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El
caso Milani y las operaciones del Grupo Clarín
Por Conrado Yasenza*
Desde que se conoció la denuncia sobre la supuesta participación que habría
tenido César MIlani, actual ex Jefe del Estado Mayor del Ejército (removido por
decisión presidencial el 22 de Julio de 2013 a pocos día de su designación**),
en la desaparición del soldado Ledo y sobre su rol en el Batallón de Ingenieros
141 de La Rioja que saturó, para controlar socialmente la provincia de Tucumán
con la excusa de la presencia guerrillera del Ejército Revolucionario del Pueblo
- diezmada al momento de producirse el Golpe en Marzo en 1976 - y sobre su
pertenencia al Batallón de Inteligencia 601 - figura en el listado que la
revista Veintitrés entregó como suplemento especial (lo tengo como archivo),
quien escribe estas líneas sostuvo que estos datos no eran tan graves como lo
central en el caso: Que Milani formaba parte de la estructura de Inteligencia
del Ejército al momento de producirse el Golpe y la desaparición de Ledo como
también el secuestro, tortura y confinamiento en 1976 del soldado y militante
del peronismo revolucionario, Álvaro Illanes (licenciado al momento de su
secuestro)
Cometí errores o imprecisiones que, es menester, cabe rectificar: Horacio
Vertbisky en su nota “Paraguas o fusible” publicada el domingo 21 de Julio en
Página 12 clarifica el punto: “Nunca existieron en el Ejército subtenientes de
Inteligencia, una especialidad en cuyos rudimentos recién es posible iniciarse
dos grados más adelante, como teniente 1. Milani egresó del Colegio Militar en
diciembre de 1975, fue asignado a una unidad de ingenieros en construcciones con
sede en La Rioja, y en marzo de 1976 fue enviado a la Zona de Operaciones de
Tucumán, para la construcción de una escuela en Monteros y algunas obras de
infraestructura vial”
Sabemos hoy, y gracias a la investigación de Eduardo Anguita y Daniel Cecchini,
publicada en el semanario Miradas al Sur, y esencialmente por el testimonio de
Ramón Alfredo Olivera, brindado inicialmente en 1984 y ante la Comisión de
Derechos Humanos de la Provincia de La Rioja, que Milani era subteniente y que
fue el oficial que trasladó a Olivera- según declaraciones del denunciante -
luego de ser torturado durante varios días en el Instituto de Rehabilitación
(cárcel de la provincia) al Juzgado Federal a cargo del magistrado Roberto
Catalán, amenazándolo durante todo el traslado e incluso hostigándolo durante la
declaración ante el Juez ( estos datos forman parte de la declaración de
Olivera). Por medio de aquella confesión Olivera fue condenado a cuatro años y
medio de prisión. Fue liberado en 1981 y en 1984 brindó su testimonio sobre lo
relatado aquí - e investigado por Miradas al Sur - ante la Comisión Provincial
de Derechos Humanos. Este testimonio no fue incorporado al archivo del Estado
nacional.
Por otra parte, Illanes asegura que por lo menos tres ex soldados de la época
están en condiciones de declarar y afirma que lo harán. Veremos si ello ocurre
en el transcurso de los días. Sería de gran importancia para, junto al
testimonio de Olivera, echar luz sobre estos hechos que son centrales en la
reconstitución de la memoria y el cuerpo colectivo de la Nación, cuerpo marcado
a fuego y sangre por el secuestro, tortura y desaparición de 30.000
compatriotas. Cuerpo colectivo que ha sido restañado en su mortal herida gracias
a la política de Memoria, Verdad y Justicia.
He escrito hace días también, que lo importante de este hecho era la posibilidad
de seguir investigando. Digo hoy, y ante el giro veloz que tomó el caso Milani
luego de la presentación de la Carta del CELS dirigida al Presidente de la
Comisión de Acuerdos del Senado de la Nación, Senador MARCELO GUINLE, donde se
considera que el ascenso de Milani debe ser rechazado “a partir de esta nueva
información”, que es trascendental la investigación si de honrar ese eje
cardinal, sostenido desde 2003 por el Gobierno Nacional, se trata tanto como de
ampliar el proceso de Juicios a los responsables civiles y militares de la
dictadura iniciada en 1976.
Por qué no fue el testimonio de Olivera incorporado a los archivos del Estado
Nacional, no lo sé. Por qué tanto el fiscal Pablo Camuña como el Juez Raúl Bejas
desestimaron el pedido de investigación - basado en todos los datos conocidos -
sobre la participación de Milani en la desaparición del soldado Ledo, presentada
por dos dirigentes radicales de la provincia a fines del año pasado, es otro
interrogante que deberá ser reconsiderado por el fiscal y el juez a la luz de
los últimos acontecimientos. Graciela Ledo - hermana del soldado - le dijo al
periodista Eduardo Anguita que no había sido llamada a testificar como tampoco
su madre Marcela Brizuela de Ledo, Presidenta de Madres de Plaza de Mayo de La
Rioja.
También es inadmisible que el capitán Esteban Sanguinetti, sindicado como el
principal responsable material de la desaparición de Ledo y comprometido en los
casos de Illanes, Olivera y de otros ex soldados del Batallón de Ingenieros
trasladado a Tucumán, no haya sido llamado a declarar siquiera desde que se
conocieran las denuncias y hasta la fecha (Escribe Eduardo Anguita en su
investigación en Miradas al Sur: En el libro El escuadrón perdido, el fallecido
capitán del arma de Ingenieros José Luis D’Andrea Mohr detalla los secuestros
y/o asesinatos de 129 soldados en ese período. En ese libro, D’Andrea Mohr
consigna que el 17 de junio de 1976, el capitán Esteban Sanguinetti sacó a Ledo
en tres oportunidades a “hacer una recorrida por la zona”. De la última,
Sanguinetti regresó solo.)
Hay otros datos que podrían comprometer a Milani. Su pasado retorna como tornan
los espíritus que no han encontrado aún el descanso, negados en su desaparición.
En un informe realizado en Mayo del 2000 por los Organismos de Derechos Humanos
de Río Negro y Neuquén titulado “Entrada gratuita al Ámbito del Terror y la
Muerte”, que lleva como primer subtítulo “Mostrar para Ocultar”, se consigna que
como “festejo de la Semana del Ejército, el Comando de la VI Brigada de Montaña
programó una “Exposición de Puertas Abiertas” que consistió en abrir durante
seis días las puertas del Batallón 181 a la comunidad del Neuquén y del Alto
Valle para desplegar actividades “culturales , deportivas y castrenses, que
incluirán paseos en tanques y otros vehículos de combate”. Los responsables por
entonces eran el segundo comandante de la Brigada, Adrián Dale y el jefe del
Batallón de Ingenieros, Teniente Coronel César Milani.
En el informe los Organismos de Derechos Humanos se preguntan si cuando el
“dueño de casa, Tte. Cnel. César Milani, muestre las instalaciones mostrará la
construcción que ofició de Centro Clandestino de torturas y exterminio” y
agregan “quizás esté reciclado para elaborar panchos y empanadas en la
promoción” A continuación y ya bajo el segundo subtítulo “La Escuelita”,
describen que “durante el auge del Terrorismo de Estado, años 1976 al 78, a ese
establecimiento los militares lo denominaban La Escuelita. “Su descripción
exterior figura en varios testimonios de conscriptos. Un detallado croquis fue
incorporado al expediente judicial. Incluye el lugar donde se aplicaba la picana
y la ubicación de los ganchos, de donde se colgó alguno de los detenidos luego
de la sesión de torturas”. En el informe los Organismos se preguntan si Milani,
al abrir las puertas del Batallón, mostrará lo que se desea ocultar, es decir,
La Escuelita, “el lugar donde se aprende a cantar”. Cabe consignar que en el
mismo informe los Organismos de Derechos Humanos especifican que “La
investigación judicial de estos crímenes de Lesa Humanidad ha establecido la
participación – ya sea directa o en tareas de supervisión, apoyo logístico, etc.
– de los siguientes militares: Gral. José Luis SEXTON, Coroneles Braulio OLEA,
Mario GOMEZ ARENA y Oscar REINHOLD, Teniente Coroneles MOLINA EZCURRA y Carlos
Alberto MARTINEZ, Mayor Luis Alberto FARIAS, etc. Todos ellos fueron
beneficiados por leyes de impunidad; ninguno fue denunciado por el propio
Ejército. Esa Institución procuró – y procura – sustraerlos a la acción de la
Justicia, mientras habla de su “vocación democrática”” (Se recuerda al lector
que el Informe elaborado por los Organismos de Derechos Humanos de las
Provincias de Río Negro y Neuquén corresponde al año 2000)
Quien escribe estas lineas no realiza especulaciones sobre un hecho judicial,
político y colectivo de extrema importancia. No es juez, ni fiscal, ni abogado.
Es periodista. Conoce la centralidad de las investigaciones sobre delitos de
Lesa Humanidad en la articulación de políticas de Memoria, Verdad y Justicia
impulsadas por el Gobierno de Néstor Kirchner y Cristina Fernández como también
de la relevancia sustancial de los Organismos de Derechos Humanos para que los
juicios e investigaciones no se cierren y mueran y con ellos, otra vez, los
compañeros secuestrados, torturados, asesinados y desaparecidos. La lucha de los
Organismos por Juicio y Castigo y contra la leyes de Obediencia Debida y Punto
Final e indultos, ha sido inclaudicable y vital.
La justicia deberá avanzar en la investigación sobre la desaparición del soldado
Ledo y la participación o no de Milani en acciones que pudieran comprometerlo
con el accionar represivo del Estado contra su pueblo y bajo un estado de
excepción iniciado en 1976.
El periodista Eduardo Anguita destaca un pequeño dato que este cronista hace
suyo para responder algunas impugnaciones realizadas en estos días: "En los
juicios no se consideran ni la edad ni el grado que tenía un militar ni la
importancia que tenía un empresario. Como en cualquier juicio justo, se valoran
acusaciones, testimonios y pruebas materiales".
Insisto: No se harán especulaciones desde estas líneas, como no se hicieron
desde el primer escrito, sobre lo que debe investigar y dictaminar la justicia.
Sí se reafirma la gravedad del hecho y la importancia y necesariedad de la
profundización en las investigaciones.
Y se destaca el compromiso de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina
Fernández con el impulso a los juicios contra los responsables civiles y
militares que cometieron delitos de lesa humanidad – tipificación establecida
durante el gobierno de Néstor Kirchner -. El intento de establecer agendas
temáticas desde el Grupo Clarín y a través de su grávido mascarón de proa con el
único objetivo de dañar al Gobierno nacional, exime de todo comentario a este
cronista a excepción de uno: La miserabilidad sostenida en el ego y la revancha
hablan más de quien es portador de esa condición que del destinatario a quien se
busca desacreditar y dañar.
*Periodista – Dtor. de la Revista de Cultura y Política La Tecl@ Eñe http://lateclaene.wix.com/la-tecla-ene
** (Este cronista aclara que las informaciones sobre el caso Milani se
produjeron con tal celeridad que en un principio se habló de remoción para
finalmente decidir suspender el tratamiento del pliego de su ascenso hasta
Noviembre de este año)
http://elbarullo.wix.com/el-barullo-de-conrado-yasenza#!la-memoria-la-herida-y-la-sal/ca55