Sin Valentín: escuela de levante para varones desorientados

Por Euge Murillo

«Hemos estudiado científicamente la seducción durante los últimos 15 años de nuestras vidas. En 2008 fundamos LevantarArte , la primera academia de Argentina y Latinoamerica dedicada al estudio y la divulgación de las dinámicas sociales aplicadas a la seducción . Los testimonios de mas de 1500 hombres que han pasado por nuestras aulas demuestran empíricamente cómo, sobre la base del éxito social, sexual y amoroso, un hombre puede desarrollar al máximo su potencial con las mujeres» . ¿Quién lo dice? La introducción de «El Juego de la seducción», obra maestra de Martín Rieznik y Mike Tabaschek, un libro que en su formato electrónico tuvo récord de bajadas el año pasado -dice Martín-, parte del material bibliográfico de la academia cuyos principales tips se pueden rastrear en YouTube -y vale la pena- para vislumbrar lo que sucede en los cursos presenciales y online donde los muchachos han ido acumulando su «mayor tesoro»: una comunidad con mas de 5000 miembros activos

¿Y si ella no quiere coger?

Esta pregunta, puntapié incial para meterse de lleno en la escuela, se responde antes de la inscripción en un video fechado el 22 de Enero del 2019. El portavoz es Martin Rieznik, fundador junto a su hermano Andres, de LevantarArte, una academia de seducción destinada a hombres heterosexuales a los que les faltan dones naturales para llevarse chicas de las fiestas -mucho se habla en la escuela de los «seductores naturales», principales competidores de los académicos.

Martin es conferencista y director de cine, le encanta repatingarse en los sillones para hablar a cámara con los mismos dos cuadros de fondo en una innumerable cantidad de tutoriales en los que despliega argumentos como este: «Si ella no quiere coger seguramente es porque esta incomoda, por lo tanto lo primero que hay que hacer es sacarla de esa incomodidad. Esto se puede hacer de varias maneras». Martín propone invitarla a tomar algo o distender el ambiente: «Si ella se esta sintiendo incomoda, vos le decís: te entiendo perfectamente, no te preocupes, ¿querés tomar algo? Es decir, no la presiones. Tampoco le preguntes ¿por qué no querés tener sexo conmigo? Porque la obligas a darte una razón. Y no hay una razón muy firme, simplemente se esta sintiendo incómoda. ¿Y sabés por que se siente incomoda la mayor parte de las veces? Porque ha tenido muchas experiencias de hombres que la tratan súper bien, hasta que tienen sexo y le dicen : te pido un taxi. Entonces tenés que demostrarle que vos no sos de este tipo de hombre.» ¿Cómo? «Si no funciona, tenés que relajarte. Acostarte a dormir con ella, dormirán abrazados toda la noche y a la mañana siguiente tendrán un mañanero. Porque si ella es una mujer que ve que vos la respetaste, no la presionaste y dormiste toda la noche con ella, a la mañana va a tener las hormonas a full».

Martín Rieznik y Mike Tabaschek en una de las presentaciones de su éxito editorial

He ahí la ciencia, hacele cucharita y esperá el momento preciso. «En mi próximo libro La ciencia de la seducción que escribí junto a Mariela Tesler, habrá un prólogo de mi hermano Andrés, que es neurocientífico, profesor de comportamiento humano en la universidad Di Tella y conduce La liga de la ciencia en la TV Pública, sobre ‘Epistemología de la seducción’ donde aborda en profundidad el estudio científico de la seducción. Básicamente desde los años 60, con la revolución sexual femenina, científicos de todo el mundo comenzaron a estudiar cómo funciona la seducción, qué nos atrae y qué no. Con Andrés durante años nos hemos dedicado a estudiar eso y de allí es que surge el programa pedagógico de LevantArte. Algunos de los científicos de la seducción más destacados son el alemán Eibl-Eibesfeldt o los estadounidenses Timothy Perper, Helen Fisher y David Buss», explica Martín a Las12, aunque no se priva de terminar sus frases con un «maestro», tal vez porque la entrevista es por whatsapp y el método no es para todas.

Los logaritmos patriarcales de primera generación están activados. Martín ama el feminismo, dice, pero las mujeres son un grupo homogéneo sobre el que se puede aprender con unas cuantas leyes. La ley número uno de la seducción, por ejemplo, es no demostrar interés sexual en un primer acercamiento: «Los hombres podemos decidir por atracción sexual si queremos o no, las mujeres o al menos el 99 % de ellas pareciera que el físico no les es suficiente: Hay estudios científicos que prueban que lo que ellas quieren es recursos y personalidad. ¿Que quiere decir recursos? Por ejemplo tener un titulo universitario, capacidad de liderazgo, sentido del humor , ser cariñoso con tus seres queridos, que seas protector». O sea, hay que tener.

El método de seducción científico podría sonar algo descabellado, incluso probablemente fuera de tiempo y en una linea de producción de estereotipos que trabaja de sol a sol, sin embargo estas teorías son las que reclutan a hombres de entre 16 a 64 años, de empleados rasos a millonarios. Así lo cuenta Nicolas de Marco, director de Uniseducción , primera Universidad Internacional de seducción, al igual que LevantArte tiene sede en Buenos Aires y dictan seminarios en varios países de America Latina. Nicolás cuenta que allí se trabaja mucho con la mentalidad del hombre y su empoderamiento: «Si bien en la cabeza de algunas personas puede estar asociado el estudiar seducción al machismo, es justamente lo contrario. Por eso es que en realidad las clases o el contenido no cambió en absoluto con el auge del feminismo».

Martín no cree que se trate de «empoderar a hombres», él dice que se trata de una salida a la desorientación que pueden sentir algunos, para que puedan apostar a nuevas formas de relacionarse vinculadas a la empatía, el respecto, el amor y la abundancia. En el reconto, parece que tenemos una trinchera para albergar a los heridos por la detonación de la galantería como una virtud a la hora de relacionarse. Serían, al menos, quienes saben que la cuerda esta floja y que no hay mucho de lo que tirar. Las masculinidad hegémonica en esta configuración está adherida a los comportamientos como la piel al hueso y eso no se discute porque nos quedaríamos sin universo de analásis.

Martín, ¿cuando decís amor a que te referís?

–Osvaldo Baigorria, periodista y escritor argentino, dice que en tiempos de relativa paz, es decir, sin guerras nacionales o religiosas, los celos son la causa primera de homicidios. Eso es terrible, tenemos que replantearnos qué es el amor y cuál es la función de la monogamia. Baigorria plantea que la posesión es la antítesis de la libertad y que para ser verdaderamente libres cuando amamos tenemos que plantearnos una reinvención de la palabra amor. La territorialidad y la violencia en el amor están alineadas con un entendimiento del amor como un recurso limitado, como algo que se consume, idea que encaja perfectamente con nuestra sociedad de consumo.

Como seducir a una mujer en 15 minutos , cómo hacerla gozar en la cama, o cómo hacer un trío con dos mujeres son algunos de los títulos de los videos que los coach suben a internet para mostrar algunos de los contenidos de la escuela. La fórmula es la clave para varones que portan una serie de mandatos vitales para un engranaje al que resulta difícil no relacionarlo con el patriarcado. Aunque hay un proceso de reconstrucción y reinvención de palabras, la sensación al hablar con estos muchachos es que se detecta una reproducción escalofriante de estereotipos.

En la página web de Uniseducción se explica con algunas frases el método que utilizan para los cursos, uno de ellos versa lo siguiente: «Vas a saber cuando y donde tocarla para que el cuerpo de ella empiece a sentir deseo sexual por vos» . Con respecto a esto Nicolás asegura que «si bien el deseo no es algo 100% controlable se pueden hacer cosas para lograr que una mujer te desee».

El botón de una maquina es una metáfora bastante utilizada en este mundillo de la seducción: cuando a David Ramos -treintañero y alumno de la academia- le preguntan sus impresiones acerca de su reciente experiencia en LevantArte, él responde: «Ahora se qué botones tocar en una mujer para activar sus emociones mas profundas». La maquinaria está en funcionamiento, las mujeres se convierten en artefactos de producción sexual con interruptores que pueden apagarse o prenderse como la luz o el lavarropas.

Martin Rieznik considera que quienes se dedican a estudiar estrategias de seducción parten de la certeza de saberse rezagados: «Los hombres somos un desastre y tenemos mucho para aprender de las mujeres. Partimos desde nuestra sensibilidad y vulnerabilidad, sabemos que las mujeres nos han sacado ventaja y así básicamente surgió LevantArte y es con esa inquietud con la que se acercan los hombres a los cursos porque son hombres sensibles, preocupados por conectar con ellas. Hay muchas personas que dicen que la seducción es machista porque hay un hombre que gana y una mujer que pierde. Mi concepción de la seducción es que es casi uno de los procesos más lindos que puede atravesar el ser humano cuando decide libremente tener sexo con otra persona. Creo que todos los hombres debían estudiar estrategias de seducción»

¿Los coach de LevantArte han tenido algún tipo de formación que aborde los temas que el feminismo puso en agenda?

-No hemos tenido un debate particular pero sí atraviesa todo nuestro programa de estudio la cuestión de la mujer, básicamente porque la seducción sólo puede existir en una sociedad donde la mujer sea libre de elegir con quien quiere o no quiere tener sexo.

¿Desde el 2008 hasta ahora se ha modificado nada de los contenidos del curso?

–No hemos cambiado ningún contenido de forma drástica. Estamos en una época por lejos mejor a la del 2008 cuando se abrió la escuela porque ahora las mujeres están más libres y más empoderadas y eso es lo mejor que le puede pasar a un seductor. La otra cara del «no es no» es «si es si» , las mujeres están rompiendo con años de sometimiento y abuso pero también están ganando el derecho a decir que sí en una sociedad que las reprimió: el mandato de llegar virgen al matrimonio es un ejemplo. Y eso ya no existe pero sí existe esa doble vara para juzgar la actividad sexual masculina y femenina.

¿Cuanto cuesta la jodita?

«En Uniseducción los cursos son intensivos de Viernes a Domingo, solo 6 cupos por cada fin de semana para garantizar el seguimiento del proceso de cada uno de lo alumnos y el costo es de $10699 aunque hay promociones en las que se puede conseguir el curso por 9000» cuenta Nicolás.

Habilidades sociales vinculadas a la seducción es el nodo que rige los contenidos de estos programas de formación que no han sido revisados a pesar de que el feminismo se ha colado en las múltiples esferas de la vida cotidiana. Salir por la tangente de el «si es si» o la lectura de «las mujeres cambiaron, nosotros nos tenemos que actualizar» no ponen en cuestión los modelos de masculinidad heterosexual si no que detectan un síntoma de extravío a la hora de relacionarse para lo cual la medicina es una escuela que enseñe a seducir.

«Yo estuve en una trieja algo más de dos años, pero hace ya seis meses que estoy en otra relación. A nivel legal no hay nada aún, nosotros tres en su momento hicimos un casamiento simbólico, pero en los papeles se habían casado entre ellas», dice Martín ahondando un poco sobre su vida amorosa y el feminismo: «imposible no hablar de feminismo hoy en día. Creo que no podría estar con una mujer que no se identifique como feminista. En cuanto a mis referentes, creo que hay muchas mujeres que han hecho aportes valiosísimos, Helen Fisher es una de ella sin dudas pero si tengo que elegir las mujeres cuya elaboración más han impactado en mi vida personal son Leil Lowndes que escribió el primer libro sobre seducción que en español se publicó como «Seducción Científica» y Dossie Easton y Janet Hardy que escribieron «La ética promiscua» que es el libro que más me ha influenciado en los últimos años y donde se desarma justamente todas las ideas que tenemos sobre masculinidad, feminidad y amor romántico»

Los estereotipos son la materia prima de esta alianza entre ciencia y seducción, en donde «todo está probado» y el funcionamiento esta garantizado. Es claro que el problema no es seducir si no cuales son los parámetros en los que rige la dinámica que divide al mundo en dos: parece que la parte «A» (hombres) estudian a la parte «B» (mujeres), sacan conclusiones, difunden y ponen en práctica los resultados. Al amor, la empatía y la abundancia los contenidos que disparan estas conclusiones les quedan un poco chicos. A pesar del movimiento sísmico a nivel planetario producido por el feminismo en el último lustro, estas iniciativas que funcionan subcutaneamente, entrelazan hebras que a primera vista podrían pasar como puestas en escena de ciencia ficción. Pero no. Desde las trincheras de este tipo de masculinidad en crisis aparecen los coach en estrategias de seducción, exploran la monogamia y el amor romántico. Creen aggiornarse al feminismo y producen matrices que cimentan estructuras en las que a la mujer heterosexual no le cabe otra que ser seducida, atravesada por patrones «científicos» y conectada a una matrix en donde su deseo se encripta en tutoriales diseñados por y para ellos.

Pero ojo, capaz que funciona y aparecen en escena, ya educados, varones hétero capaces de hacerte cucharita sin apoyarte hasta que digas sí. Algo es algo.

14/02/20 P/12