámbito del código minero al código civil.
Continuadores de esta estrategia será la banda neoliberal que asalte el poder en
1989, impulsando una apertura comercial feroz para nuestra industria y con una
reforma del estado cuyo eje es el programa de privatizaciones, donde YPF es
victima del mismo.
La medida que tomó Cristina Fernández de Kirchner, implica un escenario que se
diferencia del de la desregulación petrolera noventista, en parte para evitar el
desbalance comercial histórico que significaron los momentos en los cuales
Argentina debió importar combustible para sostener la producción económica. Es
un paso fundante para levantar las banderas de la independencia económica y así
alcanzar una industrialización consolidada, saliendo del lugar de economía
dependiente que nos ubicaron los años de derrotas.
Enemigos de esta política son los mismos que se alzaron contra Yrigoyen y Perón,
la oligarquía en materia minera siempre se resistió a la explotación estatal de
los yacimientos, así favorece a los imperios de turno y sostiene un crecimiento
económico retardario –combustible por carnes y cereales- donde son pequeños
grupos de mediadores e importadores quienes se beneficiaron, para esto emplean
medios de “persuasión” como el lobby, funcionarios venales y medios de
comunicación que refuerzan la dominación cultural, apelando a frases que tienen
que ver con la intervención de un estado ineficiente, mal administrado, y en
contraposición apelan a las empresas privadas con capacidad de gestión en nombre
del libre mercado.
* Sociólogo (Universidad de Buenos Aires). Miembro del Centro de Estudios Juan
José Hernández Arregui
http://hernandezarregui.blogspot.com.ar
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