De
la Educación para Todos a la Educación para Pocos. Apuntes sobre Esteban
Bullrich
Por Juan Godoy*
Esteban Bullrich, desde 2010 Ministro de Educación de la Ciudad de Buenos Aires,
es el candidato número uno a ocupar la misma cartera en la Nación si Macri
llegara a ganar el ballotage del 22 de noviembre. Detrás de la imagen amigable y
filantrópica que pretende dar cuando se presenta, padre de cuatro hijos,
enamorado de María Eugenia, preocupado por la escuela pública considerando la
necesidad de un círculo virtuoso entre padres, docentes y alumnos, se esconde un
personaje ligado a la oligarquía argentina, los intereses imperialistas, y la
apuesta a la ruina de la educación pública, el avance de la privatización de la
misma, y a una sociedad con profundas desigualdades sociales y económicas.
Hijo de una familia de la oligarquía argentina, es el sobrino-segundo de la
conocida Patricia Bullrich, la del recorte del 13% a los jubilados y estatales
en el Gobierno de la Alianza (por si alguno no la recuerda). Cursó en un colegio
bilingüe, lo cual lo lleva a hablar tan bien el español como el inglés (y a
pensar en inglés más que en nacional).
Si arrancamos por observar su Curriculum Vitae, vemos que apenas terminados sus
estudios en Sistemas en una universidad privada, la universidad CAECE, se lanzó
al exterior para proseguir sus estudios, más precisamente (como no podía ser de
otra forma), en los Estados Unidos. Allí uno podría pensar que se vinculó a la
educación, pero no, el muchacho estaba interesado en otros temas, por lo cual
siguió una Maestría en Administración de Empresas en la Northwestern University
- Kellogg School of Management. También fue becario de la Fundación Eisenhower
Fellowships.
En su presentación nos cuenta que “la crisis de 2001 terminó de forjar mi
vocación pública”, vocación rara la que asume, pues deja el ámbito privado no
para militar con los movimientos sociales para la reconstrucción de la
Argentina, sino como asesor parlamentario (de Hugo Martini, directivo de
Repsol-YPF), y es más nunca dejará se ser representante de los intereses
privados. En esos años hace sus primeros pasos en la política en el Partido de
Ricardo López Murphy… Si, si, aquel que a principios del 2001 anunció un fuerte
recorte sobre jubilaciones y educación (docentes, universidades, becas, abría la
puerta al arancelamiento, etc.),[1] por más de 2 mil millones de dólares
anuales, y que tuvo como consecuencia que el Ministro tenga que salir eyectado
del cargo por la ola de protestas que generó.
Como Diputado Nacional (2005-2007), votó a favor para que Luis Abelardo Patti,
torturador en la última Dictadura Cívico-Militar, asuma como Diputado (¡para
muestra basta un botón!). Tuvo un fugaz paso como Ministro de Desarrollo social
de la Ciudad de Buenos Aires (2007-2008).
A comienzos de 2010 luego de la renuncia de Abel Posse, asume como Ministro de
Educación del Gobierno porteño. En su gestión ha mostrado cuál es su interés por
la educación pública, un rápido repaso por algunos de los hechos nos dejan ver
que en su gestión se achicó presupuesto educativo, puso en funcionamiento aulas
containers (en una de estas aulas un directivo sufrió una descarga eléctrica por
lo que Bullrich fue multado por el Juez Gallardo en 2014), también llevó
adelante la implementación de un sistema de inscripción que fracasó dejando a
miles de chicos sin poder ir a la escuela (o teniendo que recurrir a la escuela
privada). Asimismo podemos recordar el contrato para la compra de notebooks con
la firma PRIMA SA (la única oferente en la licitación), del Grupo Clarín,
sospechada de sobreprecios (vale traer al recuerdo también que el programa lo
denomina Sarmiento, toda una definición ideológica), cierre de cursos,
eliminación de la Tecnicatura en Seguridad Social que se había creado en 1983
demostrando una vez más su desinterés por las políticas sociales. Otra multa
tuvo el Ministro por no limpiar el Centro Educativo Isauro Arancibia del barrio
de San Telmo, que honra al maestro y dirigente gremial asesinado por la última
dictadura militar de más de cien balazos (quizás el nombre de la institución
lleve al rechazo del ministro).
Esto no es nada, y estamos haciendo un repaso superficial por su gestión. Más
grave ha sido la puesta en funcionamiento de una línea 0800 para denunciar
actividad política de los estudiantes y docentes en las escuelas, lo cual nos
retrotrae a las peores épocas de nuestro país. También ponemos de relevancia la
censura sobre los manuales escolares del bicentenario que buscaban otro relato
histórico desde la perspectiva de los sectores populares. Últimamente se vio
envuelto en el escándalo de corrupción en el que está involucrado Fernando
Miembro[2], pues una importante parte de las contrataciones directas eran con la
Cartera que dirige Bullrich. Al respecto dijo el Ministro en un rapto de
sinceridad, en una frase que nos trae a la memoria la famosa del menemista Luis
Barrionuevo en los años 90, afirmó Bullrich que los problemas se resolverán “si
terminamos de afanar la guita que nos estamos llevando a los bolsillos”.
Por último, destacamos que la prestigiosa periodista Stella Calloni detalla como
el imperialismo norteamericano infiltra los países latinoamericanos a través de
una red de fundaciones, ONG’s, partidos, movimentos, etc., para socavar las
bases de los gobiernos nacional-populares de la región. En 1962 Estados Unidos
creó la USAID, supuestamente para ayudar al desarrollo de América Latina (ya
sabemos que esas “ayudas” no son tales), y también, veinte años más tarde, la
NED (supuestamente con la misma finalidad), ambos financian esta red. Allí
aparecen una fundación y un grupo vinculados al PRO (hoy Cambiemos), y donde
Bullrich cumple un papel importante, la Fundación Pensar, presidida por Macri,
donde el Ministro ocupa el Consejo de Administración, y el Grupo Estela,
presidido por el mismo. Estos grupos actuaron por ejemplo, en forma intensa en
la campaña contra el chavismo en Venezuela.
El proyecto nacional de estos últimos doce años ha traído un conjunto de mejoras
muy importantes en materia educativa, por citar algunas brevemente: se sancionó
la Ley de financiamiento educativo que supone un incremento gradual de los
presupuestos nacionales y provinciales en relación a la educación, y que ya
superó el 6 % del PBI. También en este marco se sancionó la Ley de Educación
Nacional, se incrementó fuertemente el presupuesto educativo en todos sus
niveles. Se incrementó la matrícula a partir de la mejora en la condiciones de
vida, y de aplicación de la AUH, el Plan Conectar Igualdad, en el nivel superior
el aumento fue notable, con aumentos salariales, incremento de becas, al mismo
tiempo que se articularon medidas de desarrollo científico y tecnológico, de
repatriación de científicos, etc. En este marco también se crearon nuevas
universidades nacionales, varias radicadas en el Conurbano Bonaerense con un
amplísimo porcentaje de estudiantes que son primera generación universitaria de
su familia, en total se han creado 15 Casa de Altos Estudios, en línea con la
gratuidad otorgada por el peronismo, e incluso en los últimos días se avanzó
estableciendo una legislación más clara que la reformada en los 90 en ese
sentido.
El proyecto educativo de Cambiemos es diametralmente opuesto al de esta última
década, y viene a dar por terminadas estas mejoras, en palabras de Macri “el
problema no está en hacer más universidades. También soy muy crítico en eso. Qué
es esto de universidades por todos lados”. El enfrentamiento constante con los
sindicatos de los trabajadores docentes, y con los estudiantes que defienden la
educación pública, es la manifestación cabal de lo que representa Esteban
Bullrich en materia educativa: desfinanciamiento a la escuela pública, negocios
con (y a costa del) estado, persecución política dentro de las escuelas, censura
ideológica sobre los contenidos, recortes presupuestarios, rebaja de salarios,
etc. La derecha neoliberal no bien a maquillar, quiere tomarse una revancha
clasista. Afortunadamente esto es solo una llamada de atención (que quedará como
anécdota), porque el pueblo argentino atento a los que entregaron la patria, el
22 de noviembre en el Ballotage enterrará nuevamente al modelo neoliberal.
[1] El ajuste propuesto incluía entre otras medidas, recortes a los fondos
docentes, al presupuesto universitario, becas, salario familiar, jubilaciones,
pensiones, empleos públicos (unos 40 mil menos), mayor flexibilización laboral,
etc.
[2] Recordemos que entre 2012-2015 la empresa ¡sin empleados! de Fernando
Miembro recibió 21 millones de pesos en contrataciones directas con el Gobierno
que encabeza Mauricio Macri.
*Sociólogo (UBA). Docente Universitario.
Fuente:
www.sociologiayliberacion.blogspot.com.ar