Intentaron borrar el pensamiento nacional

Daniel Brión explica la tarea de 'rescatar' la figura de Juan Hipólito Vieytes como pieza central de la Revolución de 1810. La contracara de la historiografía dominante.

Durante cinco años investigó la vida de uno de los cuadros políticos más importantes en el armado de la etapa fundacional del país, trabajo que plasmó en el libro Juan Hipólito Vieytes. Jabonero y Revolucionario. "Alguien totalmente olvidado por los historiadores liberales –dice Daniel Brión– que intentaron borrar la memoria para que no existiera un pensamiento nacional. Ese fue el triunfo de la línea fusiladora que empezó con Caseros". Pocos como él para usar "esa" palabra: Daniel, escritor y periodista, es hijo de Mario, uno de los fusilados en los basurales de José León Suárez en 1956.

Impulsor del homenaje permanente a la Vuelta de Obligado desde hace casi una década como expresión de la soberanía nacional, Brión reivindica a figuras de principios del 1800 corridas debajo de la alfombra y pone al acento en Vieytes, pre revolucionario, ideario de la reforma agraria, ideólogo de lo que después fue la defensa contra las invasiones de flotas franco británicas, y muerto en la indigencia.

–Usted menciona, con ironía, escuelas, calles y hasta un pueblo que llevan como nombre a Vieytes. ¿Por qué?
–Quise explicar lo que considero una burla. Es decir, haber usado como denominación su apellido, pero al mismo tiempo no sólo no contar quién fue, sino, además, taparlo. Después de 1810, la Primera Junta le encargó a Vieytes elegir un lugar para resistir una posible invasión de barcos franceses e ingleses. Tarea que después le sirvió a Rosas para hacer realidad la gesta de Obligado.

–¿En qué otras cosas se destacó?

–Fue uno de los grandes pre revolucionarios, pata fundamental para el triunfo de la Revolución de Mayo. Desistió de figurar en la Primera Junta porque no buscaba renombre. Y además, aunque no me olvido de Mariano Moreno con La Gaceta, Vieytes fue el primer periodista que militó en aquella gesta con su Semanario de Agricultura y Comercio.

–¿De qué manera?

–Condenó las extensiones de tierras improductivas y pregonó la reforma agraria como eje central de la economía nacional, trabajó para el fin de la esclavitud, y pidió respetar a los pueblos indígenas. Era un visionario que desde joven exigió una nueva formación para los educadores. Nunca se quedó quieto.

–Con un final parecido al de varios que intentaron cambios similares...

–Sí, y eso es a lo que me refería cuando hablaba de historiografía liberal. Desde la famosa jabonería que trabajaba -propiedad de Rodríguez Peña- Vieytes conspiró siempre contra los poderes dominantes, y eso no se lo perdonaron. No es casualidad que Rosas, San Martín, Artigas y él hayan muerto en el exilio, Belgrano en la indigencia, o Moreno en alta mar, tirado al agua cubierto con una bandera inglesa. Ni siquiera sabemos dónde quedaron los restos de Vieytes, que pasó sus últimos días siendo denigrado de manera vergonzosa.

–¿Cómo?

–Álvarez Thomas lo declara "traidor", ordenaron embargar sus bienes. Lo único que le encontraron fue una mesa, algunas sillas, poca vajilla y 108 libros. Esa era toda su "riqueza".

Tiempo Argentino


 

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