1700 Entra en funcionamiento la primera imprenta
en el Virreinato del Río de La Plata que, a diferencia de las que funcionaron
en el resto de América, fue construida con maderas de la selva del Alto
Uruguay y el Alto Paraná, en una misión jesuítica. Los religiosos imprimieron
varios libros en guaraní para evangelizar a los indígenas de la región.
1766 La segunda imprenta que tuvo el país funcionó en el Colegio Monserrat
de Córdoba que regenteaban los jesuitas. Una década después, esa imprenta
fue destinada a la Casa de los Niños Expósitos en Buenos Aires.
1764 De ese año datan las primeras gacetas manuscritas que circularon en
el puerto de Buenos Aires. Uno de esos noticiarios, escrito durante el gobierno
del virrey Pedro de Cevallos, se conserva en la Biblioteca Nacional. Se
trata de la Gazeta de Buenos Ayres, mensuario oficioso de ocho páginas de
25 por 15 centímetros fechado el martes 19 de junio.
1778 El 21 de noviembre el virrey Juan José de Vértiz y Salcedo decretó
la instalación de la Real Imprenta de los Niños Expósitos, la primera que
funcionó en Buenos Aires. Estaba en la esquina de Potosí (actual Moreno)
y Perú donde funcionaba un orfanato. Fueron sus pupilos los primeros tipógrafos
en la región.
1781 El 8 de enero apareció Noticias recibidas de Europa por el Correo de
España, que algunos historiadores consideran el primer Periódico impreso
en el Río de la Plata. Hay polémica respecto de su origen y periodicidad.
Un despacho de Ámsterdam decía: “Los ingleses están preparando una expedición
pirata a Buenos Aires” (sic). Era una primicia. Faltaba un cuarto de siglo
para que ello ocurriera.
1801 El miércoles 1’ de abril apareció el Telégrafo Mercantil Rural, Político,
Económico e historiográfico del Río de La Plata, que a los pocos meses tenía
236 suscriptores: 159 en la ciudad capital y 77 en las provincias del Virreinato.
Lo editó Francisco Antonio Cabello y Mesa, abogado nacido en Extremadura,
España, en 1764. Fue el primer periódico de Buenos Aires. Su última edición,
la número 110, salió el 17 de octubre de 1802. Fue censurado por el virrey
marqués del Pino por sus críticas al gobierno y el tono picaresco de sus
artículos. Tenía ocho páginas, salía en su primera época los miércoles y
sábados, pero luego sólo los domingos. Se imprimía en la Real Imprenta de
los Niños Expósitos.
1802 El miércoles 1’ de setiembre
salió el Semanario de Agricultura, Industria y Comercio. Fue su director
Juan Hipólito Vieytes, considerado el primer periodista argentino. Con la
primera invasión inglesa en 1806 se suspendió su edición, reanudada con
la reconquista de la ciudad. Su historia -de 218 números de ocho páginas
cada uno terminó el 11 de febrero de 1807 con la segunda invasión de los
británicos.
1807 El 23 de mayo, con las invasiones inglesas, circuló en Buenos Aires
La Estrella del Surlhe Southern Star. Era un periódico bilingüe hecho en
Montevideo que abogaba por la libertad de comercio en las colonias de España.
Tras la derrota de los británicos, que lo editaban, la máquina impresora
fue vendida a la Imprenta de los Niños Expósitos.
1809 El 14 de octubre, el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros publicó La
Gazeta del Gobierno de Buenos Ayres. Funcionó hasta el 9 de enero de 1810.
Publicó 51 números.
1810 El 3 de marzo apareció el Correo de Comercio. Lo fundó Manuel Belgrano.
Colaboró Juan Hipólito Vieytes. El último de sus 52 números salió el 6 de
abril de 1811. El jueves 7 de junio, por una disposición de la Primera Junta de Gobierno,
nació La Gazeta de Buenos Ayres, para publicitar los actos del nuevo gobierno
y difundir las ideas independentistas. Se encargó la tarea a Mariano Moreno,
Manuel Belgrano y Juan José Castelli. Las luchas internas en el gobierno
se notaron en el periódico que, tras la muerte de Moreno, tuvo como directores
sucesivamente al deán y diputado por Córdoba Gregorio Funes, al porteño
Pedro José Agrelo y al clérigo Vicente Pazos Silva. A mediados de diciembre
de 1811, el Triunvirato, que había sucedido a la Junta nombró al joven abogado
tucumano Bernardo Monteagudo co redactor, junto con Pazos Silva, de La Gazeta
de Buenos Ayres, que tenía en ese momento dos ediciones semanales: los viernes
y miércoles. La rivalidad ideológica entre ambos sirvió de excusa a Bernardino
Rivadavia para suplir el periódico y crear, el 20 de marzo de 1812, la Gazeta
Ministerial. Con el tiempo, el 1º de enero de 1815, la publicación retomó
su nombre original y cerró definitivamente el 12 de setiembre de 1821.
1811 El 20 de abril se aprobó el primer reglamento de libertad de imprenta.
El artículo lo era un calco del sancionado meses antes por las Cortes Generales
de España que eliminó la censura previa para todos los temas, con excepción
de los religiosos. El 30 de abril la Junta de Gobierno de Buenos Aires nombra por decreto nuevo
director de La Gazeta de Buenos Ayres a Pedro José Agrelo y le asigna un
sueldo de dos mil pesos. De esa manera se convierte en el primer periodista
argentino remunerado por su trabajo intelectual.
Carlos
Ulanovsky nació en Buenos Aires
en 1943 y es periodista desde 1963. Trabajó en numerosos diarios
y revistas en los que con frecuencia desarrolló la temática
de los medios de comunicación y su crítica, en especial, de
la televisión. Es autor de doce libros, entre los que figuran
TV Guía Negra (con Sylvina Walger, 1973) y TV Argentina 25 años
después (1975), Días de radio (con Marta Merkin, Juan José Panno
y Gabriela Tijman, 1995, 2004), Paren las rotativas (1997, 2005)
y Estamos en el aire (con Pablo Sirvén y Silvia Itkin, 1999,
2006). Entre 2003 y 2005 fue director de las radios de la Ciudad
(AM 1110 y FM 92.7).
1812 El 7 de enero se conoce
El Censor, vocero del Cabildo de Buenos Aires, cuyo director, Vicente Pazos
Silva, había dirigido La Gazeta de Buenos Ayres. Publicó 177 números, el
último de ellos, el 6 de enero de 1816. El 29 de marzo Bernardo Monteagudo,
que había renunciado a la dirección de La Gazeta de Buenos Ayres funda Mártir
o Libre, del que sacó nueve números, hasta el 25 de mayo de ese año. El 14 de julio apareció El Grito del Sur. Fundado por la Sociedad Patriótica,
se editaron treinta números, hasta el 2 de febrero de 1813.
1813 El 27 de febrero salió el periódico oficial El Redactor de la Asamblea,
que hacía fray Cayetano Rodríguez. Lanzó 24 números y su última aparición
fue el 30 de enero de 1815.
1814 Durante el sitio de Montevideo, el ejército de Alvear editó El Diarista
del Ejército, donde salían órdenes del día, proclamas y demás ocurrencias
que tenían lugar durante esa campaña. Ese año salió también el periódico
Unión Argentina.
1815 El 10 de enero apareció
El Independiente, redactado por Manuel Moreno, que publicó trece números.
Su fin llegó el 11 de abril de ese año. En mayo se conoció el primero de
los cuatro números del mensuario Observaciones Acerca de Algunos Asuntos
Útiles. Su director, el chileno emigrado fray Camilo Enríquez, tocó temas
como la libertad civil, la educación militar y las encuestas literarias.
El 15 de agosto reapareció El Censor, esta vez bajo la dirección del liberal
cubano Antonio José Valdés hasta principios de 1817 y de fray Camilo Enríquez
hasta su cierre, el 6 de febrero de 1819. Entre el 12 de setiembre de ese
año y el 12 de noviembre de 1816, Antonio José Valdés publicó 61 ediciones
de La Prensa Argentina, que aparecía los martes. Trataba temas políticos
e información general, que iban desde la oposición y las corridas de toros
hasta el estímulo de la idea de una monarquía incaica. El 18 de noviembre
Felipe Senillosa editó Los Amigos de la Patria y de la Juventud, dedicado
a encauzar la educación juvenil. Trató temas de matemática y física, entre
otros, hasta mayo de 1816.
1816 El 1º de mayo apareció el primer número de El Redactor del Congreso
Nacional, órgano del Congreso que ese año proclamó la independencia nacional
en Tucumán. Fray Cayetano Rodríguez y el deán Funes participaron en algunos
de sus 52 números, el último de los cuales está fechado el 28 de enero de
1820. El lunes 19 de agosto Manuel Antonio Castro defendía las ideas monárquicas
desde El Observador Americano. Abundó en noticias sobre Chile, propugnó
la educación de las mujeres y se opuso al federalismo. Cesó su publicación
el 4 de noviembre del mismo año. El 30 de agosto se editó La Crónica Argentina, continuadora de El Censor
de 1812. Su director, Vicente Pazos Silva (que agrega a su firma el apellido
Kanki, de origen aymará), había traído de Europa la imprenta que llamó Del
Sol. El Director Supremo Juan Martín de Pueyrredón cerró la publicación
el 8 de febrero de 1817. El 15 de setiembre apareció otro periódico con
el nombre de El Independiente, que dirigió Pedro José Agrelo. Los artículos
aparecidos en sus diecisiete números criticaron al gobierno y abogaron por
la implantación de la Constitución inglesa en el orden político. Salió hasta
el 7 de enero de 1817. La Colmena, periódico político dirigido por Santiago
Wilde, se imprimió en la Imprenta de los Niños Expósitos. Era un cuaderno
de 32 páginas escrito en prosa y en verso. El 23 de octubre, desde la imprenta
de la Independencia, se distribuyó El Desengaño, periódico dedicado a cuestiones
agrarias, económicas y políticas, redactado por Bartolomé Muñoz. Desapareció
el 17 de diciembre del año siguiente.
Tapa del diario "El Hijo Negro del Diablo
Rosado", periódico editado por la oposición durante el gobierno de
Manuel Dorrego. Buenos Aires, 24 de julio de 1828 (Archivo General
de la Nación). Clic para agrandar.
1817 El 10 de julio la imprenta ambulante del ejército a las órdenes de
Manuel Belgrano imprimió el Diario Militar del Ejército Auxiliar del Perú,
que se convirtió en el primer periódico tucumano. Salieron 78 números hasta
el 31 de diciembre de 1918. El 2 de setiembre se conoce el primer ejemplar
de El Avisador Patriota y Mercantil de Baltimore, un ciudadano de Buenos
Aires, cuya única finalidad fue contestar los panfletos contra Pueyrredón
que desde la ciudad de Baltimore, Estados Unidos, escribían y difundían
los desterrados Pazos Silva, Manuel Moreno y Pedro José Agrelo. Su corta
vida finalizó a los veintisiete días de iniciado.
1818 El 1º de enero la Imprenta de los Niños Expósitos dio forma a El Español
Patriota de Buenos Aires, que se extinguió al segundo número, un mes después.
Entre el 29 de marzo y el 17 de mayo se publica El Independiente del Sur,
primera publicación francesa en Buenos Aires. Este periódico bilingüe fue
redactado por los franceses Carlos Robert y Juan Lagresse, quienes, por
ser opositores a San Martín y O'Higgins, fueron acusados de conspiración
y fusilados. El 15 de octubre, Agrelo hace la primera publicación especializada
del país: El Abogado Nacional. El último de sus once números salió el 1º
de marzo de 1819. El Duende de Santiago fue un periódico chileno que apareció en Buenos Aires
por intermedio de la Imprenta de los Niños Expósitos. Estaba vinculado con
los hermanos Carreras, fusilados en Mendoza por oponerse a la campaña de
San Martín y O'Higgins.
1819 El 2 de abril se publicó
El Americano, dirigido por Pedro Feliciano Cavia hasta el 11 de febrero
de 1820, fecha de su última edición (la número 46). Abordó temas Políticos
a favor de los unitarios, de interés general y artísticos, e incorporó información
del resto de América. Hizo su aparición La Gaceta Federal, el Primer periódico
de Santa Fe-Su director fue el chileno José Miguel Carrera, que quería vengar
el fusilamiento de sus hermanos Y recuperar el poder en su país.
1820 El 25 de marzo apareció El Año Veinte, cuya propiedad se atribuyó al
gobernador de Buenos Aires Miguel de Sarratea. El último de sus cinco números
salió el 22 de abril; su duración abarca aproximadamente el tiempo que Sarratea
estuvo en el gobierno. Allí se inició el poeta Y Político argentino Juan
Cruz Varela. En abril surgió El Despertador Teofilantrópico Místico Político,
la Primera Publicación del sacerdote Francisco de Paula Castañeda, quien
editó numerosos periódicos de nombres estrafalarios. Sacó 75 ediciones,
la última el 12 de octubre de 1822. Ese mismo año, el religioso produjo:
El Defensor Teofilantrópico Místico Político (cincuenta números, hasta 1822),
el Gauchi-Político (veinticuatro ediciones, hasta el 21 de julio de 182l),
el Desengañador Gauchi-Político (veintisiete números, hasta 1822), el Paralipomenon
del Suplemento del Teofilantrópico (hasta 1822) y el Suplemento al Despertador
Teofilantrópico Místico Político (hasta 1822). Con este tipo de publicaciones
el sacerdote combatió al liberal Pedro Feliciano Cavia, quien propulsaba
la desaparición de los conventos desde El Americano. En Mendoza apareció
El termómetro del Día, que duró siete números. El 6 de julio se publicó el primero de los 38 números del Boletín del Ejército
contra el Gobierno de Santa Fe, que se dejó de hacer el 23 de noviembre
de ese año. El 8 de julio nació La Gaceta de Mendoza, sucesora de El Termómetro
del Día. Sus redactores fueron Agustín Delgado, Agustín Burdel y Juan Escalante.
Sacó diecisiete ediciones, la última el 9 de setiembre del mismo año. El
14 de agosto se editó el primer periódico no militar de Tucumán. Se llamó
El Tucumano Imparcial, que llegó a sacar tres ediciones El 9 de setiembre,
desde la Imprenta de los Niños Expósitos, se reparte La Estrella del Sur,
que sacó nueve números hasta el 16 de octubre de ese año. Fueron sus redactores
Juan García Mota, Ramón y Avelino Días y Salvador María del Carril. Salió
un solo número de El Constitucional, dedicado a la crónica científica, literaria
y política. El 2 de noviembre Cayetano Campana publicó Legión de Orden Voz
del Pueblo, que abogaba por la paz y el orden social. Tras diez ediciones
dejó de salir el 12 de enero de 1821. El 17 de noviembre se editó, en la Imprenta de los Niños Expósitos, el primero
de los cuatro números del Semanario Político Compendio de documentos y noticias
así exteriores como interiores del país, que dejó de hacerse el 8 de diciembre
de ese año. El 19 de diciembre Pedro Feliciano Cavia sacó El Imparcial, con el objetivo
de demoler las posturas de Castañeda. El gobierno suspendió su impresión
el lo de marzo de 1821 por el cariz que había tomado la polémica entre ambos.
En los once números del periódico, Cavia había llevado el ataque hasta la
vida privada e íntima del religioso.
Septiembre 2011,
FATPREN homenajeó a periodistas desaparecidos durante la dictadura
militar 1976-1983.
1821 El 20 de enero apareció
el prospecto que anunciaba la salida de Las Cuatro Cosas, El Antifanático,
El Amigo de la Ilustración cuya Hija Primogénita es la Tolerancia. La última
de las cinco ediciones, dirigidas por Pedro Feliciano Cavia, fue el 3 de
marzo de ese año. El 27 de marzo el padre Castañeda publicó Doña María Retazos, que alcanzó
los quince números, el último en 1822. Este mismo año el sacerdote sacó
también: La Matrona Comentadora, de los Cuatro Periodistas (que cerró el
24 de octubre de 1822) y Eu Nao Me Meto Con Ninguen (nueve ediciones en
castellano desde el 24 de julio hasta el 15 de setiembre). El 9 de mayo
apareció la primera edición del Boletín del Ejército que se distribuía con
La Gazeta de Buenos Ayres. Su fin llegó el 12 de julio del mismo año. El
12 de mayo salió El Argos de Buenos Aires, impulsado por Julián Segundo
Agüero, quien un año antes había fundado la Sociedad Literaria. Fue redactado
sucesivamente por Santiago Wilde, Ignacio Núñez y otros miembros de la entidad
como el deán Funes. Su última aparición fue el 3 de setiembre de 1825. El
14 de julio, el poeta y ex soldado de la independencia Juan Crisóstomo Lafinur
sacó El Curioso, periódico científico, literario, económico, en la Imprenta
de los Niños Expósitos, donde se hicieron sus cuatro únicas ediciones. El 14 de agosto se conoció El Amante del Bien Público, cuyo segundo y último
número está fechado del 7 de setiembre. Si bien este periódico, impreso
por los Niños Expósitos, no tiene el año de aparición en su portada, los
historiadores coinciden en que fue confeccionado en 1821. Desde el 22 de agosto hasta el 12 de octubre la porteña Imprenta Álvarez
sacó el Boletín de la Industria, del que se conocieron once números. El 24 de agosto el ministro Bernardino Rivadavia firmó el decreto que creó
el Registro Oficial de la Provincia de Buenos Aires, cuyo objetivo fue suprimir
la comunicación de leyes y decretos por medio de bandos. Seis años después,
durante la presidencia de Rivadavia, fue al mismo tiempo el “Registro Nacional”.
Tuvo una segunda época que se inició el 1º de mayo de 1851. El 10 de setiembre,
Pedro Feliciano Cavia sacó El Patriota hasta el 28 de noviembre, cuando
se conoció su novena y última edición. El 3 de setiembre, el general francés
Juan José Dauxion Lavayse redactó por primera vez El Restaurador Tucumano,
que apoyaba la campaña del Ejército Libertador del Perú, que dirigía San
Martín. Tiró nueve números, el último el 18 de diciembre de ese año bajo
el lema: Trinidad, Congreso, Cooperación con el Ejército Libertador del
Perú”. El 12 de setiembre el gobierno de Rivadavia suprimió por decreto
la impresión de La Gazeta de Buenos Ayres y argumentó que se debía a la
renuncia de su último redactor, Manuel Antonio de Castro. Asimismo estableció
que el Registro Oficial ocuparía las funciones del primer periódico patrio.
En diciembre nació el primer periódico de Entre Ríos. Se llamó El Correo
Ministerial de Paraná y sus redactores fueron Juan Pedro Agrelo y Domingo
de Oro. Dejó de salir el 5 de agosto de 1823.
1822 El 26 de enero El Espíritu de Buenos Aires conoció las calles de la
ciudad, en las que permaneció hasta el 4 de julio, tras veintiocho números
que se hicieron en la Imprenta de Independencia. El 15 de febrero Vicente
Fidel López y Planes (autor del Himno Nacional) fundó el Registro Estadístico,
la primera publicación técnica de este tipo en el país. Cerró el 2 de setiembre
de 1825. El 15 de abril de 1822 salió La Abeja Argentina, otra creación
de la Sociedad Literaria. Lo redactaron Antonio Sáenz, el deán Funes, Manuel
Moreno y otros miembros de la entidad hasta 1823. El V de mayo comenzó la
primera época de El Diario de Sesiones de la Honorable Junta de Representantes
de la Provincia de Buenos Aires, que terminó en diciembre de 1825. La segunda
etapa fue entre 1827 y 1851 y tras la caída de Rosas se inició su tercera
época. El 23 de mayo, apareció en Mendoza El Verdadero Amigo del País, que
tuvo 55 ediciones hasta su cierre en 1823. Lo redactó Juan Crisóstomo Lafinur.
Desde las páginas de El Orden, aparecido el mismo año en esa provincia,
se le opuso un padre domínico de apellido Torres, contrario a las reformas
liberales del gobierno mendocino. El 15 de junio salió el periódico oficial
de Mendoza, El Registro Ministerial, de aparición semanal, redactado por
Lafinur. El 28 de julio los hermanos unitarios Florencio y Juan Cruz Varela
editaron, junto con Ignacio Núñez, el primero de los 72 números de El Centinela,
que llegó a su final el 7 de diciembre de 1823. En julio la Sociedad Literaria lanzó el primero de los tres números del
mensuario El Ambigú de Buenos Aires, que terminó en setiembre. Antes había
sacado El Precio Corriente, mensuario exclusivamente mercantil en pro del
comercio, la agricultura y la industria. Entre el 8 de agosto y el 7 de noviembre fray Cayetano Rodríguez publicó
once números de El Oficial del Día. El 9 de setiembre, el padre Castañeda, motivado por la reforma eclesiástica
que impulsaba el gobierno, inició otra lista de publicaciones: La Guardia
Vendida por el Centinela y la Traición descubierta por el Oficial del Día
(del que se publicaron once números hasta el 7 de noviembre), La Verdad
Desnuda (cinco números desde el 24 de setiembre hasta el 16 de octubre y
una sexta edición el 9 de agosto de 1823 desde Montevideo, donde se exilió
al ser expulsado de Buenos Aires). En octubre, sacó el primero de los dos
números de El Lobera de a 36 Reforzado, que fue una segunda versión de El
Lobera del Año 20, de José María Calderón. El 19 de noviembre nació el periódico quincenal El Correo de las Provincias,
de Fortunato Lemoyne. Duró cinco meses y terminó con el número 17 el 10
de abril de 1823. Ese año salieron dos números de L'Occident. Escrito en francés y castellano,
refutó la publicación de La Verdad Desnuda del padre Castañeda, polémica
que extendió a otras como Independencia de Nueva España, Libertad de Quito
(reimpreso en Buenos Aires) y El Hombre Libre.
Los aportes del
periodismo en el proceso de memoria, verdad y justicia.
En el marco de la Jornada sobre Comunicación y Derechos Humanos,
que se realizó en el predio de la ex Esma (22/11/11) se analizaron
los aportes del periodismo de investigación al proceso de memoria,
verdad y justicia en la región, su tratamiento informativo y
la búsqueda de una identidad regional. De la mesa participaron los periodistas Horacio Verbitsky (Argentina),
Mónica González (Chile), Iván Marsiglia (Brasil) y Roger Rodríguez
(Uruguay). Verbitsky recordó a la agencia de noticias Ancla, fundada durante
la dictadura por Rodolfo Walsh y aseguró, "los grandes medios
argentinos fueron cómplices de la dictadura". Por su parte Mónica
González fue tajante, "bajo dictadura se está contra como periodista
o eres cómplice de ella".
1823 Entre el 2 de enero y el
6 de agosto apareció el Diario de Buenos Aires con información exclusivamente
mercantil que, tras 145 números, dejó la base a La Gaceta Mercantil, que
continuó su temática. El 20 de enero apareció un único número de El Pueblo, que, optimistamente,
prometía salir los días 10, 20 y 30 de cada mes. El 3 de abril los habitantes de Córdoba leyeron El Desengañador, una iniciativa
de corto aliento del gobernador general Juan Bautista Bustos. El 4 de abril Pablo Ramírez sacó por primera y única vez Los Locos son los
Mejores Raciocinadores. Después de eso, un jurado de imprenta lo juzgó y
condenó a un año de destierro. El 25 de mayo salió Teatro de la Opinión, que se convirtió, desde la oposición
al gobierno, en uno de los más importantes periódicos de la época. Sus 65
números fueron dirigidos por Francisco Wilili y Ángel Saravia. El 21 de
junio apareció en Santiago de Chile un periódico que se reprodujo en Córdoba:
El Observador Eclesiástico. Las notas locales las agregaba su responsable
en la Argentina, el sacerdote Pedro Ignacio de Castro Barros, opuesto a
la reforma religiosa implantada en Buenos Aires por Rivadavia. Su última
edición fue la vigésima sexta, del 21 de junio de 1824. El 28 de agosto
se conoció El Ciudadano Imparcial, partidario del gobierno y opositor al
Teatro de la Opinión que desapareció al poco tiempo. También en agosto,
y sólo durante este mes, la imprenta Hallet realizó Anales de la Academia
de Medicina de Buenos Aires. El 1º de octubre apareció La Gaceta Mercantil, que, hasta el 3 de febrero
de 1852, publicó un total de 8.473 números. Por su redacción pasaron hombres
como José Rivera Indarte, Santiago Kierman, Esteban Hallet, Manuel de Irigoyen,
Pedro de Angelis, Nicolás Mariño, Bernardo de Irigoyen y Avelino Sierra.
En 1841, La Gaceta Mercantil importó la primera prensa a vapor del país.
En sus comienzos fue un periódico casi exclusivamente comercial, pero años
más tarde se convirtió a las ideas políticas de Juan Manuel de Rosas. Desapareció
después de la batalla de Caseros. El 2 de octubre el fiscal Agrelo acusó
al periódico opositor fundado y desaparecido ese año Dime con quien andas
de “atacar el honor de las familias y de los individuos, al decoro y respeto
del gobierno, ajados de un modo nunca visto”. El juicio no tuvo éxito: un
brote revolucionario fijó la atención del gobierno en cosas más importantes.
Los veinticinco números del opositor El Republicano emergieron de la imprenta
Independencia entre el 4 de diciembre y el 12 de junio del año siguiente. Tres días antes de Navidad salió en Córdoba El Investigador, continuador
de El Observador Eclesiástico. Hecho por el sacerdote Soler y por Estanislao
Learte, con un fuerte sentimiento provincialista, dejó de salir con el décimo
número el 17 de mayo de 1824. A ese emprendimiento le siguió El Montonero,
que dirigió Juan Antonio Saráchaga, ex ministro de guerra de Córdoba y enemigo
del gobernador Bustos. Ese año apareció en el interior del país el Boletín del Ejército Pacificador
de la Provincia de Tucumán.
1824 El 15 de enero los señores Malde, Sierra y Francisco Bustos lanzaron
en Córdoba El Filántropo ó El Amigo de los Hombres, cuya publicación terminó
el 3 de junio. El 27 de enero Juan Cruz Varela volvió a las andadas con
Antón Peluca, padre de la Señora doña María Retazos, ausente en Santa Fe,
del que salió un solo número que fue acusado por el agente fiscal del crimen
de “abusivo de la libertad de escribir”. Entre el 16 de marzo y el 3 de
junio José María Bedoya, con la colaboración del padre Castañeda, sacó El
Teofilantrópico o El Amigo de Dios y de los Hombres, vocero religioso de
Córdoba. El 19 de junio empezó El Amigo del País, en Mendoza, que terminó
el 2 de octubre. Fueron sus redactores Borja Correa y el sacerdote Torres.
Lo sucedió El Eco de los Andes, que fundaron Juan Alberto Godoy, Lisandro
Calle y José María Salinas y en el que colaboró Borja Correa. Fueron 61
números, que salieron hasta 1825. El 18 de agosto apareció, en Córdoba,
El Chasco Completo del hallazgo precioso del Editor de San Juan. El Defensor
de la Patria tiró diez números entre el 23 de agosto y el 21 de octubre.
Lo redactó el periodista español Félix Baudot, que en su país había publicado
un periódico con el mismo nombre. También en agosto, y hasta 1827, se publicó la Gaceta de la Policía, que
desde el número 2 pasó a llamarse Boletín de la Policía, del que se hicieron
una decena de ediciones en la Imprenta de los Niños Expósitos. El 30 de
setiembre apareció la primera publicación salteña. Fue la Revista de Salta,
que redactó mensualmente José Arenales (hijo del general Juan Antonio Álvarez
de Arenales, integrante del ejército que al mando de San Martín realizó
la campaña al Perú), hasta el 5 de marzo de 1825. El 17 de diciembre apareció El Argentino, con la redacción de Manuel Dorrego,
Pedro Feliciano Cavia, Baldomero García y Francisco Ugarteche. Dejó de salir
con la vigésima quinta edición, el 14 de junio de 1825. Apenas seis días
después de la aparición de El Argentino, Ignacio Núñez, Valentín Alsina
y Pedro Feliciano Cavia publicaban El Nacional, del que salieron 54 números,
el último el 6 de abril de 1826. Su tendencia liberal en lo religioso lo
convirtió en blanco de la prensa católica de Córdoba. El único número de Carnicería Política, redactado por un tal R. Ramírez,
anticipó desde el título el ambiente político que se respiraba en Buenos
Aires. Ese año también salieron en Buenos Aires el Diario de Sesiones del Congreso
Constituyente de las Provincias Unidas del Río de la Plata y El Periódico
Argentino.
1825 El 23 de marzo salió El Pensador Político-Religioso de Chile, que había
sido publicado antes en Santiago de Chile. Castro Barros lo reimprimió en
Córdoba hasta 1827, como había hecho tiempo antes con El Observador. El 28 de marzo los Niños Expósitos imprimieron el único número de El Eleccionario. El 3 de mayo Córdoba conoció a El Cristiano Viejo, que salía en forma de
cartas cada quince días y en las que Justo Rodríguez abordaba el tema de
la tolerancia religiosa. El 6 de mayo, Francisco Gutiérrez y Solano Cabrera
sacaron el mensuario cordobés El Intolerante, hasta agosto. El 12 de mayo
se publicó en Córdoba El Grito de un Solitario, del que el cura Bernabé
Aguilar, crítico de Rivadavia, sacó tres números. En su lugar salió El Solitario
Varón de Cascales, que sostuvo la intolerancia de cultos y atacó a los liberales
de Buenos Aires y al gobernador de San Juan. El 8 de junio, Antonio Díaz, después general uruguayo, redactó el primero
de los 33 números que tuvo El Piloto, el cual dejó de hacerse el 6 de febrero
del año siguiente. El miércoles 29 de junio apareció El Defensor de la Carta
de Mayo, primer periódico de la provincia de San Juan, que sólo alcanzó
a tirar un ejemplar más y que redactó el mismo gobernador, el joven liberal,
Salvador María del Carril. Se hizo en la imprenta del Estado, la primera
de la provincia, cuya adquisición también es mérito del mandatario. De esa
misma imprenta salieron, ese mismo año, el Registro Oficial de la Provincia
y el primer periódico no oficial de la provincia: El Amigo del Orden. Entre
el 24 de octubre y el 15 de setiembre de 1826 el padre Castañeda publicó,
simultáneamente en Córdoba y Buenos Aires, los seis números de Derechos
del Hombre ó Discursos Históricos-místico-político-crítico-dogmático sobre
los principios del derecho político. Además, en la provincia salieron El
Imparcial (el lo de junio) y El Sol de Córdoba. El 18 de noviembre hizo escuchar su voz El Mensagero Argentino (sic). Por
su redacción pasaron Juan Cruz Varela, Agustín Delgado, Valentín Alsina
y Francisco Pico. El último de sus 235 números se imprimió el 9 de julio
de 1827. Tuvo gran trascendencia en la vida política del país y fue defensor
del partido unitario. Ese año salió de la imprenta del Estado El Registro
Oficial de la Provincia de Corrientes, que continuó con irregularidades
hasta mucho tiempo después de la batalla de Caseros. Mientras que en Buenos
Aires aparecieron las ocho páginas del único número de El Sol de las Provincias
Unidas, o la Libertad de La Prensa y El Protestante Recién Convertido, traducción
de un periódico publicado en Londres del que salieron tres números.
1826 El 2 de febrero apareció L´Echo Francais-Journal Commercial, Politique
et Litteraire, que después de 72 números pretendió convertirse en diario
con el nombre de L´Echo. La segunda etapa fue un fracaso: sólo alcanzó las
siete ediciones, la última, el 7 de abril de 1827. Los hizo Juan Lasarre,
que utilizó con soltura la sátira y la ironía. Del 21 al 28 de febrero aparecieron
los dos números de El Avisador, que trataron en particular el tema de la
capital de la República. El 23 de febrero Cavia abordó desde las páginas
de los diecisiete números de El Ciudadano el asunto más discutido de la
época: la capital de la República. Terminó el 3 de junio de 1827. El 28
de febrero, el español Félix Ramón Baudot empezó a publicar en Buenos Aires
La Verdad sin Rodeos. Desde el número 11 hasta el 48, continuó imprimiéndolo
en Córdoba, de donde también debió huir perseguido por los unitarios para
instalarse finalmente en la provincia de Corrientes, donde se editó desde
el número 49 al 99. De esa manera, se convirtió en el primer periódico correntino.
Su última aparición ocurrió el 14 de noviembre de 1829. Un año completo
duró El Correo Nacional, de Antonio Díaz, que tuvo 297 ediciones entre el
29 de marzo y el 30 de marzo de 1827. El 30 de abril el canónigo José Lorenzo Güiraldes dirigió el semanario El
Aura Mendocina, que después de catorce números concluyó el 20 de agosto.
Entre el 13 de mayo y el 16 de setiembre, la imprenta Hallet tiró los dieciocho
números del periódico inglés The Cosmopolite. Para esa época los porteños
conocieron otro periódico en lengua inglesa, The British Packet and Argentine
News, que duró hasta el 29 de diciembre de 1855. Salía los sábados y sus
redactores Thomas George Love (hasta 1845), Gilberto Ramsay y George Thomas
fueron muy amigos de Rosas. Desde el 25 de mayo hasta el 26 de noviembre
Pedro Buitrago dirigió los trece números que tuvo el Pregón de Salta. A partir del 6 de agosto recorrió las calles de la ciudad El Duende de Buenos
Aires, un semanario sobre temas hispanoamericanos que escribieron fray Valentín
San Martin, Bernardo José de Ocampo y Julián Segundo Agüero, hasta el 9
de abril de 1827. El 11 de octubre se leyeron por primera vez los ejemplares de El Tribuno,
escrito por Pedro Feliciano Cavia, Manuel Moreno, Manuel Dorrego y otros
destacados federales. Las dos ediciones semanales, que atacaron implacablemente
a Rivadavia y al Congreso, dejaron de salir el 17 de agosto de 1827. El
11 de diciembre se conoció la primera de las catorce ediciones que el semanario
El Cincinato tiró hasta el 7 de marzo del año siguiente, cuando su redactor,
José María Márquez, fue condenado a seis meses de destierro en Tandil por
sus artículos “abusivos y criminales”. El 21 de diciembre salió el semanario El Investigador. También se imprimieron ese año Papel Sellado de Santiago Wilde (Imprenta
de Hallet), El Rayo (Imprenta Jones), Claras Verdades contra Oscuros Embrollos
(Imprenta Argentina) y Diálogo entre el jesuita Limarco y el quáquero Filón.
1827 El 3 de marzo La Crónica Política y Literaria lanzó el primero de sus
120 números. Redactada por José Joaquín Mora y Pedro de Angelis, hasta el
6 de octubre, defendió la administración de Rivadavia y se ubicó claramente
del lado unitario. El 28 de marzo se fundó el periódico inglés the American,
que alcanzó 39 ediciones y cerró el 18 de agosto. El 20 de abril Joaquín
Mora reemplazó al Correo Nacional por El Constitucional, Diario Comercial
y Político, con que siguió el ataque a los federales. Completó 147 números
el 25 de octubre de ese año. El 10 de abril Lazarte retornó con Le Censeur, Journal Politique et Litteraíre,
que salía tres veces por semana y desapareció el 13 de mayo tras quince
números. Paralelamente, entre el 26 de abril y el 30 de julio, sacó LAbeille
(Journal Politique, Litteraire, Commercial et Yavis Divers), para criticar
al gobierno sucesor de Rivadavia. Entre el V de mayo y el 4 de agosto El Avisador Universal, que salía miércoles
y sábados, tiró 76 números. El 12 de setiembre, Manuel Moreno, Cavia y Wright
redactaron el primer número de Correo Político y Mercantil de las Provincias
Unidas del Río de la Plata, defensor de la política del gobernador Dorrego
y enemigo de Rivadavia y los unitarios. Desapareció en la edición 212, el
28 de noviembre del año siguiente, junto con la revolución que derrocó a
Dorrego. El 28 de octubre Manuel Gallardo -tenaz opositor a Dorrego-y el
federalismo sacó El Porteño, cuya aparición de martes, jueves y domingo
finalizó el 10 de noviembre. El 29 de octubre, apareció El Granizo, otra
creación de los hermanos Florencio, Jacobo y Juan de la Cruz Varela, que
hasta el 10 de noviembre defendió con fervor la causa unitaria. En esos días, los españoles pro federales José María Márquez, Fernando Cordero
y Joaquín Culebras lanzaron La Atalaya Republicana, Diario Político y Comercial,
que culminó con la vigésima quinta edición. El 3 de noviembre El Infierno anunció su salida en La Gaceta Mercantil,
para el domingo siguiente. El 24 de noviembre José María Salinas inició,
en Mendoza, la tirada de El Fénix, que concluyó el 10 de febrero de 1828
tras una docena de ediciones. En esa provincia aparecieron en esos días
El Telégrafo, los periódicos unitarios El Huracán, de Juan Guadalberio Godoy,
y El Iris Argentino, y los federales El Estandarte y La Columna Federal,
de Víctor Barreau. El 29 de noviembre Márquez redactó El Sol de Mayo de 1810. En Atalaya, hasta
el 24 de marzo siguiente. Ese año también se editaron El Cancionero Argentino
(cuatro números en versos adaptados al canto); El Conciliador (un número
que quiso imitar a La Abeja Argentina); Observaciones de un Joven Americano
y El Diario de los Movimientos y Operaciones del Ejército que ha Libertado
a la Provincia de Salta, en Salta. 1828 Entre el 11 de abril y el 26 de julio de 1829, el francés Juan Lasarre,
quien participó en las polémicas políticas de Buenos Aires, apoyó a los
unitarios con una publicación de El Diablo Rosado, que por causa de la censura
tomó otros nombres: El Hijo Mayor del Diablo Rosado, El Hijo Menor del Diablo
Rosado y El Hijo Negro del Diablo Rosado. El 24 de abril, los unitarios hermanos Varela editaron El Tiempo, Diario
Político, Literario, Mercantil, que luego de 342 números, desapareció el
l’ de agosto de 1829. El 9 de mayo se promulgó la ley de imprenta que establecía
“garantías individuales para la libre emisión del pensamiento”. El 25 de
mayo el diputado convencional por la Banda Oriental Baldomero García redactó
nueve números de El Argentino de Santa Fe, que desapareció el 10 de agosto.
El 1º de junio el padre Castañeda continuó su labor periodística en Santa
Fe con Vete Portugués que aquí no es, en plena lucha con Brasil, que había
ocupado la Banda Oriental, al que siguió Ven acá portugués que aquí es. Ese mes también Santa Fe conoció El domingo 4 de mayo en Buenos Aires, que
redactó el diputado convencional por Buenos Aires Vicente Anastasio Echeverría
hasta el 27 de julio. El 28 de junio salió de la imprenta del Estado La
Espada Argentina, del que salieron catorce números de poca trascendencia.
El 23 de agosto, Baldomero García y Ugarteche sacaron en Santa Fe El Espíritu
de la Federación Republicana, periódico político y literario del que se
imprimieron dos números. Entre el 31 de octubre y el 17 de diciembre El
Satélite, redactado por Echeverría y Pedro Salvadores, tiró nueve números
en Santa Fe. También ese año apareció El Rector, que los días 12 y 27 de
cada mes se distribuía en Santa Fe y Buenos Aires. Ese año se publicaron,
además, diecinueve números de Causa célebre de Buenos Aires que redactó
Ramón de Anchorena y la Gaceta Comercial, sólo con avisos.
1829 El 17 de enero, el unitario Manuel Bonifacio Gallardo inició la tirada
de El Pampero, que cerró Rosas el 7 de octubre por su polémico contenido. El 21 de enero, con Buenos Aires Cautiva y la Nación Argentina Decapitada
a Nombre y por Orden del Nuevo Capitán Juan Lavalle, el padre Castañeda
desde Santa Fe respondió al fusilamiento de Dorrego. El sacerdote, antes
unitario, se volcó al federalismo con este periódico que sacó once números. El 26 de enero, en Santa Fe, Baldomero García tiró el primero de los seis
números de El Federal. El 4 de febrero irrumpió en San Juan El Solitario que no tenía día fijo
de salida y apoyaba la política de Buenos Aires, Su octava y última edición
fue el 7 de abril. El 7 de marzo apareció Le Spectateur Franeais-Journal Politique, Commercial
et Litteraire, del que salieron veintitrés números. El 20 de marzo se conoció
El Republicano de San Juan, que tuvo cuatro ediciones y defendió la política
de Rivadavia. El 26 de marzo, en Córdoba, José María Círes lanzó El Republicano,
que concluyó el 13 de mayo. Acompañó la gestión del gobernador unitario
de la provincia, José María Paz. El 2 de mayo, apareció Córdoba Libre, bajo
la dirección de los unitarios Dalmácio Vélez Sársfield y José María Bedoya,
que duró hasta 1830. En julio La Fragua Republicana, de tendencia federal, tiró el primero de
sus cuatro números en San Juan. Cerró el 9 de octubre. En setiembre salió El Orfeo Argentino, primera publicación de carácter musical. El 7 de setiembre se conoció El Lucero, el más importante de la época, que
llegó a 1.121 ediciones, hasta el 31 de julio de 1833, dirigido por Pedro
de Angelis. El 8 de diciembre salió el periódico oficialista cordobés El
Argentino, que redactaron Elías Bedoya y José Rojo. Lanzó 56 números hasta
que cerró en 1830. Ese año en Buenos Aires se publicaron además: Nueva Época de Buenos Aires,
del que salieron cincuenta números sin día fijo, Semanario Científico, Histórico,
Clínico de los Progresos, de la Verdadera Medicina Curativa o de la naturaleza
humana defendida por experiencia, de los ataques preternaturales (sic),
Correo Argentino (colección de piezas musicales mensual), Diario Universal
(órgano federal) y El Vigilante. Diario Comercial, Político y Literario,
que redactó Francisco Reinals. En el interior del país se conocieron también: El Díbuno, El Monitor de
la Campaña y Miscelánea, en Córdoba, y los diez números de Boletín, en San
Juan.
1830 El 5 de enero comenzó El Registro Provisional del Gobierno, que llegó
a los catorce números. El 16 de abril apareció El Factor Alta Gracia en
el interior de Córdoba. Entre el 24 de mayo y el 30 de agosto, reapareció El Nuevo Eco de los Andes,
de Mendoza, que había sido suspendido en 1825. El 19 de junio, nació El Mártir Libre, de apariencia federal, que alertó
sobre el despotismo y cerró dos meses después. El 6 de julio se conoció
El Clasificador o Nuevo Tribuno de Pedro Feliciano Cavia. El gobierno de
Rosas lo suspendió, a pesar de su orientación federal, porque se opuso a
las facultades extraordinarias otorgadas al Restaurador. El 31 de julio
se redactó en verso El Gaucho, de filiación federal; cerró el 29 de diciembre. Ese mes también salió El Periódico de Buenos Aires, escrito en verso. El 19 de agosto salió El Torito de los Muchachos, al que siguió, a partir
de octubre, El Toro del Once, que concluyó en 1831. Ambos editados en verso
por el federal Luis Pérez. El 22 de agosto se editó en la localidad cordobesa
de Sancalá El Serrano, de fray Juan Pablo Moyano. Del 6 de setiembre al
13 de febrero de 1832 salieron en Buenos Aires 76 números del Boletín del
Gobierno. El 19 de octubre, se distribuyó el diario mercantil de tendencia federal
El Mercurio Bonaerense, que cerró el 9 de julio del año siguiente. El 31
de octubre se largó el semanario La Argentina, dedicado a temas femeninos
y políticos con un leve tinte federal. En octubre despuntó en Córdoba La Aurora Nacional, redactada por Dalmacio
Vélez Sársfield y José Maria Bedoya. El 8 (de noviembre se imprimió en Santa
Fe otro periódico con el nombre de El Federal que, tras 57 números, cerró
el 22 de junio de 1831. El 16 de noviembre Petrona Rosende de Sierra hizo
el primer periódico redactado por una mujer, que dedicó a temas femeninos.
Se llamó La Aliada y completó dieciocho números, hasta el 14 de enero de
1832. En este año se publicaron además: Gaceta de los Enfermos, de Pedro
Martínez, y Boletín de Comercio en Buenos Aires. En Mendoza, El Coracero,
de Juan Guadalberto Godoy, El Boletín del Ejército de Mendoza, El Consejero
y El Yunque Republicano, de Francisco Ignacio Bustos.
1831 El segundo día del año Juan Lasarre sacó El Látigo Federal o El Risueño,
que salía dos veces por semana, El 4 de enero, Pedro Ramírez inició la decena
de números que tendría finalmente El Filántropo. El 17 de abril, Don Gerundio
Pincha Ratas o El Abogado de los Unitarios tiró cinco números en versos
de estilo gauchesco refutando a la oposición exiliada en Montevideo. El 4 de mayo salió el semanario francés Le Narrateur Franvaís. Feuille de
Commerce, Pólitique et Literaire cuyo octavo y último número apareció el
1’ de junio. El mismo cónsul francés Lavessan redactó ese año un periódico
que llamó LEtoile Du Matín. El 10 de mayo se empezó a distribuir El Regulador,
diario mercantil que alcanzó 54 números al 31 de agosto. El 16 de mayo salió
El Diario de la Tarde, que sobrevivió a todo el período de Rosas. Su primer
director fue Pedro Ponce y el último, Federico de la Barra. El 10 de julio, El Telégrafo reemplazó a El Mercurio Bonaerense. Cerró en
octubre. Del 17 de julio al 10 de octubre se leyó el periódico federal De Cada Cosa
un Poquito. El 27 de agosto, Luis Saavedra redactó el número inicial de
las seis ediciones de El Grito de los Pueblos, desde donde defendió a Rosas
y reclamó una Constitución. El 17 de octubre hizo su aparición El Gaucho y casi simultáneamente -el
18 de octubre-La Gaucha, redactados por Luis Pérez. La colección de ambos
consta de veintidós números, aunque uno cerró el 20 de diciembre y la otra
once días después. El 27 de octubre apareció la primera Circular Marítima,
de la que se hicieron 243 números hasta el mismo día del año siguiente. El 11 de noviembre los porteños se encontraron con La Lechuza, que salió
miércoles y domingos hasta el 7 de diciembre. El 23 de noviembre la prensa
extranjera largó otro periódico: The Cosmopolitan. Aparecía los miércoles,
alcanzó 59 números y cesó su impresión el 9 de enero de 1833. El 19 de diciembre
Le Flaneur. Ambigú Politique et Litteraire inició su tirada, que completó
doce números y redactó, íntegramente en francés, Pedro De Angelis. Desde
el 24 de diciembre El Cometa Argentino clamó por la convocatoria a un Congreso
Constituyente, lo que provocó su cierre el 30 de enero de 1832 por orden
de Rosas. Los responsables de sus veintitrés números fueron José Barros
Pazos, Luis Bustamante y Francisco Beláustegui. Otros medios aparecieron
ese año. La Bruja o Ave Nocturna, dedicada a atacar a Rivadavia; El Republicano
(tres números en diciembre), El Desengaño (periódico de medicina popular
redactado por el doctor José Indelicato) y el Boletín del Ejército Auxiliar
Confederado (que llegó a los catorce números). En Córdoba, Buenaventura
Badía hizo El Federal sin prisiones y Calixto Maria González se largó con
la serie El Clamor Cordobés, La Mujer del Clamor Cordobés, El Hijo Mayor
del Clamor Cordobés y El Abuelo del Hijo Mayor del Clamor Cordobés, todos
en contra de los unitarios. En Mendoza el oficial unitario José Santos Ortiz
se abocó a El Liberto, un periódico de poca importancia, y en Salta aparecieron
los cuatro únicos números de La Diana de Salta. Desde el exilio en Montevideo, Juan Cruz Varela publicó El Otro Periódico
y El Patriota.
1832 El 2 de abril se distribuyó el Precio Corriente Semanal periódico en
castellano, inglés y francés del que se hicieron 177 números, el último
con fecha 29 de agosto de 1935. El 7 de abril Miguel Valencia lanzó El Telégrafo
del Comercio diario comercial, científico y literario que cerró el 6 de
octubre después de 144 números. Ese año aparecieron además, El Almanaque
(un solo número de efemérides astronómicas y guía de Buenos Aires para forasteros)
El Buzón Argentino y La Viuda de un Pastelero.
1833 El 2 de enero apareció El Independiente, diario político y comercial. El 24 de febrero salió el único número de Miscelánea de Damas. Entre el 1º y el 11 de marzo se tiraron los nueve números de El Diario de
Comercio De La Mañana en castellano y con un sumario de las notas escrito
en inglés. El 5 de marzo se inició la tirada de los 111 números que alcanzaría
el diario El Iris, de José Bustamante. El 25 de abril se reanuda La Gaucha, que completa siete números, y El Gaucho
lo hace el 8 de julio, por única vez. Del 22 de mayo al 22 de junio se conoció El Patriota Bonaerense, que salía
tres veces por semana y alcanzó once impresiones. El 25 de junio José Luis
Bustamante empezó con El Defensor de los Derechos del Pueblo, de tendencia
liberal; tiró 94 números, el último el 16 de octubre. El 29 de junio apareció el primero de los dos números que tendría El Rompecabezas,
El 30 de junio chasqueó El Látigo Republicano, periódico “biográfico, político,
ultra-apostólico”, según su propia definición. El 5 de julio se publica
El Restaurador de las Leyes, redactado por Pedro de Angelis, Manuel Irigoyen,
Lucio Mansilla y Nicolás Mariño. Su vida terminó el 5 de octubre del mismo
año. Entre el 6 de julio y el 11 de octubre salió El Amigo del País, periódico
liberal que redactaron Antonio Navarro, Marco Avellaneda y Juan María Gutiérrez.
El 4 de agosto voló sobre Buenos Aires El Águila Federal, periódico satírico,
liberal y antiapostólico que llegó hasta el cuarto número. El 3 de octubre
apareció el único número de El Fígaro. Periódico biográfico, político, antiapostólico,
federal republicano y enemigo de los traidores. Entre el 15 de noviembre y el 10 de diciembre salieron dieciocho números
del Registro Provisional del Gobierno de Buenos Aires. El 11 de diciembre
salió el órgano gubernamental El Monitor, de Pedro de Angelis, que clausuró
su edición con el número 246 el 13 de octubre de 1834. En Buenos Aires se conocieron El Negrito y La Negrita (en verso), que sumaron
entre los dos ocho números; dos números de El Relámpago, papel crítico,
satírico, federal y antianarquista; La Opinión Pública; Los Muchachos, que
redactó Luis Pérez, al igual que las cuatro ediciones del diario político,
literario y mercantil El Avisador,-Dime con Quién Andas, acusado por el
fiscal Agrelo de “atacar el honor» de las familias y del gobierno; El Loco
Machuca Batatas; El Federal Sumiso a las Leyes; dos números de El Escarmiento
de un Unitario; 85 números del diario El Constitucional de Miguel de Valencia;
La Ticucha; Cacíque Chañíl,-Confesión de un Cismático; Crítica de unos Tenderitos;
y Guía de la Ciudad y Almanaque de Comercio. Desde Montevideo, el exiliado
José Rivera Indarte sacó El Investigador 1834 El 2 de enero, desde su destierro en Uruguay, Rivera Indarte editó
La Revista de Montevideo, que terminó el 16 de agosto con 67 números. Del 9 de enero al 30 de abril se pudo leer El Imparcial, codirigido por
José Rivera Indarte y Bernardo Vélez Gutiérrez. El 8 de febrero de 1834 se imprimieron las primeras ocho páginas que, por
número, tuvo The North Star a El 16 de marzo Luis Pérez redactó El Gaucho
Restaurador que se vendió domingos, miércoles y viernes hasta el 3 de abril.
En el mismo año, sacó un solo número de El Correo Extraordinario. El 2 de abril salió L'Echo Des Deux Mondes, publicación en francés que alcanzó
once números. También ese año, el conde de Broadart sacó veintiséis ediciones
de LAbeille. El 18 de abril Francisco Antonio Meana comenzó la tirada de los cinco números
de El Porteño Restaurador. Entre el 19 de abril y el lo de agosto de 1834, salió El Censor Argentino,
diario de Pedro Cavia que publicó ochenta números. A partir del 27 de agosto Bernardo Vélez relató los procedimientos judiciales
en los ocho números que completó El Correo Judicial hasta el 21 de octubre. También en ese mes, pero en Córdoba, aparecieron El Narrador, de José Severo
Olmos, y El Amigo del Orden, redactado por el futuro presidente Santiago
Derqui. El 18 de octubre se conoció La Lanza Federal de Fernando María Cordero,
cuyo segundo y último número se imprimió el 22 de ese mes.
1835 El 5 de enero José Rivera Indarte creó el Diario de Anuncios y Publicaciones
Oficiales de Buenos Aires, que cerró el 30 de setiembre. El 5 de febrero
salió El Noticiador del Puerto, que sumó 59 ediciones. El 13 de setiembre Derqui sacó El Cordobés, que duró hasta el siguiente
año. César Hipólito Bacle fundó El Museo Americano o El Libro de Todo el
Mundo, primer periódico ilustrado con láminas litográficas, que en 1836
cambió por el nombre de El Recopilador. En San Juan, salió una tercera época
de El Amigo del Orden, redactado por Félix Torres, y en Montevideo se imprimió
El Moderador, redactado por los exiliados Julián Segundo Agüero y Andrés
Lamas, que fue clausurado por orden del presidente uruguayo Manuel Oribe
en 1836.
1836 En Montevideo, el exiliado Pedro Cavia editó El Defensor de las Leyes,
y en la provincia de San Juan circularon El Abogado Federal y el Registro
Oficial de la Provincia de San Juan.
1837 El 10 de noviembre salió La Moda, semanario de música, poesía, literatura
y costumbres, considerado como el antecedente más remoto de revista. Lo
dirigió Juan Bautista Alberdi y escribieron allí Juan María Gutiérrez, Vicente
Fidel López, Rafael Jorge Corvalán y Juan Esnaola, entre otros. Algunos
de ellos hacían una miscelánea que incluía referencias a los buenos y malos
modales y a todo lo que se produjo en esa época. Publicó veintitrés números
y cerró el 21 de abril de 1838. En Uruguay, Andrés Lamas fundó con Miguel Cané (padre) Otro Diario, que
también clausuró Oribe. Mientras, en Buenos Aires apareció Boletín Musical,
diario político que entregaba dos páginas litografiadas de música todos
los lunes.
1838 El 15 de abril Andrés Lamas y Miguel Cané sacaron en Montevideo El
Iniciador. Allí colaboraron Bartolomé Mitre (con 17 años), Félix Frías,
Santiago Viola, Florencio v Juan Cruz Varela, Carlos Tejedor y Miguel Irigoyen.
Cesó el primer día del año siguiente. El 11 de noviembre, en Uruguay reapareció
el antirrosista El Nacional, que también dirigieron Lamas y Cané. Luego
se agregó a la redacción Juan Bautista Alberdi y el último que lo redactó
fue Rivera Indarte hasta 1845. Rafael Corvalán redactó El Semanario de Buenos Aires.
1839 El 20 de junio salió el primero de los seis números del semanario El
Zonda de San Juan, que dirigió Domingo Faustino Sarmiento junto con Quiroga
Rosas, Indalecio Gómez y Antonio Aberastain a ese año Alsina, Alberdi, Lamas
y Cané, entre otros, redactaron en Uruguay El Grito Argentino, que completó
33 ediciones. En Mendoza, se distribuyó El Argentino, una hoja de poca trascendencia.
1840 El 23 de enero apareció en Corrientes El Pueblo Libertador, redactado
por Juan Thompson, secretario del general Juan Lavalle en la campaña contra
Rosas. Cesó con el número 22 el 25 de junio. Entre el 11 de noviembre y el 7 de diciembre surgieron en la provincia de
Entre Ríos las siete ediciones de El Sentimiento Entrerriano. El 8 de diciembre salió Le Messager Francaise. Journal Politique, Commercial
et Litteraíre. Terminó el 23 de enero de 1841. En Buenos Aires, Pedro de Angelis editó dos números del Espíritu de los
Mejores Diarios que se publican en Europa y América, uno de 36 y otro de
108 páginas. En Santa Fe, durante la permanencia de Lavalle en esa provincia,
Juan Thompson y Luis Frías redactaron El Libertador, bajo el lema “Viva
la Federación-Muera Rosas”. Y en Córdoba se conocieron los ejemplares de
El Estandarte Nacional y El Federal.
1841 El 7 de enero El Correo de Entre Ríos sustituyó al desaparecido El
Sentimiento Entrerriano. Tiró veinte números. Entre el 25 de abril y el 4 de diciembre de 1842 salió El Nacional Correntino,
que se dejó de publicar por la derrota de los unitarios en la batalla de
Arroyo Grande. Ese año también se editó Defensa Federal, redactado por el
presbítero Alberto González.
1842 El 2 de junio salió El Federal Entrerriano. Entre otros, sus redactores
fueron José Roberto Pérez y Marcos Sastre, quienes publicaron 354 números,
el último en mayo de 1851. En noviembre, desde su exilio en Chile, Domingo
Faustino Sarmiento, junto con Vicente Fidel López y Planes, fundó El Progreso.
Desde allí fustigó al gobierno de Rosas. Entre el 12 de diciembre y el 24
de diciembre de 1851, salió Archivo Americano y Espíritu de la Prensa de
Mundo de Pedro de Angelis. Tiró 61 ediciones, donde aparecieron interesantes
documentos oficiales en inglés, francés y castellano de la época. El 23
de diciembre salió en Corrientes El Avisador Federal, que alcanzó una decena
de ediciones. Ese año apareció en Córdoba El Iris.
1843 El 2 de julio salió el periódico liberal El Republicano de Corrientes,
redactado por José Alsina. Aparecía los domingos y concluyó, con el número
SO, el 9 de junio de 1844.
1844 El 4 de enero se publicó por primera vez El Defensor de la Independencia
Americana, redactado por Carlos Villademoros, Antonio Díaz y Eduardo Acevedo
Miguelete. El 24 de mayo Samuel Morse inauguró la primera línea telegráfica
pública entre Washington y Baltimore, en Estados Unidos. Ese año se conoció también La Defensa Federal y Galería de Ilustres Contemporáneos.
1845 El 16 de febrero Santiago Derqui y Marcelino Pareja publicaron en Corrientes
La Revolución, que sacó 87 números. El 10 de octubre apareció en Montevideo
El Comercio del Plata. Lo fundó Florencio Varela y su último director fue
Valentín Alsina, hasta que lo suspendió la policía en 1851. También en ese año aparecieron: El Desengaño de unos Solteros, de Salta,
y El Álbum Argentino, de Buenos Aires.
1846 El 1º de enero, Derqui, Pareja y Manuel Leiva sacaron el primero de
los 85 números de El Pacificador de Corrientes, que cesó el 31 de diciembre. El 12 de febrero salió, en San Juan, el primero de los siete números de
El Honor Cuyano, redactado por Salvador Quiroga, sargento del ejército que
transcribió los documentos de la campaña del general Urquiza sobre Corrientes.
1847 El 13 de febrero apareció en Corrientes La Nueva Época, dirigido por
Manuel Leiva, quien creyó que la guerra había terminado, como no fue así,
el 28 de setiembre, le cambió el nombre por el de Corrientes Libre. El 17 de julio José Posse lanzó en Tucumán el semanario El Conservador El
2 de noviembre, en Montevideo, se publicó El Conservador, redactado por
Andrés Lamas, José Mármol, Ángel Navarro, Francisco Pico y Antonio Pifiado,
que finalizó el 3 de agosto de 1848. Ese año apareció además El Iris, periódico
artístico y literario de Buenos Aires. En Santa Fe, Severo González tiró
53 números de El Voto Santafesino, que cesó en junio de 1849.
1848 Entre el 1º de enero y el 11 de octubre salió Corrientes Confederada,
órgano del gobierno de Benjamín Virasoro. Ese año apareció en Buenos Aires
un solo número de 258 páginas del Mosaico Literario, editado por Antonio
Wilde y Miguel Navarro Viola, y La Guitarra o Primera Página de un Libro
que redactó Esteban Echeverría.
1849 El lo de enero en Gualeguaychú se publicó El Progreso de Entre Ríos
de Marcos Sastre. Sin día fijo de aparición, subsistió hasta el 15 de febrero
de 1851. En esa ciudad se editó también El Eco del Litoral, de Enrique Tuvo.
El 28 de enero, en Chile, Sarmiento editó La Crónica, en la imprenta que
compró su yerno, Julio Belin, en Europa. De ella salieron 52 números, el
último el 20 de enero de 1850. Tuvo una segunda época en 1853. Desde el 1º de mayo hasta el lo de noviembre aparecieron, en Mendoza, los
seis números de La Ilustración Argentina, iniciativa de Rosas para contrarrestar
la campaña de Sarmiento desde Chile. El 16 de junio Sastre inició en Santa
Fe El Sur Americano, “periódico de religión, política, educación y conocimientos
útiles” que salía los sábados. Entre el lo de agosto y el 30 de mayo de 1852 se distribuyó El Correo Argentino,
que por su perfil informativo no demostró adhesión a Rosas. Ese año se conoció El Diario de Avisos, que duró hasta el 31 de marzo de
1852. Fue un periódico comercial y literario editado por José Tomás Guido,
José María Montero y Vicente Pazos Kanki.
1850 El 1º de enero, la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay leyó
El Porvenir de Entre Ríos, “periódico universal” según su lema. Meses después,
el 27 de noviembre, tuvo también La Regeneración, de Carlos de La Tarde,
que tiró 132 números. El 15 de mayo, en Montevideo, el exiliado José Luis
Bustamante hizo El Correo de la Tarde, el cual llegó a los 168 números. En setiembre, salió El Álbum Santafesino de Severo González y Pedro Echagüe.
El 27 de noviembre, salió el único número de El Boletín Comercial. Para esta época los hermanos John y Jacob Brett construyeron el primer cable
de telecomunicaciones submarino que tendieron entre Francia e Inglaterra
bajo el Canal de la Mancha.
1851 El 20 de enero Sarmiento publicó en Chile Sur América, que sólo tiró
diez números. El 21 de abril Mármol inició en Uruguay La Semana, que cerró a los cuarenta
números el 9 de febrero de 1852. El 1º de mayo Sarmiento comenzó el Boletín del Ejército Aliado de Operaciones
Contra Rosas, por orden del general Justo José de Urquiza, que hizo en una
imprenta volante del Ejército. Dejó de salir el 6 de febrero de 1852. El 16 de junio Manuel Toro y Pareja redactó, hasta el 18 de febrero de 1852,
El Agente Comercial del Plata. Entre el 6 de setiembre y el 18 de octubre
publicó también Apéndice al Agente Comercial del Plata. El 2 de agosto, Bustamante desde Montevideo escribió el diario La Defensa,
que llegó a sacar 51 ediciones, la última el 3 de octubre. Ese año se publicaron en Entre Ríos El Iris Argentino de Marcos Sastre y
Francisco Seguí y El Camuatí (escrito en verso), y en Buenos Aires salió
La Prensa Nacional.
1852 El 20 de febrero la Imprenta del Ejército de San José de Flores sacó
el periódico político El Federal Argentino. El 20 de marzo, Eusebio Ocampo
lanzó el periódico satírico El Padre Castañeda, que cerró el 13 de mayo.
Entre el 30 de marzo y el 2 de noviembre circuló Buenos Aires Herald. El lo de abril se abrió Los Debates, periódico tan liberal como sus redactores:
Bartolomé Mitre y Juan Carlos Gómez, que desapareció cuando Urquiza clausuró
su imprenta. Ese día salió El Progreso, compuesto de documentos oficiales,
que duró hasta el 6 de agosto de 1853. El 1º de mayo Cayetano Casanova sacó El Nacional, primer medio en tener
dos ediciones diarias: una al mediodía y otra a las dos de la tarde. Además
de Juan Bautista Alberdi (que publicó allí Las Bases), colaboraron Sarmiento,
Mitre, Vicente López, Cané y Nicolás Avellaneda, entre otros. El 18 de agosto
de 1893 cerró. El 22 de mayo de 1852, se publica El Hijo de Mayo, en San
Juan. Bajo la dirección de Guillermo Rawson. El 12 de agosto La Voz del
Pueblo de Entre Ríos tiró el primer número de una serie de doce que terminaría
en setiembre. El 3 de octubre La Confederación Argentina editó en Entre Ríos su órgano
oficial: El Nacional Argentino, que continuó hasta el 25 de octubre de 1860.
Allí colaboraron Del Carril, Gutiérrez, Zuviría, Fragueiro, Mansilla, Alvear,
Guido Spano, Vélez Sársfield, Nicolás Avellaneda y Martín Piñeiro. Del 25
de octubre al 22 de diciembre José Mármol imprimió El Paraná. El 15 de noviembre se reunió la Convención Constituyente de la Confederación
Argentina que garantizó el derecho de todos los habitantes de “publicar
sus ideas por la prensa sin censura previa” en el artículo 14. En Santa Fe apareció el Diario de Sesiones del Congreso General Constituyente.
Ese año aparecieron también: el diario de la tarde La Crónica, de Federico
de la Barra; La Camelia, que redactaba Rosa Guerra; El Español, de Benito
Hortelano; El Correo Argentino, fundado por Tomás Guido sobre la base de
El Diario de Avisos; La Brisa (del lo al 4 de setiembre); La nueva época
(3 de mayo al 23 de junio); La Avispa, Diario del Pueblo y para el Pueblo;
que continuó con el título La Avispa en las prisiones y La Avispa. Publicación
a vapor Palo de ciego al que no ande derecho. En Salta, Antonio Pardo, José
E. Uriburu, Antolín Flores y Juan Francisco Castro hicieron La Organización,
que duró hasta 1858. En Entre Ríos, el adicto a Urquiza Enrique Tuvo sacó
El Eco del Litoral. En esos días, aparece también La campaña del Ejército Grande, libro donde
Domingo Faustino Sarmiento recopiló los boletines de las fuerzas que comandó
Urquiza contra Rosas. Según Leopoldo Lugones este libro es “uno de los hitos
del periodismo nacional”.
1853 El 3 de febrero, en Corrientes, Vicente Quesada, Juan Pujol y Julián
Díaz de Vivar sacaron La Libre Navegar los Ríos, que continuó a partir del
número 69 con el nombre de El Comercio. Finalmente, y entre el 3 de mayo
de 1857 y el 29 de mayo de 1859, se convirtió en La Opinión. En marzo, despertó
a los porteños Aniceto el Gallo, del unitario Hilario Ascasubi, quien lo
definió como “gaceta poco-tristona-gauchi-patriótica”. Dejó de cacarear
en setiembre y reanudó su tirada en 1858. El 7 de agosto los hermanos Héctor y Mariano Varela fundaron, junto con
Juan Ramón Muñoz, La Tribuna, apoyando la política de Urquiza. En 1872,
sumaron una edición por la tarde y dejó de salir el 27 de setiembre de 1880.
La particularidad de este medio es que sirvió de escuela para una gran cantidad
de tipógrafos. El 1º de setiembre, Carlos Pellegrini impulsó la Revista
del Plata, especializada en temas agrícolas, ganaderos y científicos; cerró
en 1861. Del 1º al 29 de octubre se cuadró en Buenos Aires El Centinela, que se alineó
detrás de Pastor Obligado y exigió la depuración de rosistas de la administración.
Le sucedió el periódico El Diablo. Entre el 1’ de octubre y el 5 del mismo
mes, pero de 1861, La Religión -periódico teológico social redactado por
Pedro Frías-imprimió sus 92 números. En setiembre la comunidad francesa residente en Buenos Aires pudo leer en
su idioma Le Commerce, que terminó el 13 de junio de 1854. Entre el 7 de diciembre y el 4 de enero siguiente, sopló sobre la ciudad
El Pampero, diario humorístico que criticó a La Tribuna. Ese año, aparecieron también en Buenos Aires los opositores a Urquiza La
Lanceta y El Pueblo; El Clamor, que lo apoyaba, y el satírico El duende,
que amenazaba con “no dejar títere con cabeza”. En Mendoza, El Constitucional,
que duró hasta fines del siglo, y El Nuevo Eco de los Andes y en Córdoba,
El Telégrafo.
1854 Entre el 8 de enero y el 16 de abril se leyeron los trece números del
periódico escrito en francés y castellano Ahasverus-Revue Universelle. Del 1º de marzo al 3 de abril circularon los veintiocho números del diario
político, literario y comercial La Ilustración. Entre el lo de abril y el
6 de agosto se imprimió La Crónica, de Carlos Tejedor y J. Muñoz, que continuó,
entre diciembre y enero de 1855 con el nombre de La Opinión. Es en el'55
cuando retomó su nombre primitivo hasta su final en 1856. Del lo de abril al 5 de agosto de 1858 se distribuyó El Judicial, que tuvo
una segunda aparición entre 1864 y 1869. El 25 de mayo apareció en Rosario
La Confederación, donde Federico de la Barra publicó documentos oficiales
hasta 1861. El 12 de junio salió la revista sobre legislación, economía, literatura
y ciencias naturales El Plata Científico y Literario que dirigió Miguel
Navarro Viola y cesó al año siguiente. Del 2 de setiembre hasta el 5 de
octubre se tiró el Diario de Avisos, cuyo lema era “La libertad de industria
es regeneradora de los pueblos”. El 18 de setiembre el francés Augusto Leillard
sacó en San Juan el periódico Nueve de Julio, creado por decreto del gobierno
provincial. Entre el 18 de octubre y el 23 de diciembre se imprimió El Mercurio, diario
de comercio e industria que publicaba leyes y decretos. Del 28 de octubre al 5 de diciembre se leyó El Noticioso, diario de política,
literatura y economía que llegó a los veintinueve números. El 1º de diciembre el liberal Carlos Quentin editó en francés LEchó du Conimerce,
que polemizó con El Nacional sobre el libre cambio hasta que cerró, el 30
de enero de 1855. Esa Navidad apareció el diario El Plata, que finalizó el 31 de marzo siguiente
a Se publicaron también: La Unión, que tuvo dos épocas más: una en 1872
y otra en 1883; Albuni de Señoritas, periódico de literatura, modas, bellas
artes y teatro, y Registro Estadístico de Buenos Aires.
1855 El 10 de abril comenzó la tirada de El Judicial, que llegaría hasta
el 20 de marzo de 1873. Desde el 15 de abril hasta el 23 de junio se imprimió El Internacional,
diario político, de comercio y literatura. Entre el 13 de junio y el 11 de julio se publicaron los veinticinco números
de El Zuniago, diario de zamba y humor. En julio empezó El Orden, que terminó
en diciembre de 1856. Fue un diario intransigente que combatió la aprobación
del Código de Comercio y que hicieron Luis Domínguez, José Mármol, Luis
Frías y Francisco Bilbao, este último, llevado ante los tribunales por Sarmiento
a raíz de los ataques que recibió desde esas páginas. El 5 de agosto Sarmiento
y Pantaleón Huergo sacaron El Nacional de la Semana, que cerró el 29 de
junio de 1856. Del 25 de agosto al 28 de julio del siguiente año se leyó La Constitución,
diario que continuó al periódico político-satírico El Hablador, también
de ese año. El 10 de octubre fue el día de inicio de La Unión, diario industrial, político,
literario y comercial que duró hasta el 18 de enero de 1856. Del 2 al 30 de octubre circularon las veinticinco ediciones de El Uruguay,
de José Mármol. En Buenos Aires aparecieron además: El Recuerdo, redactado
por un grupo de jóvenes uruguayos y portavoz del círculo literario bonaerense;
El Pica-Flor, semanario literario; el diario cómico La Cencerrada; la Revista
de los Estados del Plata, sobre legislación, jurisprudencia, economía, política
y ciencias naturales; La Comunidad Extranjera, redactado en inglés, francés
y castellano, y el Almanaque Comercial y Guía de Forasteros para el Estado
de Buenos Aires. En Córdoba comenzaron a venderse El Imparcial y El Diario
Comercial, periódico político, mercantil y literario que cerraría nueve
años después; en Tucumán se imprimió El Argentino Independiente y en San
Luis, La Actualidad.
1856 El 5 de marzo salió la primera de las 39 ediciones de El Heraldo del
Plata, que finalizó el 15 de agosto. Entre el 5 de julio y el 29 de noviembre
el jefe de la Oficina de Estadística del Estado de Buenos Aires hizo sonar
El Eco de la Campana. Ese mes salió en Catamarca el semanario El Ambato, que en 1858 pasa a ser
bisemanario. Lo dirigió José Félix Aldao, hijo del fraile Félix Aldao. Con
él colaboraron fray Mamerto Esquiú, Vicente Lasco y Sotomayo, entre otros.
Siguió, con una interrupción en 1860, hasta mediados de 1861. Del 6 al 13 de noviembre Francisco Mur escribió El Chicote, que cesó por
orden judicial. El 4 de setiembre se imprimió el primero de los dieciséis números que sumaría
El Soldado de la Ley, cuyo principal redactor fue Bartolomé Mitre y que
cerró el 21 de noviembre. El 6 de noviembre se imprimió El Orden, primer periódico de Jujuy, fundado
por Macedonio Graz, que fue desterrado por los artículos publicados en esa
hoja. Aparece El Labrador Argentino, mensuario agrícola de Eduardo Olivera,
fundador de la Sociedad Rural Argentina; El Industrial, repertorio, que
se refundo en La Crónica después de 51 números; Telón corrido, La Reforma
Pacífica, en diciembre; La Civilización. Revista Mensual Enciclopédica,
que se vendía los días 5 de cada mes y en la que escribieron Sarmiento y
Alsina; el periódico burlesco El Padre Cobos y, en francés, L'Emigration.
Además, se editaron: El Constitucional, El Deseo, La Legión Agrícola, Libre
Opinión, La Liga Argentina y el Calendario Instructivo y perpetuo. En La
Rioja, en tanto, apareció el periódico La Patria, de Carmelo Valdés.
1857 El primer día del año circuló El rimes Argentino, un periódico de información
general que luego tiró veintisiete números más. El 1º de febrero fue el día del lanzamiento de Chiveri Porteño, dedicado
a ridiculizar a Sarmiento, Dalmacio Vélez Sársfield y otros personajes de
la época. El 11 de julio Francisco Bilbao comenzó a dirigir La Revista del
Nuevo Mundo, desde donde continuó sus polémicas con Sarmiento; cerró el
29 de diciembre. El 29 de agosto el telégrafo apareció en Buenos Aires junto
con el ferrocarril, cuando el gobernador Valentín Alsina inauguró los diez
kilómetros de vías entre Estación del Parque (donde hoy está el Teatro Colón)
y La Floresta. En la instalación del telégrafo intervino el francés Amadeo
Berthonnet, que ya en 1855 había presentado una línea experimental de diez
cuadras de extensión. Desde el 13 de diciembre, hasta el 11 de setiembre
de 1858, salió el periódico unitario La Espada de Lavalle, que después continuó
con el nombre de La bandera de Cepeda. En Buenos Aires aparecieron también:
La Reforma Pacífica (en diciembre, igual que el año anterior); el semanario
“satírico burlesco” Don Quijote, de Juan María Gutiérrez; El Porteño, que
inició su tercer período, y Los Debates. En Corrientes se conoció La Opinión,
que duró hasta 1859, y La Reforma Comercial, de San Nicolás de los Arroyos.
En Córdoba El Diario; en San Juan, El Grito, El Porvenir, La Aurora y El
Nuevo Agricultor; En Santa Fe, El Pueblo y en Tucumán, El Eco del Norte.
Valentín Alsina 1858 El 9 de febrero se largó El Estímulo, periódico que reemplazó a El
tipógrafo Argentino, suspendido en vísperas de su impresión. Hasta su cierre,
el 6 de agosto, colaboraron en él Gutiérrez y Cané, entre otros. Del 12 al 27 de marzo volvió a cacarear Aniceto el Gallo, nuevamente bajo
las órdenes de Hilario Ascasubi. El 14 de marzo comenzó a circular Fray
Supino Claridades, periódico cuyas críticas y bromas terminaron al mes siguiente
con sus redactores multados y en el destierro. Entre el 18 de abril y el 16 de junio los negros y mulatos de Buenos Aires
tuvieron su órgano en El Proletario. El 28 de mayo San Luis leyó la primera publicación de la provincia. Se llamó
La Actualidad y la redactó Manuel Sáez junto con Juan Llerena, fray Luis
Joaquín Tula y José Cortés Funes. Terminó el 30 de diciembre después de
haber tirado 107 números. La mañana del 1º de junio se presentó en sociedad
El Registro Gubernativo, que se despidió el 18 de diciembre de 1859. El
10 de agosto apareció la Revista Española Americana. El 25 de setiembre,
después de 16.666 números, calló The British Packet. El lo de octubre salió la Revista Farmacéutica, órgano de la Asociación
Farmacéutica de Buenos Aires que cerró recién en 1904. El 1º de noviembre apareció Anales de la Educación Común, que al comienzo
dirigió Sarmiento y luego Juana Manso hasta su cierre, en julio de 1874.
Ese mismo día comenzó a circular el semanario político literario La Regeneración,
que cerró en febrero de 1859 tras editar diecisiete números. Del 14 de noviembre al 27 de marzo de 1859 salió el periódico de variedades
y modas La Guirnalda, que tiró una veintena de números. En Buenos Aires salieron los periódicos La Raza Africana y El Demócrata
Negro, destinados a la defensa de los negros en la Confederación; La Prensa,
de Juan Monguillot, y el periódico patrocinado por la Universidad de Buenos
Aires La Nueva Generación, que tuvo tres épocas. En Santa Fe apareció El
Patriota y en Salta, El Bermejo.
1859 El V de enero corrió la voz de El Chismoso, que Héctor y Rufino Varela
hicieron hasta el 20 de febrero. El 20 de enero se leyó El Museo Literario, órgano del Liceo Literario que
dirigió Francisco Bilbao. Entre el 1º de julio y el 19 de febrero de 1860
se distribuyó Las Novedades. El 15 de setiembre circuló un único número de 360 páginas de El Foro. En setiembre, Santiago del Estero tuvo su primer periódico: El Guardia Nacional,
semanario que oficialmente editaba Manuel Taboada y que redactaba Ezequiel
Paz. El 1’ de octubre Cané, Avellaneda y Gutiérrez emprendieron la tarea
de sacar en Buenos Aires El Comercio. El diario había tenido una primera
etapa de catorce años en Montevideo bajo el nombre de El Comercio del Plata
y la dirección de Florencio Varela. A partir del 19 de noviembre Lucio Mansilla
hizo los dieciséis números del periódico La Paz pidiendo por la unión de
Buenos Aires a la Confederación. Lo cerró el 29 de marzo del año siguiente,
cuando se concretó su anhelo. Ese año, se leyeron además: El Clamor de los Libres, El Hijo de Mayo, El
Huracán y El Independiente en Buenos Aires; Revista de Educación, en La
Plata; El Eco del Litoral, de Isaac de Tezanos y, Pedro Echagüe, en San
Nicolás de los Arroyos; en Catamarca El Burro, sucesor de El Ambato, dirigido
también por José Félix Aldao; en Corrientes, Almanaque Histórico y La Unión
Argentina, y en Córdoba La voz del Pueblo.
1860 Entre el 5 de enero y el 12 de mayo se imprimieron los quince números
del Diario de Sesiones de la Convención del Estado de Buenos Aires. El 26 de febrero se conoció el único número de La Batalla de Cepeda. A partir
del 1º de marzo El Enano propuso “contribuir a la unión de los argentinos
aboliendo los partidos”. Este periódico “de pobres y ricos” cerró el 23
del mismo mes. Del 21 de marzo al 24 de abril Leandro N. Alem fundó y dirigió junio con
el poeta Ricardo Güiraldes los cinco números de El Guardia. El 11 de abril
el gobierno de la provincia de Buenos Aires construyó la primera línea cablegráfica
pública entre Estación del Parque y Moreno. Los equipos fueron de la empresa
alemana Siemens. El 1º de mayo se fundó el periódico inglés The Standard
and River Plate News, cuyo director fue Miguel Mulhall. La misma empresa
editó el Handbook of River Plate, una muy completa guía económica del país.
Desde el 15 hasta el 24 de junio se sucedieron los ocho números del también
humorístico El Trueno. Entre el 7 de julio y el 11 de agosto recorrieron las calles las seis ediciones
de La Bruja, periódico político y humorístico ilustrado con caricaturas. Entre el 11 de setiembre y el 14 de octubre se distribuyó el diario 11 de
Setiembre, que tras veintinueve números se despidió diciendo: “La indiferencia
ha acogido nuestros esfuerzos. Bajamos tranquilos a la tumba con la conciencia
de haber cumplido nuestro deber de patriotas”. En Buenos Aires se editaron además: La Patria, que para Sarmiento era 11
el más correcto redactado en italiano”; Revista Española y Americana, que
se propuso “velar por los intereses y porvenir de los españoles del Plata”;
La Nueva Generación, que inicia su segunda época atacando a Urquiza, y El
Chimborazo, de interés general en tono humorístico. En el interior del país:
La Fraternidad, de Catamarca; Boletín Oficial, de Paraná; El Progreso, de
Rosario; La Fraternidad, de Santa Fe; El Orden y Registro Oficial, de San
Juan; La Reforma Pacífica, de Santiago del Estero; El Eco del Norte, de
Salta; y El Eco de la Juventud, de Tucumán.
1861 Entre el 2 de febrero y el 30 de noviembre la comunidad hispana tuvo
El Eco Español. El 8 de junio La Gaita, sumario de literatura popular, abogó
por la armonía hispano-americana. El 1º de mayo apareció la Revista Comercial
y Administrativa, que a partir del número 412 cambió de nombre por La Revista.
El 6 de julio José María Cantilo redactó el matutino político y literario
La Verdad. En este período se editan en Salta La Voz del Pueblo; en la provincia de
Buenos Aires la oficialista El Progreso, de Diego Alvear y Delfín Huergo;
en Catamarca, El Centinela del Norte, La Regeneración y la segunda etapa
de El Ambato; en Córdoba, El Pueblo Soberano; Bartolomé Mitre en Jujuy,
La Confraternidad; en Paraná, La Luz, La Soberanía del Pueblo, El Correo
Argentino, La Patria Argentina, El Nacional Argentino y La Revista del Paraná,
de Vicente Quesada (sobre historia y literatura y precursora de la Revista
de Buenos Aires); en Rosario, El Eco Comercial y La Nueva Era; en San Juan,
El Orden Constitucional; en Salta, La Prensa; en San Luis, El Centinela
Puntano; en Santiago del Estero, La Prensa Orgánica, y en Tucumán, El Liberal.
1862 El 1º de enero el “Editor responsable Luzbel” sacó de la imprenta de
los infiernos, calle de los condenados” el periódico El Diablo de Buenos
Aires. En setiembre José María Gutiérrez fundó La Nación Argentina para
apoyar la obra de gobierno de Mitre. Desapareció en enero de 1870 para refundarse
en el diario La Nación cuando aquél dejó el poder. El 15 de octubre, Tomás
Güiraldes dirigió el mensuario de literatura La Primavera. Aparecieron también: El Argentino, órgano del anterior partido nacional;
El Siglo, que decía ser “un obrero más trabajando para consolidar la situación
política lograda después de tantos sacrificios” (reaparece en 1878, 1882
y 1901); La Presse, de la comunidad francesa; Revista Mensili Per Gli Italiani,
del profesor universitario Gustavo Michelle; El Artesano y El Racionalista.
Por otro lado, en el interior salieron: La Reforma, en Catamarca; El Eco
de Córdoba, El Estandarte Católico y El Hijo de Mayo, en Córdoba; El Paraná,
en la localidad del mismo nombre; La Fraternidad, en Santiago del Estero,
y, en San Juan, El Chismoso y el Registro Oficial.
1863 El 24 de mayo zumbó una de las más grandes revistas argentinas, El
Mosquito, que dirigieron el notable dibujante Enrique Meyer, el grabador
sobre metales Auerbach y el abogado Carlos Paz. Durante los casi treinta
años por los que se extendió su publicación, la estructura gráfica de la
revista permaneció inalterable: en la tapa el retrato de una personalidad,
en las dos páginas internas, caricaturas y, la contratapa, destinada a los
textos. Pasaron por su redacción Luciano Choquet, Víctor Milhas, el caricaturista
Enrique Stein y el escritor Eduardo Wilde, entre otros. Dejó de salir en
marzo de 1893 con el único intervalo de dos meses a causa de la terrible
epidemia de fiebre amarilla que azotó a Buenos Aires. También de mayo data la Revista de Buenos Aires, importante publicación
de Miguel Navarro Viola y Vicente Quesada que sacó un total de 96 números
hasta su desaparición, en abril de 1871. Entre el 21 de junio y el 14 de febrero de 1864 se leyeron los 35 números
que tuvo El Pensamiento Argentino, periódico “religioso, literario, político
y científico”. En el interior del país aparecieron: en Córdoba, La Fusión
y La Opinión Pública; en Mendoza, y por tres años, El Constitucional; en
Paraná, El Litoral; en La Rioja, El Famatina; en Santiago del Estero, El
Pueblo (que redactó Eusebio Gómez hasta el cierre, tres años después), El
Picaflor, de Luis Varela, y El Norte, periódico político que salió de la
imprenta oficial y duró ocho años; en Salta, La Época, El Libre y El Salteño
y en San Luis, El Porvenir 1864 Desde el lo de enero hasta el 29 de febrero de 1880, se imprimió El
Correo del Domingo, semanario ilustrado de literatura, ciencias y artes.
Entre el 15 de febrero y el 26 de agosto los porteños pudieron leer alguno
de los veintidós números del quincenario El Correo de Buenos Aires, dedicado
a la historia, la literatura, las artes e industrias, las modas y las variedades.
De marzo a abril se distribuyeron los cinco números del periódico ilustrado
La Flor del Aire. El 8 de abril apareció el primer número de la Revista Médico Quirúrgica,
que se publicó cada quince días hasta 1883 y que redactaron Ángel Gallardo
y Pedro Mallo. Del 1º de julio al 25 de setiembre aparecieron los trece números de La Universidad. También salieron ese año: El Estandarte Católico, que sucedió a El Pensamiento
Argentino; una sola edición de Revista de Legislación y Jurisprudencia,
Análisis del Museo Público de Buenos Aires, que dirigió Germán Burmeister;
La Palabra de Mayo, dirigido por Tomás Oliver; La España, que hasta 1869
hizo Benito Hortelano, periodista e impresor español; El Pueblo, que dirigió
Juan Chassing con la colaboración, entre otros, de Carlos Paz, Argerich
y Avellaneda; El Diablo, que fundó José María Gutiérrez, y El Eco de la
juventud. Y las publicaciones en otros idiomas: The River Plate Magazine,
Le Progress, en francés, y Corriere Italiano, de Juan Cervetto, L'Imparciale
y L'Italia del Giorno para la comunidad italiana.
1865 En marzo salió Escuela de Artes, trimestral redactado por el personal
de la Escuela Normal de Palermo. El 1º de julio se distribuyó L Unión Franlcaise. Entre el 17 de setiembre y el 22 de febrero de 1879 se sintió El Latigazo,
periódico satírico y burlesco. Ese año salieron a la luz: La Razón Española,
que se convertirá más tarde en el Diario Español; Le Courrier de La Plata,
que cerró en 1942; L'Echo Francaise; L'Italia; Eqo de Comercio; El Bonaerense,
semanario político y literario; Revista de Ciencias y Letras del Círculo
Literario; El Amigo del Pueblo; La Discusión en Córdoba; El Independiente
y La Esperanza, en Corrientes, y El Aguijón, en Salta.
1866 El 26 de julio salió La América que redactaron Olegario Andrade y Carlos
Guido Spano y que terminó en febrero de 1869. El 30 de setiembre Eduardo Olivera fundó Anales de la Sociedad Rural Argentina,
donde colaboraron Sarmiento y Gutiérrez, entre otros. Se conocieron también: Anuario de la imprenta: La Revista; El Pueblo, de
Catamarca; Las Provincias, de Córdoba; El Eco de Corrientes, en esa provincia;
El Progreso, de Gualeguay; El Argentino, de Paraná; La Regeneración, de
La Rioja; El Correo del Norte, de Salta; La Reforma, de San Juan, y, en
inglés, de Standar Weekly.
1867 El 15 de noviembre Ovidio Lagos fundó en Rosario La Capital, considerado
el decano del periodismo argentino. El 2 de diciembre apareció El Porvenir
Argentino, representante del partido federal que cerró el 31 de marzo de
1868. Manuel Bilbao director de La República creó el primer diario que se
vendió en la calle a precio económico. Además, salieron: El Inválido Argentino,
de la Asociación Protectora de Los Inválidos, donde colaboraron prestigiosos
intelectuales; El Boletín de la Provincia, dedicado a las poblaciones de
campaña; La Escuela Primaria, de aparición bisemanal dedicada a la educación;
El Auxiliar,« El Nemónico y El Rebelde. En Córdoba, Ramón Gil Navarro redactó
El Progreso, de orientación federal.
1868 Durante el primer trimestre del año apareció La Revista Argentina,
que dirigió Pedro Goyena con José Manuel Estrada. Trató temas políticos,
históricos, económicos, educativos, científicos y filosóficos hasta su cierre,
en abril de 1872. El 5 de marzo se distribuyó Los Intereses de los Argentinos,
órgano católico que cesó el 1º de julio de 1870. El 1º de mayo el general
Mansilla publicó La Patria, donde colaboraron Aristóbulo del Valle y Federico
Torrado, entre otros. El 28 de junio Olegario V Andrade redactó el primer número de El Pueblo
Argentino, donde Eduardo Gutiérrez publicó algunas de sus novelas policiales
y gauchescas. El 1º de setiembre una resolución del Gobierno Provisional
creó la Revista del Archivo General de Buenos Aires, que un año después
fundó Manuel Ricardo Trelles y que salió hasta 1872. Entre el 18 de octubre
y el 10 de enero de 1869 apareció el semanario literario El Alba, en el
que colaboraron Mitre y Ricardo Gutiérrez. Desde el 25 de octubre hasta el 1º de enero de 1871, El Nacional de la Semana
recopiló leyes, documentos y artículos de fondo de El Nacional. Además del
periódico italiano La Nazione Italiana, aparecieron: El Brujo, La Chula
y La Opinión Pública en Buenos Aires; Las Provincias Unidas en Córdoba;
La Voz de la Patria en Corrientes; La Época en Jujuy; La Nueva Generación
en La Rioja y Los Intereses de Cuyo, La Lechuza y El Rebenque en San Juan.
1869 El 15 de febrero salió el diario de la tarde El Argos. El 1’ de mayo
se habilitó el telégrafo desde la ciudad de Buenos Aires hasta Rosario. El lunes 18 de octubre a las tres de la tarde, los porteños escucharon por
primera vez el voceo de La Prensa. José Clemente Paz, su fundador, impulsó
un nuevo tipo de periodismo apartidario que presentó la información como
imparcial. La dirección de esa hoja impresa por ambos lados a cinco columnas
recayó en su amigo Cosme Mariño. Cuando en julio de 1871 se convirtió en
matutino, de la imprenta ubicada en Moreno 73 salían unos tres mil ejemplares
que se fueron multiplicando hasta alcanzar los 125.000 a principios del
1900. El crecimiento de la empresa motivó la construcción de un suntuoso
palacio a pocos metros de Plaza de Mayo que, con progresiva caída de la
tirada y una seguidilla de ventas accionarias, pasó a la Municipalidad de
la Ciudad de Buenos Aires a mediados de 1990. Es el medio que tuvo mayores
problemas con el peronismo, que lo expropió; recién fue devuelto a sus dueños
por el gobierno militar que en 1955 derrocó a Perón. Ese año, Sarmiento clausuró el diario de la mañana fundado por José Hernández
El Río de La Plata. Allí colaboraron entre otros, Estanislao Zeballos y
Cosme Mariño, que pasaron a La Prensa opositora a Sarmiento. Entre los medios
aparecidos ese año cabe citar a La Verdad, El Gobernador, El Gringo, El
Lince, El Ministerio, El Momento, El Porteño, El Progreso, La cartera de
Orión, La Jeringa, La Lira, La Viuda y Los Negros.
1870 El 4 de enero salieron los primeros mil ejemplares del diario La Nación
bajo la dirección de Bartolomé Mitre. Antes de terminar el siglo XIX fue
clausurado dos veces. También en enero se distribuyó el Boletín Bibliográfico Sudamericano, el
primero de este género en Buenos Aires; consistía en un simple anuncio de
los libros en venta en la librería Mayo de Carlos Casavalle, el editor.
Ese año salieron además los siguientes periódicos: Anales de la Sociedad
Tipográfica Bonaerense, El Fénix, La Africana, La Enseñanza Libre en las
Escuelas del Pueblo, Los Meteoros, La Revista Económica del Río de La Plata
y el primer diario en idioma alemán: Deutsche La Plata Zeitung, copiado
del Deutscher Pionier, primer diario alemán que circuló por la ciudad. El
18 de mayo se habilitó el telégrafo desde Rosario hasta Córdoba.
1871 A partir de abril y hasta 1877 Andrés Lamas, Vicente Fidel López y
Juan María Gutiérrez redactaron mensualmente La Revista del Río de La Plata,
especializada en historia y literatura y señalada como una de las más importantes
del género en Latinoamérica. El 1º de julio salió la Revista de la Sociedad Estímulo Literario. Entre
el 1º de setiembre y el 1º de mayo de 1972, circuló Revista Criminal de
Pedro Bourel. Del 15 de octubre al 13 de julio de 1873 apareció la Revista Universitaria. La fiebre amarilla aterrorizaba Buenos Aires y dos periódicos de aparición
esporádica se encargaron exclusivamente del tema: uno se llamó El Boletín
de la Epidemia y el otro Marcha de la Epidemia. En ese año se destacaron:
El Eco del Plata, El Plata Ilustrado (interesante semanario que salió hasta
1873), El 13 de diciembre (revista universitaria redactada por José María
Cantilo), El Monitor de la Campaña, La Revista Masónica Argentina, La España
y el Boletín de la Exposición Nacional de Córdoba.
1872 Este fue un periodo particularmente fecundo para el periodismo: funcionan
en Buenos Aires veintiséis imprentas que editan 94 diarios, de los cuales
44 aparecieron ese año. De éstos, los más importantes fueron: El Americano,
editado en París por Héctor Varela para publicitar al país en Europa; El
Correo Español, órgano de la colectividad que dirigió el liberal mitrista
Enrique Giménez; La Pampa, matutino fundado por Ezequiel N. Paz al retirarse
de La Prensa, que duró hasta 1886, y El Operaio Italiano, fundado por un
grupo de obreros, de redacción anónima y financiado con contribuciones personales
que en 1883 seguía apareciendo. El 7 de abril apareció El Comercio del Plata.
El 8 de octubre se imprime por primera vez el bisemanario La Defensa de
Mercedes. Aparecieron además: La Educación Moderna, Ateneo Argentino, El Mercantil,
El Cóndor, El Estudiante, El Porvenir Literario, El Verano, La Libertad,
La Campaña, La Cartera Misteriosa, Revista Quincenal, Las Familias, La Política,
Recreo de las Niñas y Semanario de las Niñas, y los semanarios El Eco de
las Niñas y Ecos Perdidos, entre otros.
1873 Entre enero y octubre apareció el mensuario Anales de Agricultura de
la República Argentina. Desde el 23 de mayo hasta el 15 de setiembre salió
la Revista de Derecho. El 1º de agosto se imprimió la Revista Comercial. El 16 de noviembre empezó El Monitor, semanario de política, literatura
y ciencias que terminó el 18 de enero de 1878. Ese mismo día, salió otro
semanario político y literario, se llamó El Constitucional, lo fundó Antonio
Balleto y cesó el 18 de enero de 1874. Aparecieron también: El Centinela
del Norte, periódico de San Nicolás de los Arroyos que en 1875 cambió su
nombre por el de El Norte de Buenos Aires y en 1881 se convirtió en diario,
manteniéndose hasta 1925; el semanario Actualidad, La Gaceta Mensual, La
Libertad que dirigió Manuel Bilbao hasta su cierre en 1882; La Providencia,
que contenía caricaturas y combatía a Sarmiento y Avellaneda; la revista
quincenal La Nueva Era, El Amigo del Pueblo, El Progreso, de Flores, El
progreso de Quilmes, Revista de La República, La Democracia, Revista Espiritista,
La Redención y la Revista Masónica, entre otras.
1874 El 4 de febrero apareció el diario El Autonomista, político, económico
y comercial. El 15 de julio se distribuyó la Revista Literaria, de Carlos
Vega Belgrano, donde colaboraron José Tomás Guido, José María Cantilo y
Juana Manuela Gorriti, entre otros. Sacó ocho números, el último, el 1º
de setiembre de 1875. El 1º de agosto salió la revista semanal El Católico Argentino, que desapareció
el 12 de febrero de 1876. El 5 de agosto el presidente Sarmiento inauguró
las comunicaciones a través del cable telegráfico trasatlántico que unió
a la Argentina con el resto del mundo. Se conocieron además: La Unión Argentina, que dirigió Ángel Carranza y difundió
las ideas del partido nacional; Anales Científicos Argentinos, Anales de
la Sociedad del Círculo Médico Argentino, Boletín mensual del Instituto
Bonaerense de Numismática y Antigüedades, el semanario de historia, literatura
y ciencias Revista Americana, El Telégrafo de La Pampa de Buenos Aires.
En el interior aparecieron: El Pampero primer diario de Pergamino; El Trasandino
en Catamarca; El Eco de los Andes en Mendoza; La discusión de Salta; la
segunda época de Los Debates de San Juan y, en Santiago del Estero, Agustín
Argibay redactó el bisemanario El Eco del Norte para apoyar la candidatura
de Mitre.
1875 Entre el 16 de enero y el 23 de marzo apareció El Comercial, diario
de la tarde cuya redacción era anónima. El 7 de febrero se distribuyó la revista dominical literaria La Ondina del
Plata, que dirigió Luis Pinto. Su última entrega fue la número 237 del 24
de agosto de 1879. El 4 de marzo brotó El Petróleo, “órgano de las últimas
capas sociales y de las primeras blusas comunistas”, según decía el agregado
al título. Del 29 de marzo al 9 de abril se anunciaron los once números que alcanzó
el diario de la tarde El Pampero, de Andrés García. El 1’ de mayo salió
El Correo Argentino, fundado por Eduardo Olivera, director de Correos. Entre
el 2 y el 23 de mayo circuló el semanario dominical La Revista Teatral. El 1º de julio el Barrio de la Boca tiró el periódico El Ancla. El 9 de
setiembre apareció La Aspiración, de la ciudad bonaerense de Mercedes. El 25 de setiembre se inauguró una línea telegráfica subfluvial a la isla
Martín García. Entre el 2 de diciembre y el 31 de agosto de 1876 salió Antón Perulero,
periódico satírico de política y literatura cuyo dueño era el español Juan
Villegas. Circularon además: El sombrero de don Adolfo, periódico satírico,
El Gorro de Dormir, El Industrial, El taquígrafo, El Tribuno, Il Gacetíno
e il Cosmo, El Maldiciente, La Alborada del Plata, La Época, La Falsa Política,
La Reforma, Revista Comercial y Madtima del Comercio del Plata, Revista
Militar Argentina, Revista Literaria, Revista semanal de Literatura y Moda.
Los periódicos en otro idioma: Le Revolucionaire en francés, The Southem
Cross en inglés, los alemanes Argentinisch-Deutsche Wochenblatt y Argentinísch-Deutsche
Zeitung. En Santiago del Estero Juan Iramain sacó U Libertad, periódico
que ya había editado en Tucumán.
1876 El 10 de marzo el escocés Alexander Bell pronunció en Boston las primeras
palabras reconocibles a través de una línea eléctrica y exhibió el primer
modelo funcional de un teléfono. El 15 de setiembre el escocés Williams Cathcart hizo circular una página
semanal de información comercial y marítima que llamó The Buenos Ayres Herald.
Un año después, el norteamericano D. W. Lowe lo convirtió en una publicación
esporádica y amplió sus áreas de cobertura. Unos años después, ante un pedido
del general Julio Roca, el Herald envió un corresponsal a la campaña al
desierto. Recién en 1913 se convirtió en diario, en 1926 pasó a manos de
los hermanos Julius y Claude Rugeroni y en 1959 comenzó a publicar suplementos
los fines de semana. Una década después, la empresa norteamericana Charleston
Publishing Company se convirtió en accionista mayoritaria. Además de haber
sido el primer medio que contó con servicio cablegráfico regular de Europa,
el Herald tuvo una actitud de muchísima valentía durante la última dictadura
militar, cuando informó sobre la violación de los derechos humanos, lo que
a su editor, Andrew Graham Yool, le costó el exilio. Salieron entre otros: El Correo de los Niños y El Correo de las Porteñas,
el diario científico y literario El Cronista; el mensuario El Plata Literario;
el semanario humorístico Antón Pijotero y el periódico satírico El Bicho
Colorado, el Chaco, de la provincia homónima, y en Santiago del Estero aparecieron:
El Vulgarizador redactado por Pedro Vieyra, La Prensa Libre, de gran tamaño
(50 x 40 cm), que presentaron Federico Álvarez y Ramón Pizarro, y los pequeños
semanarios La Charata y El Coyuyo, dedicados a la crítica social y política.
1877 En Buenos Aires aparecieron El Boletín Militar, la revista semanal
espiritista Constancia, la revista ilustrada de artes y literatura Crónica
Teatral, El Economista, el periódico semanal El Álbum de las Niñas, la revista
literaria El Amigo del Hogar, el semanario de ciencias sociales y literatura
Revista del Domingo. También los periódicos humorísticos Doña Mariquita
y El Arlequín; y las publicaciones en italiano La Patria degli Italiani,
que cambió su nombre varias veces, y los republicanos Il Libero Pensiero
y LAmico del Popolo, o En el resto del país: El Pueblo de Avellaneda; El
Audaz, de Santiago del Estero, dirigido por José Ábalos, y las publicaciones
salteñas La Opinión, La Libertad y El Eco de Salta. Ese año se inauguró
además la sucursal local de la agencia de noticias europea Havas.
1878 Ese año aparecen unos cuarenta periódicos, casi todos de poca trascendencia
y por poco tiempo. De ellos los más importantes fueron: La Patria Argentina,
que dirigió José María Gutiérrez y donde el escritor Eduardo Gutiérrez publicó
en folletín sus novelas Juan Moreira, El Jorobado y Juan Cuello, entre otras;
el diario de la mañana La Campaña y el semanario de modas El Álbum del Hogar.
Además, se conocieron los periódicos en alemán Argentinisches Wochenblatt
y Deutscher Pioner Am Río de la Plata y en italiano, LOperaío.
1879 Se registran una veintena de nuevas publicaciones. De todas, la que
más se destaca es la Revista de la Biblioteca Pública de Buenos Aires, dirigida
por Manuel Ricardo Trelles. Luego continuó con el nombre de La Biblioteca,
bajo la conducción de Paul Groussac. Del 8 de junio al 5 de octubre el Círculo
Científico Literario hizo dieciocho números de la Revista Literaria. El 20 de agosto se editó La Revista de Ganadería, que hasta su cierre, el
18 de diciembre de 1880, tiró 32 números. El 1º de octubre apareció el periódico La Industria. Dos provincias dieron nuevas publicaciones: Córdoba con La Voz de Río Cuarto,
dirigido por Simón Oswald, de tendencia liberal; La Carcajada, fundada por
Armengol Tecera; La Patria y El Pensamiento, periódico de costumbres; y
Salta con La Civilización y El Demócrata.
1880 En abril se conoció la Nueva Revista de Buenos Aires, dedicada a temas
de historia, política y ciencia. La dirigieron Vicente y Ernesto Quesada,
quienes sacaron 45 números, el último en julio de 1885. Manuel Estrada dirigió
la segunda época de la Revista Argentina, que llegó hasta 1882. Otro medio
importante fue La Revista Argentina de Ganadería y Agricultura, con información
comercial, “agrícola y pastoril”. En el resto del país surgieron publicaciones como L'Eco delle Colonie de
Rosario; Deutsche La Plata Zeitung en la ciudad de La Plata; La Unión Nacional
y La Voz de la Juventud en San Luis; El Bien Público de La Rioja, y en Córdoba
La Prensa Católica y El Interior, que dirigió Benjamín Posse hasta que el
11 de setiembre de 1890 fueron rematadas sus instalaciones en pleno centro
de la ciudad.
1881 El 15 de enero el Ministerio de Guerra y Marina lanzó la Revista Militar
y Naval. De abril a julio salió la publicación quincenal Revista Médico
Quirúrgica. El 28 de setiembre Manuel Láinez dirigió el comienzo de El Diario. Los porteños leyeron en esos días La Ilustración Argentina, revista que
aparecía cada diez días con grabados de Reynaldo Giudice, Eduardo Sivori
y Lucio Correa Morales. En Santiago del Estero se conocieron el periódico
oficialista El Ferrocarril, que redactaron Federico Álvarez y Ramón Pizarro
y que duró hasta 1883, y El Pueblo, órgano político del Círculo de Francisco
Olivera. En Bahía Blanca se distribuyó El Porvenir, fundado por Lucas Abad;
en Villa Mercedes, San Luis, salió El Argentino; en Salta, La Situación
y en San Juan, El Aspirante. Ese año comenzó a difundirse en el mundo el
uso del fotograbado, que permitió imprimir, mediante prensas tipográficas,
dibujos y fotografías. Otro procedimiento habitual era la fototipia, que
permitía obtener clisés tipográficos y que en lugar de trabajar sobre capas
de zinc o cobre -como en el fotograbado-se hacía sobre una capa de gelatina
bicromatada.
1882 El 20 de octubre Adolfo Calle fundó Los Andes de Mendoza, todavía en
circulación. Ese año salieron El Orden de Tucumán, fundado por León M. Rosenwald, y el
periódico católico La Unión de Jujuy, que participó de las controversias
religiosas y educativas de aquellos años, pero que se destacó por sus secciones
de letras y teatro. En Buenos Aires apareció la revista literaria y musical
Nuevo Fígaro.
1883 El 6 de julio salió El Amigo del País, diario político, literario y
mercantil que cesó el 16 de octubre con 85 ediciones. Colaboraron allí Ángel
Navarro, Juan María Gutiérrez y Marco Avellaneda. También salieron Fígaro,
diario de formato pequeño que atacó duramente a los católicos, y La Crónica,
que cesó tres años más tarde; el quincenario Revista Científica y Literaria,
que dirigió Calixto Oyuela, La Voz de la Iglesia, con materiales más amplios
que los que sugería el título duró casi veinte años y La Universidad que
cerró en 1885. Mientras, los catamarqueños leyeron Brisas Andínas y El Creyente,
en Santiago del Estero se distribuyeron El Bonachón y El País; y en Mercedes,
provincia de Buenos Aires, se conoció El Oeste.
1884 El 2 de marzo salió el diario El Día de La Plata, todavía en circulación. El intelectual francés Paul Groussac fundó el vespertino político y literario
Sud América, que apoyó a Julio Argentino Roca y tuvo como colaboradores
a Carlos Pellegrini y Lucio V. Mansilla. También para entonces, se echó
a andar Don Quijote, de la mano de Eduardo Sojo. Su fuerte eran las caricaturas
políticas que hicieron los dibujantes Manuel Mayol y José Cao. “Se compra
pero no se vende” era el lema de la publicación, que se burlaba de todos
pero sin excesos ni chabacanería y que dejó de salir en 1903. En Córdoba el presbítero Fernando Falorní sacó La Prensa Católica y Carlos
Roldán Vergés editó Los Estados, de tendencia liberal. En la tranquilidad
provinciana de Jujuy irrumpió el periódico El Liberticida.
1885 Las publicaciones más importantes que aparecieron en Buenos Aires ese
año fueron La Gaceta Musical, semanario sobre música con ilustraciones;
El Liberal, El Orden y El Censor, fundado por Augusto Belin Sarmiento, nieto
del ex presidente de la Nación. En la localidad bonaerense de Azul, Mariano
C. Berón largó La Enseña Liberal, en Chivilcoy salió el periódico La Democracia,
mientras que en Bahía Blanca Luis Chiaronti hizo El Argentino y en La Plata
apareció la publicación de viajes y literatura La Revista de La Plata. En
Salta salieron El Diario Popular, La Juventud, La Esperanza, El Lector y
El Progreso de Cafayate. En Catamarca se publicaron El Deber, El Autonomista,
La Unión Catamarqueña y Catamarca. En Santiago del Estero se distribuyeron
El Fiel Católico y El Periódico; en Rosario, La Nueva Época y en San Luis,
La Opinión Nacional.
1886 El 1º de marzo se realizó la primera comunicación telefónica de larga
distancia en la Argentina, entre las ciudades de Buenos Aires y La Plata. En Buenos Aires Adolfo Carranza dirigió la Revista Nacional, dedicada a
la historia argentina y americana, que tuvo una permanencia de dos décadas.
Allí salieron, además, La Elegancia Porteña, La Educación, la Revista de
la Asociación de Maestros y La ilustración Infantil, destinada a los chicos. En Córdoba, el presbítero Jacinto Roque Ríos dirigió el periódico católico
El Porvenir; en la localidad de Villa Mercedes, San Luis, surgieron La Libertad
y El Eco del Sur; en Concordia, Entre Ríos, El Amigo del Pueblo; en Catamarca
aparecieron El Progresista y El Calchaquí. En la localidad bonaerense de
Quilmes se imprimió El Quilmeño, que en 1910 tomó el nombre de El Provincial
Y en Chascomús, El Argentino. La introducción de la linotipo en los procesos
de impresión revolucionó la industria editorial. El invento de Ottmar Mergenthaler
permite la distribución automática de los blancos, ensanchándolos o comprimiéndolos
de acuerdo con la longitud de la línea.
1887 En marzo, Teófilo Gemila fundó La Reforma de Tres Arroyos. En Buenos Aires los maestros de la Capital sacaron el periódico El Plata,
la masonería de la República Argentina editó la revista La Acacia y se distribuyeron
El Porteño y la Revista de Productos del País. En Salta apareció El Nacional, en Concepción del Uruguay la revista quincenal
de artes, ciencias y letras El Investigador, en Rosario de Tala La Voz de
Tala y La Democracia, en Rosario El Municipio, en San Luis El Destino y
en Córdoba La Bandera Italiana.
1888 El 20 de julio salió El Sud-Americano, periódico quincenal ilustrado
que dirigió C. A. Shoollred y en el que colaboraron Bartolomé Mitre y Mariano
Pelliza. En Buenos Aires se editaron, entre otros, La Campaña Argentina
(hasta el año siguiente), la Enciclopedia Militar que continuó hasta 1905,
El Ingeniero Civil, órgano de la sociedad de ingenieros civiles de la República
Argentina, y la Revista Patriótica del Pasado Argentino, que dirigió Manuel
Ricardo Trelles. También salieron dos nuevos periódicos en otro idioma:
Buenos Aires Handels-Zeitung (que fue suspendido durante la Primera Guerra
Mundial y cerró en 1922) y Bolletino Mensile della Camara di Comercio ed
Arti in Buenos Aires. En la localidad bonaerense de Zárate se editó El Zarateño, en Tres Arroyos
Los Libres del Sud en Catamarca El Montañés, en San Luis Tribuna y El Iris,
en San Juan El látigo y en Santiago del Estero El País.
1889 En Buenos Aires aparecieron Argentinisches Tageblatt, periódico alemán
fundado por Juan Alemann todavía en circulación, Revue Illustrée du Río
de La Plata, publicación sofisticada y frívola destinada a la colectividad
francesa, El Oriente, El Bien Pobre Y en Tres Arroyos. El Pueblo. En San Juan se editaron El Estudiante, La Provincia y El Porvenir,
en Villa Mercedes, San Luis, El Centinela, en Catamarca Los Andes, en Santiago
del Estero El Dulce, en Rosario The Argentine News y La Opinión de Zárate
que fundó Manuel Dobarro.
1890 Aparecieron en Buenos Aires La Bomba, Revista Ítalo-Americana, Le-petit
Journal, el periódico semanal La Iberia y El País, mientras que en la localidad
de San Fernando lo hizo El Pueblo y en Arrecifes, El Deber. Se distribuyó
Chaco, el primer periódico chaqueño que, sin embargo, se editó en la provincia
de Corrientes. En Catamarca salieron La Reacción, Fra Diavolo, La Provincia
y Bicho Feo; en Santiago del Estero Unión Cívica y Anales de la Educación;
en Mendoza, La Libertad, del liberal Antonio Rodríguez del Busto, y en San
Luis, La Propaganda y El Comercio.
1891 El 17 de enero de 1891 se inició en Chubut el periódico de nombre galés
Ydrafod, que significa “acuerdo”. El 2 de febrero los periodistas de Buenos
Aires fundaron el Círculo de Cronistas, que el 26 de abril de 1898 cambió
su nombre por el de Círculo de la Prensa. La entidad nació con fines cooperativos
y en defensa de los intereses gremiales que ya en esa época empezaban a
asomar. En Buenos Aires se imprimieron El Mundo del Arte, El Cascabel, el vespertino
La Defensa del Pueblo, La Tarde y el periódico Pif-Paf. En Catamarca, La
Nueva Era; El Estudiante en Santiago del Estero, El Cívico en Salta, y en
Rosario Canta Claro, entre otros a La industria gráfica inventó la trieromía,
método de impresión para reproducir imágenes color empleando sólo los tres
colores primarios.
1892 Desde el 3 de abril hasta el 9 de abril de 1928 se imprimió El Independiente
de San Pedro. De las publicaciones aparecidas este año, se destacan La Ilustración
Sud-Americana, Le Courriere Suisse, The Times of Argentine de Buenos Aires;
Juan Fom Artigas fundó el primer periódico pampeano en General Acha, al
cual llamó La Pampa; después cambió su nombre por La Capital y se trasladó
a Santa Rosa. También se imprimieron La Reforma de San Luis y El Inmigrante
de Rosario.
1893 El 17 de junio apareció el primer número de La Nueva Revista, publicación
de carácter literario con amplia información sobre la actualidad nacional
e internacional. Trabajaron en ella Roberto J. Peyró y Leopoldo Díaz, entre
otros. Desapareció el 31 de agosto de 1894. El 2 de agosto Guillermo Stok fundó y dirigió La Quincena, revista literaria
que difundió el modernismo. Entre las publicaciones que se conocieron ese
año están: Álbum de la Guerra del Paraguay, La Baskonia Argentinishe Novine
de Buenos Aires; El Imparcial de Rauch; El Pueblo, de Azul, que dirigió
Manuel C. Chaz, y La Ley de Salta.
1894 El 7 de abril Juan B. Justo fundó La Vanguardia, órgano oficial del
Partido Socialista. El 22 de abril se publicó en Córdoba Los Principios. El 20 de agosto se
publicó el primero de los tres números quincenales que tuvo La Revista de
América, dirigida por Rubén Darío y Ricardo Jaimes Freyre. Mientras Paul
Groussac sacaba Le Courriere Francais en Buenos Aires, en Santiago del Estero
apareció La Unión Provincial y en Salta, El Bien Público, entre otros.
1895 Ese año aparecieron las siguientes publicaciones: Causas Criminales
y Mundanas” El País y Vitalia al Plata en Buenos Aires; El Porvenir en 9
de Julio; El Alfiler en Santiago del Estero; La Actualidad en Salta y El
Tribunal de Comercio en Rosario.
1896 Se conocen en estos días La Revista Rural de Buenos Aires; El Imparcial
de 25 de Mayo; El Noticiero de San Nicolás; La Tarde de Dolores; La Razón
de Salta; el Progreso de Mar del Plata (que duró hasta Solo 1942) y en Concepción
del Uruguay La Juventud, entre otros.
1897 El 6 de marzo se fundó el todavía existente diario La Unión, de Lomas
de Zamora. Entre el V de abril y v el 15 de setiembre circularon los doce números de
La Montaña, “periódico socialista revolucionario” dirigido por los jóvenes
Leopoldo Lugones y José Ingenieros. El quincenario, de ocho páginas de formato
tabloide, dio espacio a las ideas de la época. El 13 de junio salió La Protesta
y ese mismo mes se lanzó El Maquinista Naval, órgano del Centro de Maquinistas
Navales. También se sumaron La Revista Moderna, el periódico semanal ilustrado La
vida en el Hogar, El Sordo-Mudo Argenmanal ilustrado La V tino, órgano del
Instituto Nacional de Sordo-Mudos, El Oriental y La Ingeniería de Buenos
Aires; además de La Gaceta Comercial de Salta.
1898 El 1º de agosto apareció La Nueva Provincia de Bahía Blanca, todavía
en circulación. El 9 de octubre apareció el primer número de Caras y Caretas, una de las
más grandes revistas de la historia argentina. Su creador fue José Sixto
Álvarez, “Fray Mocho”. Cerró el 17 de octubre de 1938. Publicó 2.139 números. El 3 de noviembre en Santiago del Estero se imprimió por primera vez El
Liberal, que sigue informando a sus lectores. Ampliaron el número de publicaciones
nuevas El Mercurio de América de Buenos Aires; La Razón de San Fernando
y La Ley de Mercedes.
1899 El 24 de junio Dionisio Recabarren fundó El Popular de Olavarría, que
continúa la labor informativa. Ese año también el público conoció la revista
semanal de artes y literatura Instantáneas Argentinas, el semanario ilustrado
Iris, El Tribuno, La Plaza y El Diario del Pueblo de Buenos Aires. Además
de los periódicos El Independiente de Trenque Lauquen; El Municipio de Tandil;
La Reforma de Santiago del Estero y Búcaro Salteño de Salta.
1900 El 31 de marzo Emilio Saporiti fundó en la Argentina la primera agencia
de noticias de América y la sexta del mundo. Se trató de la Agencia Saporiti.
El 1º de abril irrumpió el diario religioso El Pueblo, dirigido por José
Sanguinetti. Este año el diplomático y político Carlos Pellegrini fundó
el diario El País.
1901 Ese año se conoció el diario La Argentina.
1902 El 14 de setiembre se fundó La Voz del Pueblo de Tres Arroyos, provincia
de Buenos Aires.
1903 En mayo apareció la revista Ideas, creada y dirigida por Manuel Gálvez.
Colaboraron allí José León Pagano, Roberto J. Peyró, Alberto Gerchunoff,
Julián Aguirre, Ricardo Rojas y José Ingenieros. Salió a lo largo de menos
de dos años.
1904 El 30 de enero apareció la revista El Hogar, que primero fue quincenal
y luego semanal. El 15 de marzo se leyó por primera vez, en Córdoba, el
diario La Voz del Interior, que aún sigue en circulación. El 24 de setiembre el periodista Eustaquio Pellicer fundó la revista PBT
Se presentó al público como “un semanario infantil para chicos de 6 a 80
años”. Tuvo una de las primeras historietas cómicas de ciencia-ficción del
país, llamada “El explorador interplanetario”, que hacía el español José
Serrano. De ser crítica de los distintos gobiernos, la revista pasó en la
década del cincuenta a alentar una posición cercana al oficialismo peronista.
1905 El 1º de marzo Emilio Morales fundó el diario La Razón, que dirigió
José Cortejarena y que hasta su cierre definitivo, en 1990, controló la
familia Peralta Ramos. Dos de quienes fueron sus secretarios generales de
redacción, están entre los periodistas más prestigiosos del país: Félix
Laiño (entre 1937 y 1984) y Jacobo Timerman (1984), que lo convirtió en
matutino. En marzo comenzó su tirada el diario La Verdad, de la localidad bonaerense
de Ayacucho, que aún permanece en el mercado. El 25 de mayo, Tomás Stegagnini creó el diario La Capital de Mar del Plata.
1907 Ese año, Alfredo Bianchi y Roberto E Giusti fundaron la revista Nosotros,
de la que editaron más de cuatrocientos números a lo largo de 36 años. Fue
una expresión de la gente de letras que se basó en un “pensamiento universal
en el que sobresalieron la línea democrática, ecléctica americanista”.
1908 El 26 de julio se conoció el diario porteño La Voz Argentina. El 2 de noviembre el diario El Cronista Comercial inició su tirada.
1909 El 3 de julio se conoció la revista infantil Tit Bits. El 4 de marzo Gustavo Ageret fundó el diario El Liberal, de Corrientes.
1910 El 16 de mayo inició sus servicios la agencia de noticias Los Diarios,
que distribuyó a sus clientes material recortado y clasificado de otros
medios gráficos. El 16 de noviembre apareció, por primera vez, el diario La Razón de Chivilcoy.
1911 El 7 de enero surgió la revista El Mundo Argentino de Editorial Haynes,
que también sacó ese año la publicación Mundo Moderno. El 6 de febrero se
distribuyó El Argentino de Gualeguaychú, provincia de Entre Ríos.
1912 En enero salió la revista referida al transporte El Auto Argentino. El 1º de mayo se imprimió el diario Río Negro, de General Roca, provincia
de Río Negro, todavía en circulación. El 4 de agosto Alberto García Hamilton creó el diario La Gaceta de Tucumán,
que primero salió como semanario. En setiembre salió Revista Telegráfica, dedicada a la especialidad, y que
fue dirigida por Domingo Arbó. El 2 de diciembre en Misiones apareció el diario La Tarde.
1913 Ese año se editó, por primera vez, la Revista de Ciencias Económicas
y Ángel Enrique Raffo publicó en Tucumán Noticias. El 15 de setiembre el uruguayo Natalio Félix Botana fundó el legendario
diario Crítica. En la década del treinta trabajaron en su redacción periodistas
de la talla de Raúl y Enrique González Tuñón, Conrado Nalé Roxlo, Nicolás
Olivari, Carlos De la Púa, Sixto Pondal Ríos y Horacio Rega Molina. Jorge
Luis Borges participó en el suplemento literario del diario, donde publicó
su cuento “El hombre de la esquina rosada”. Dejó de salir el 20 de octubre
de 1963.
1914 El 15 de mayo Aníbal Vázquez redactó por primera vez El Diario de Paraná,
Entre Ríos.
1915 El V de enero nació El Heraldo de Concordia, provincia de Entre Ríos,
y ese mismo día pero en el pueblo de San Francisco, Córdoba, se creó La
Voz de San Justo. Ambos están todavía en actividad.
1916 El 25 de noviembre sale La Tribuna Odontológica, fundada por el doctor
Baltasar G. Branca. Salió también la Revista de Cultura Sexual y Física,
editada por la Editorial Claridad.
1917 El 13 de febrero se editó el diario La Opinión de Pergamino, todavía
en circulación. El 24 de noviembre, el pueblo bonaerense de Junín leyó por primera vez el
diario La Verdad, que aún circula.
1918 El 7 de marzo Constancio Vigil fundó la Editorial Atlántida y sacó
la revista que llevó el mismo nombre. El 7 de agosto se difundió El Litoral,
de la provincia de Santa Fe, diario que todavía está en actividad. Salió la Revista Técnica S.K.F, órgano bimensual de la compañía de ese nombre.
1919 El 30 de mayo apareció la revista deportiva El Gráfico, de Editorial
Atlántida. El lo de octubre salieron el diario Nueva Era de Tandil y el diario porteño
filonazi La Fronda. El 1º de noviembre se inició el diario La Opinión de
Trenque Lauquen. El 17 de noviembre Editorial Atlántida lanzó la publicación infantil Billiken.
1920 El 17 de abril David Michel Torino sacó el periódico El Intransigente
de Salta.
1921 El 13 de marzo se lanzó el diario El Chubut, editado en la ciudad de
Comodoro Rivadavia. El 9 de junio en Necochea, surgió Ecos Diarios, que permanece activo hasta
hoy. El 8 de octubre circuló por Balcarce el diario El Liberal, aún hoy
en la calle. El 24 de octubre apareció La Opinión de Rafaela, provincia de Santa Fe,
diario que sigue imprimiéndose hoy.
1922 En enero salió la revista técnica El Electrónico. El 20 de febrero se editó por primera vez la revista Claridad, dirigida
por Antonio Zamora. Colaboraron en ella figuras paradigmáticas del Grupo
de Boedo: Alvaro Yunque, Leónidas Barletta. Elías Castelnuovo, César Tiempo,
Roberto Mariani, otros representantes de lo que fue entre el veinte y el
treinta el singular socialismo argentino, lectores y seguidores de Tólstoi
e Ingenieros, de Marx y Alberdi. El 16 de mayo Editorial Atlántida sacó
su revista femenina Para Ti. El 2 de junio se imprimió La Reforma, diario de General Pico, La Pampa.
En junio se conoció la revista de humor político Página de Columba, donde
su director, Ramón Columba, escribía su columna titulada “El Congreso que
yo he visto”. 1924 En febrero apareció la revista Martín Fierro. Por su dirección pasaron
Eva Méndez, Oliverio Girondo, Alberto Prebisch, Eduardo Bulrrich y Sergio
Piñero. Allí colaboraron Jorge Luis Borges, Horacio Rega Molina, Jacobo
Fijinan, Xul Solar, Leopoldo Marechal y Emilio Petorutti, entre otros. Llegó
a tirar 20.000 ejemplares. Salió en formato tabloide. Al cerrar en 1927
muchas de sus figuras pasaron a integrar la redacción de Crítica. Generó
un movimiento -el martinfierrismo-y sostuvo al denominado Grupo de Florida.
1925 El 2 de junio los habitantes de la ciudad misionera de Posadas leyeron
el primer ejemplar del diario El Territorio, que sigue activo.
1926 El 1º de enero la ciudad bonaerense de San Nicolás recibió el diario
El Norte, aún en campaña. El 25 de mayo se tiró el diario El Tribuno de
Dolores en Buenos Aires. Ese año el alemán Oskar Baruakse inventó la cámara Leica de 35 mm, que por
su pequeño tamaño y gran maniobrabilidad se convirtió en un elemento fundamental
del periodismo gráfico. También salieron La Construcción Moderna, revista
referida a construcciones; Cacya, órgano del Centro de Arquitectos, Constructores
y otros anexos, de aparición mensual, y La Ingeniería, órgano del Centro
de Ingenieros que en 1941 publicó un número especial de más de mil páginas
con artículos científicos e información en su ramo.
1927 El 26 de marzo Julio Korn puso en circulación la revista Radiolandia,
que informó sobre la agitada vida de la radio, que estaba en pleno auge.
El lo de noviembre despuntó El Sol, del partido bonaerense de Quilmes, fundado
por Antonio Blanco y que aún permanece activo.
1928 El 1º de marzo asomó la revista Chieno, representativa del pensamiento
nacionalista y de la doctrina católica. La dirigió Atilio Detoro Maini y
colaboraron entre otros Ernesto Palacio, Manuel Gálvez, Ignacio Anzoátegui
Irazusta y el propio Jorge Luis Borges, pero también voces extremas como
la de Juho Meinosehe, de posiciones antisemitas. El 14 de mayo Alberto Haynes lanzó el diario El Mundo, el primer tabloide
del país, que dejó de salir el 22 de diciembre de 1967. Por su redacción
pasaron escritores de renombre tales como Roberto Arlt, Roberto Ledesma,
Conrado Nalé Roxlo Y Amado War. El 30 de agosto apareció el diario La Unión
de Catamarca, todavía en los quioscos. El 24 de setiembre, Ramón Columba
dio a conocer la revista de historietas El Tony. En esos meses fueron distribuidas
también la revista El Día Médico y el Boletín Matemático, dedicado al estudio
de la matemática.
1929 En agosto apareció la revista Nuestra Arquitectura. Se fundaron la
Revista de Derecho y Administración Municipal y la revista porteña Mater
Dolorosa y la publicación rosarina Los Municipios, entre otras.
1930 El 4 de noviembre, Editorial Atlántida sacó Chacra & Campo Moderno,
dedicado a temas agrícolas y cuya aparición continúa hasta nuestros días. Se suman en ese año publicaciones como la Revista del Colegio de Abogados,
la Revista del Notariado y Boletín del Colegio de Doctores en Ciencias Económicas.
1931 En enero apareció la revista Sur, dirigida por Victoria Ocampo y con
la colaboración de brillantes plumas extranjeras que tuvieron amplia y cercana
vinculación con la Argentina, entre otros, José Ortega y Gasset (quien en
1937 publicará La rebelión de las masas), Alfonso Reyes y Waldo Frank, y
notorios intelectuales argentinos como Borges, Eduardo Mallea, María Rosa
Olivera. El lo de mayo, San Juan tuvo un nuevo diario: Tribuna, dirigido
por Francisco Bustello. El 23 de mayo se conoció Antena, revista semanal destinada a la información
sobre radiotelefonía. El 10 de junio comenzó Noticias Gráficas, que fue uno de los más importantes
diarios de la tarde. En julio salió la revista cultural Nervio, de izquierda. Con un estilo de
denuncia al fraude, al caudillismo y a las maniobras gubernamentales conservadoras.
En ella colaboraron José Portogalo, Alvaro Yunque, Elías Castelntrovo y
Rodolfo Puiggrós, entre otros. En octubre se imprimió la revista de carácter
informativo Rosalinda.
1932 El 25 de octubre salió la revista Maribel, También se conoció la revista
La Silurante Musicale, dedicada sólo a temas musicales.
1933 El 1º de febrero se edita otro diario nazi: Crisol. El 29 de abril salió Sintonía, revista dedicada a la radio y de gran presentación
en su género, dirigida por Emilio Karstulovic. El 1º de mayo salió el diario
El Noticioso, de información jurídica e interés general. El 9 de julio se
conoció, en la localidad bonaerense de Azul, el diario El Tiempo. El 21
de agosto apareció el primer número del diario La Arena de Santa Rosa, La
Pampa, que todavía circula. Además se conocieron publicaciones como la Revista
Argentina de Cardiología, la Revista Geográfica Americana; Camuatí, órgano
de la Asociación de Artistas que lleva ese nombre, y La Máscara, órgano
de la Asociación Argentina de Actores.
1934 Se imprimió La Gaceta Judicial, periódico jurídico noticioso. El 1º de octubre salió Viva Cien Años, revista dedicada a popularizar conocimientos
médicos. El 7 de noviembre el público leyó por primera vez la vista Leoplán.
Ese año aparecieron también: Argentores, boletín de la Sociedad de Autores
de la Argentina; Radio Magazine, revista técnica bimensual; Natura, revista
de cultura integral, ciencia, filosofía y arte; Radio Técnica, el primer
semanario latinoamericano en su género, además del Boletín de la Asociación
de Abogados de Buenos Aires y La Gaceta del Foro, jurídica.
1935 El 9 de octubre llegó a los quioscos la revista Vosotras, que Julio
Korn dedicó a las mujeres. El 2 de diciembre María Luisa de Robledo publicó la revista femenina Chabela. Ese año apareció la revista jurídica La Ley.
1936 En marzo salió la revista científica Mundo Médico. El 6 de abril Ramón Sopena fundó la revista Aquí está. Apareció la revista Motor de automovilismo, aviación y mecánica. En agosto
Jorge Luis Lenain bautizó la revista de la Liga Naval Argentina Marina y
Navegación. El abogado Marcos Satanovsky fundó El Diario, un periódico progresista
que el fascismo vernáculo estigmatizó como “pasquín comunista”. El 10 de noviembre aparecieron las aventuras del legendario cacique Patoruzú,
de Dante Quinterno.
1937 En enero los amantes de los libros pudieron leer también la Revista
de la Biblioteca Nacional, publicación bimensual de carácter histórico. En junio salió Columna, revista cultural dirigida por César Tiempo. Planteada
como una publicación de grandes formas, es fuerte y original en la inclusión
de críticas de arte y espectáculos. Ese año la Unión Obrera Marítima botó El Marino. También se publicó La Casa, revista referida a la construcción.
1938 El 2 de febrero en Mar del Plata se voceó por la rambla el diario El
Atlántico, que hoy todavía existe. En agosto se publica Conducta, revista
cultural. En ella aparecen colaboraciones de Pedro Henríquez Ureña, Bernardo
Canal Feijoó, Conrado Nalé Roxlo y Raúl Larra, entre otros. El 29 de agosto,
Luis Balanzat sacó el primer número de la revista Estampa. El 10 de noviembre
Mario Amadeo y Juan C. Goyeneche sacaron la revista cultural de extracción
nacionalista y católica Sol y Luna, donde colaboraron desde el primer número
Octavio Devisi y Leopoldo Marechal, entre otros. De esa redacción se nutrió
el golpe de 1943 para cubrir puestos en el área de la educación y la universidad. Ese año se realizó el primer congreso de periodistas del país. Así se creó
la Federación Argentina de Periodistas y se instauró el 7 de junio como
el día del periodista, en conmemoración de la aparición de La Gaceta de
Buenos Ayres. Por su parte, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) designó
esa fecha como el día de la Libertad de Prensa. Se conoció Asociación Folklórica Argentina, órgano de la asociación que
lleva ese nombre.
1939 Se fundó la Asociación de Periodistas de Buenos Aires, que no integró
la Federación Argentina de Periodistas. Luego apareció el Sindicato Argentino
de Prensa, de carácter nacional. Más tarde se constituye la Federación Argentina
de Trabajadores de Prensa. En julio apareció la Revista Oral de Ciencias
Odontológicas, dirigida por Manuel Galea. El 5 de setiembre Juan Torrendell fundó la revista infantil Pif-Paf El 2
de octubre salió, en Córdoba, la publicación Comercio y Justicia, que todavía
circula. El 4 de noviembre apareció El Pampero que, según datos de la Comisión
Parlamentaria encargada de investigar la infiltración nazi en el país, fue
costeado por la Embajada de Alemania. Emilio Ramírez fundó la editorial
que llevó su nombre y editó, a lo largo de varios años, las revistas femeninas
Damas y Damitas, Destinos, Rosicler y Maniquí y Vea y Lea de carácter general.
También se editaron los primeros números del diario Libre Palabra; los semanarios
Argentina Libre y Argentina Acción, así como las revistas Fotocámara y Cinecámara,
Técnicoquimica y Revista Electrónica.
1940 El 15 de mayo Martín Barranco fundó el diario El Rivadavia de Chubut,
En diciembre comenzó a editarse en Argentina la revista mensual Selecciones
del Reader's Digest. Se publicaron ese año, entre otras, la revista Aeronáutica
y Saber Vivir, publicación científica con inclinaciones literarias.
1941 En junio apareció Movimiento, periódico mensual editado por un grupo
de escritores nacionales que dirigió A. Cambons Ocampo. El 19 de noviembre
tintineó Cascabel, una revista de humor político que dirigió Jorge Piacentini
y en la que colaboraron Emilio Villalba Welsh, Carlos Warnes, Conrado Nalé
Roxlo y Landrá. Cerró seis años después a La Biblioteca Argentina Circulante
Sarmiento hizo rodar el Archivo de Información Argentina, con datos biográficos
e históricos sobre personalidades argentinas. También se publica Viviendas
Populares, editada por la Sociedad Central de Arquitectos.
1944 El 2 de mayo se fundó en la localidad bonaerense de Miramar el Semanario
Crónica, que sigue todavía en actividad. El 20 de junio en la localidad bonaerense de Rojas se distribuyó el diario
La Voz de Rojas, que sigue existiendo. El 16 de noviembre el dibujante Guillermo
Dijito como director y Eduardo Almira como secretario de redacción -sacaron
la revista de humor Rico Tipo, para competir con Paroníza. Alguno de los
que colaboraron fueron Raimundo Calcagno “Calki”. Luis Alberio Reilly “Billy
Kerosene” y el dibujante Oski.
1945 El 28 de agosto Roberto Noble fundó el diario Clarín que décadas después,
se convertiría en el de mayor tirada de Hispanoamérica. La empresa editora Columba S.A. comenzó la impresión del álbum mensual de
historietas Intervalo, que continúa hasta hoy.
1946 El 11 de enero comenzó a circular el diario El Laborista, órgano oficial
del Partido Laborista (peronista). El 30 de octubre la Editorial Emilio
Ramírez S.A. edita el primer número de la revista Vea y Lea, con información
de carácter general. El 16 de diciembre, para certificar la circulación
neta “pagada o gratuita” de las publicaciones asociadas, se fundó el Instituto
Verificador de Circulaciones (IVC), integrado por anunciantes, agencias
de publicidad y editores. Esta entidad sin fines de lucro recibe trimestralmente
las declaraciones juradas de sus integrantes con el número de sus ediciones
que, luego de procesadas, reflejan la situación del mercado. Ese año John
Mauchey y Presper Eckerl de la Universidad de Pennsylvania construyeron
la primera computadora digital, que pesaba treinta toneladas y medía quince
metros.
1947 El 5 de julio se publicó en San Juan el Diario de Cuyo, que sigue en
actividad. 1948 Apareció Más allá, revista de ciencia ficción dirigida por el físico
y matemático Oscar Varsavsk 1949 El 7 de abril se vendió por primera vez al público diario Noticias
de Pehuajó, que sigue en actividad El 21 de agosto se fundó el diario El
Tribuno de Salta, que sigue publicándose.
1950 En noviembre se vendió por primera vez la revista quincenal Visión-la
revista latinoamericana, de Editorial Técnica, 1951 El 30 de junio apareció el semanario El Economista, dedicado a temas
financieros. En primavera Dora de Boneo condujo al grupo de poetas (César Fernández Moreno,
León Benarós y Alberto Ponce de León) que dio vida a la revista literaria
El ‘40, de la que se conocieron seis números a lo largo de dos años.
1953 El 15 de junio se imprimió por primera vez el diario La Mañana de Bolívar. En noviembre apareció la célebre revista cultural Contorno, que motorizaron
los hermanos Ismael y David Viñas y en la que participaron Adelaida Gigli,
León Rozitchner, Adolfo Pietro, Noé Jitrik y Juan José Sebreli, entre otros.
Cerró en abril de 1959. Los hermanos Bruno y Tulio Jacovella editaron la revista semanal Esto es.
1954 El 7 de abril, con una tirada inicial de 30.000 ejemplares, apareció
Así es Boca, semanario partidista de veinticuatro páginas, impreso en rotograbado,
en color sepia. Ya había otras dos revistas que seguían la campaña de Boca.
El 30 de mayo de 1973, en su edición número 985, dejó de salir.
1956 En febrero aparece La Gaceta Literaria, revista cultural dirigida por
Pedro Orgambide y Roberto Hosne, salieron 21 números hasta setiembre de
1960. El 24 de enero irrumpió en Jujuy el diario El Pregón. El 11 de junio veintitrés
obispos católicos, entre los que estaba el después cardenal Juan Carlos
Aramburu, inauguraron el servicio noticioso de la Agencia Informativa Católica
Argentina (AICA), que se especializó en la difusión de información de la
Iglesia a Boris Spivacow creó, en esos días, la colección Gatito, una revista
infantil de gran repercusión en Argentina y América latina, de Editorial
Abril. Las aventuras de Gatito, inspiradas en el Gato con botas de Perrault,
fueron escritas fundamentalmente por Héctor Oesterheld con el seudónimo
de Sánchez Pujol.
1957 El diario Mundo saca el suplemento humorístico Tía Vicenta, de Landrú,
que pronto convirtió en un suceso y multiplicó las ventas del diario. El
último número de Tía Vicenta fue el del 11 de julio de 1966, cuando un decreto
del dictador Juan Carlos Onganía, molesto por una caricatura de él publicada
en la tapa del número anterior, ordenó su clausura. La Editorial Sarmiento sacó la revista Así, que aparecía martes, jueves
y sábados y estaba destinada a un público popular; privilegiaba la información
policial con grandes fotos en tonos sepia. De mayo a julio, el flamante
semanario dirigido por los hermanos Bruno y Tulio Jacovella publicó en serie
la investigación de Rodolfo Walsh sobre los fusilamientos de civiles en
los basurales de José León Suárez que, con el tiempo, se convertía en el
libro Operación Masacre. En octubre salió la revista literaria El Grillo
de Papel, cuyos directores fueron Abelardo Castillo, Arnoldo Liberman, Víctor
García Oscar Castelo. El 14 de octubre se inició la era espacial, cuando la ex Unión Soviética
puso en órbita el primer satélite, que llamó Sputnik. Aparecieron los primeros
números de la revista de historietas DArtagnan, que edita todavía la empresa
Columba S.A.
1958 El 26 de noviembre Francisco Manrique tiró el primer número del vespertino
Correo de la Tarde, que cerró el 30 de noviembre de 1963.
1959 El 27 de febrero apareció en Río Gallegos La Opinión Austral. El 12 de mayo se creó la agencia oficial de noticias Télam. El 12 de octubre nació en La Rioja El Independiente, que sigue en actividad.
1960 El 3 de abril salió a la calle el primer número del semanario católico
Esquiú, que fundaron Luis Lucía Puig y su hermano Agustín, sacerdote asuncionista.
Sus principales lectores fueron los del diario El Pueblo, que compraban
su ejemplar en las iglesias. El 3 de mayo se fundó el diario El Litoral
en la provincia de Corrientes. El V de junio se publicó la Revista Vivienda, de aparición mensual y dedicada
a la arquitectura. El 12 de agosto dejó de aparecer el mensuario satírico Cuatro Patas, de
Carlos Del Peral, al que la policía política calificó de “subversivo y perturbador
del orden”. El 4 de octubre apareció el semanario Che, cuyo director fue
Pablo Giussani. Fue clausurada el 17 de noviembre en su número 27, en el
cual se hizo referencia a un conflicto gremial de la época. El sábado 22
de octubre de 1960, a 8 pesos el ejemplar, salió Usted, de la Editorial
Pablo Ramírez, que cerró después del número 32, en mayo del 61, por problemas
económicos.
1961 El 6 de marzo salió el primer número regular de la revista semanal
Análisis, como publicación especializada en el mercado de valores y la evaluación
de las inversiones bursátiles. En mayo apareció la revista bimestral El
Escarabajo de Oro, que dirigieron Abelardo Castillo y Arnoldo Liberman y
en la que colaboraron Horacio Salas, Liliana Heker y Humberto Constantini,
entre otros destacados escritores. El 7 de setiembre se editó el primer número del diario La Mañana de Formosa. En noviembre se conoció la primera de las veintinueve entregas que alcanzó,
en julio de 1966, la revista de arte y cultura Hoy en la Cultura. Participaron
en ella Pedro Orgambide, Raúl Larra, David Viñas, Fernando Birti, Javier
Villafañe y Juan José Manauta entre otros. En diciembre se echó a correr
la revista de automovilismo Parabrisas.
1962 El 31 de enero en la ciudad de Comodoro Rivadavia, Chubut, se publicó
el diario Crónica. El 8 de noviembre salió por primera vez en la ciudad de 25 de Mayo el diario
La Mañana. El 13 de noviembre se distribuyó la revista de análisis político
Primera Plana, que modernizó el periodismo argentino. La creó y dirigió
Jacobo Timerman, quien convocó a trabajar a Luis González O’Donnell, Ramiro
de Casasbeflas, Tomás Eloy Maitines, Julián Delgado y Osiris Troiani, entre
otros. El 5 de agosto de 1969 la cerró el dictador Juan Carlos Onganía.
1963 El 12 de junio la Editorial Abril lanzó la revista D – Guía, dedicada
a la actividad televisiva. Fueron sus creadores Enzo Ardiló Julio Korn. El 5 de julio sale por primera vez la revista mensual Pereztrica, de Editorial
Abril, que, el 25 de junio de 1968, se hace semanal. Dirigida por Mario
Quirós, allí colaboraron Miguel Bonasso. Juan Gelman, Edinundo Guibourg
y Jorge Capsiski, entre otros. El 29 de julio Héctor Ricardo García fundó el diario Crónica. El 1º de agosto sale el primer número de la publicación cultural El Barrilete
que dirigió Roberto Santoro y en la que colaboraron Horacio Salas, Héctor
Yánover y Enrique Wemicke, entre otros. Salieron trece ejemplares en total.
El último, en diciembre de 1967. El 20 de octubre desapareció el diario Crítica. En noviembre Rogelio Frigerio relanzó la revista Qué. La publicación tenía
ya dos épocas: la primera entre agosto de 1946 y setiembre de 1947 y la
segunda entre noviembre de 1955 y abril de 1959.
1964 El 21 de junio reapareció -como semanario-el Correo de la Tarde de
Francisco Manrique. El 1º de julio Bernardo Neustadt arrancó con el semanario
político Todo. El 1º de octubre apareció La Rosa Blindada, revista cultural mensual cuyas
ocho entregas condujeron Carlos Alberto Brocato Y José Luis Mangieri y que
contó con el poeta Raúl González Tuñón como “director de honor”. El 8 de octubre apareció la revista infantil Anteojito, creación del genial
dibujante Manuel García Ferré. El 30 de noviembre desapareció el diario
de la tarde Noticias Gráficas. El 28 de diciembre dejó de salir el diario
El Siglo.
1965 El 7 de mayo Jacobo Timerman lanzó al mercado la revista de actualidad
política Confirmado. El 29 de julio salió a la calle la revista semanal
más exitosa de Editorial Atlántida: Gente.
1966 El lo de abril apareció la publicación Acción, órgano de los cooperativistas,
de aparición quincenal. El 2 de mayo se conoció en San Luis El Diario de la República. En junio, la Editorial Abril sacó la revista de automovilismo Corsa. El 27 de julio Jorge Palacio inició la revista humorística mensual Avivato,
que apareció en los quioscos con 52 páginas. En agosto salió por primera
vez la revista Inédito, que llegó a las cien ediciones, hasta 1972. El 2
de setiembre se conoció el primer número de una nueva etapa de la revista
semanal Análisis, con la incorporación de nuevas secciones que ampliaron
el abanico temático, que inicialmente sólo alcanzaba a cuestiones económicas
y bursátiles. El 1º de noviembre comenzó la distribución de la revista mensual
Fotomundo.
1967 En abril, la Editorial Primera Plana lanzó el quincenario de economía
y negocios Competencia. El 12 de mayo reapareció la revista deportiva Goles. En mayo, el historiador Félix Luna editó el primer número de Todo es Historia,
dedicado al relato y la revisión de los más variados temas nacionales e
internacionales. Contó con la colaboración de importantes historiadores
y periodistas, como María Sáenz Quesada, Luis Alberto Romero y Osvaldo Bayer,
quien publicó allí los primeros resultados de su investigación sobre la
matanza de obreros en el sur argentino que se convertiría en el libro La
Patagonia Trágica. El 11 de mayo salió la revista de humor La Hipotenusa,
que dirigió Luis Alberto Murray y contó entre sus colaboradores con el poeta
Daniel Giribaldí. El 16 de mayo apareció en los quioscos la revista Siete Días Ilustrados,
que hasta entonces se distribuía como suplemento del diario La Razón de
los martes. La Editorial Abril encargó el proyecto a Luis Clur. El 30 de junio apareció en la ciudad de Comodoro Rivadavia el diario El
Patagónico.
1968 El 1º de julio apareció en Resistencia, Chaco, el diario El Norte. En octubre se conoció el primer número de la revista Dinamis, de la Editorial
2 de Octubre. La dirigió Roberto Guido y abordó temas de política nacional
e internacional y economía.
1969 En agosto salió la revista económica Mercado. A mediados de setiembre, Editorial Abril lanzó la revista Semana Gráfica
con información general Y un importante despliegue fotográfico.
1970 El 15 de enero apareció en Merlo, San Luis, el diario Los Principios. A partir de febrero, los jóvenes pudieron leer la revista mensual dedicada
a la información sobre rock Pelo, que hacía Daniel Ripoll. El V de agosto
se presentó en sociedad la revista de humor cordobés Hortensia, que dirigía
Alberto Cognini. La publicación se convirtió en un suceso al poco tiempo
y su tirada alcanzó los 150.000 ejemplares. Allí colaboraron Roberto Fontanarrosa,
Cristian, el Pelao” Alonso, el Sapo” Cativa y el “Gordo” Oviedo, entre otros.
1971 El 4 de mayo nació el mítico diario La Opinión de Jacobo Timerman,
que apuntó fundamentalmente al análisis de la información política y cultural.
1972 El 15 de marzo la agencia Diarios y Noticias (DyN) emitió su primer
despacho informativo. El lunes 22 de mayo de 1972 la Editorial Abril sacó
su revista de información política para América latina llamada Siete Días
Internacional. En octubre la Editorial Perfil imprimió la revista Weekend, dedicada al
camping y los deportes al aire libre. El jueves 16 de noviembre los hermanos
Jacovella lanzaron el diario peronista Mayoría, que el 31 de marzo de 1976
se despidió de sus lectores. Oskar Blotta y Andrés Cascioli sacaron la publicación humorística Satiricón,
que desapareció en 1974.
1973 El 30 de enero apareció en Corrientes el diario Época. Entre enero y marzo se produjo la fusión de las revistas Análisis y Confirmado,
dando origen al semanario Análisis Confirmado. El 1º de febrero Hugo Gambini
fundó la revista mensual Redacción, por donde pasaron muchos de los periodistas
que hicieron Primera Plana, Confirmado y Panorama, entre ellos Osiris Troiani.
En mayo apareció la revista cultural Crisis, a cuya cabeza estaba el narrador
y escritor uruguayo Eduardo Galeano. Por su redacción pasaron, entre otros,
Rogelio García Lupo, Heriberto Muraro, Aníbal Ford, los poetas Juan Gelman,
Mario Benedetti y Francisco “Paco” Urondo y el dibujante Hermenegildo Sábat.
Cerró en agosto de 1976, cuando los militares ya habían tomado el poder.
La revista tuvo dos nuevas etapas: una entre abril de 1986 y 1987, dirigida
por Vicente Zito Lema, y otra entre setiembre de ese año y, 1989. El 11
de setiembre se constituyó la agencia informativa Noticias Argentinas (NA).
El 21 de noviembre apareció el matutino peronista Noticias sobre todo lo
que pasa en el mundo, que dirigió el periodista Miguel Bonasso. Era de tamaño
tabloide y sus ediciones tenían veinticuatro páginas.
1974 El grupo editorial de la familia Kraiselburd (propietaria de El Día,
de La Plata) sacó en Avellaneda Diario Popular para competir por los mismos
lectores de Crónica.
1975 En agosto apareció la revista para el tiempo libre Salimos. El 10 de octubre se fundó en la ciudad de Trelew otro periódico que lleva
el nombre de la provincia patagónica: El Chubut. Apareció el primer número
de la revista bimestral Prensa Económica.
1976 En agosto apareció la revista Expreso Imaginario, que contó como director
de arte con el músico y actor Horacio Fontova. Entre otros, por allí pasaron
Roberto Pettinato y Pipo Lernoud. Dejó de salir en diciembre de 1982. El
24 de setiembre, Editorial Atlántida lanzó al mercado el semanario político
Somos, que cerró el 22 de diciembre de 1993 con su edición número 900. El
3 de noviembre apareció la revista La Semana de Editorial Perfil. El 9 de diciembre, Julio Ramos distribuye en la “city” porteña los mil ejemplares
del primer número del boletín económico Ámbito Financiero, que crecería
con los años hasta convertirse en diario de consulta obligada para los hombres
y mujeres de negocios.
1977 El 25 de marzo el periodista y escritor Rodolfo Walsh fue asesinado
por una patrulla de la Armada que lo emboscó momentos después de que distribuyó
su famosa Carta abierta de Rodolfo Walsh a la Junta Militar”, donde reclamaba
por la violación de los derechos humanos. El 5 de octubre las madres de
Plaza de Mayo (que todavía no se llamaban así) lograron publicar la primera
solicitada pidiendo por los desaparecidos bajo el título “No pedimos más
que la verdad ocupó media página del diario La Prensa y la firmaron 237
parientes de los secuestrados por la Junta Militar.
1978 El 3 de abril sectores vinculados con el entonces jefe de la Marina,
Emilio Massera, sacaron el diario Convicción, con el objetivo de apuntalar
y difundir las pretensiones presidenciales del marino. En junio, durante
el mundial de fútbol, la Editorial La Urraca sacó Humor, su revista más
famosa. El 7 de junio se lanzó la versión argentina de la revista Playboy,
de cuya edición en el país se encargó la Editorial Perfil. La profesora
universitaria Beatriz Sarlo comenzó la publicación de la revista cultural
Punto de Vista. Ese año salió la revista infantil Humi, de la Editorial
La Urraca. Tras 39 números creativos, distintos y divertidos pero que no
lograron éxito de ventas, cierra en 1983. Competía con Billiken y Anteojito.
Volvió en junio de 1991, casi una década después, apuntando a captar a sus
antiguos lectores (adolescentes y jóvenes). Por su redacción pasaron Laura
Linares, Oche Califa, Ema Wolf y Ricardo Marino.
1979 En julio Editorial Perfil sacó la revista Semanario.
1980 El 27 de mayo apareció el número uno del semanario Flash, dedicado
a la farándula, el espectáculo y los hechos curiosos. El 9 de agosto salió en la localidad cordobesa de Río Cuarto el diario Puntal.
1981 El 5 de noviembre en Río Tercero, Córdoba, circuló por primera vez
el diario Tribuna. El 14 de abril se imprimió el primer número de la revista
deportiva Estadio. En setiembre se editó el primer ejemplar de la revista
deportiva Todo Fútbol.
1982 En enero, Gabriel Levinas sacó la revista mensual de temas políticos
El Porteño. El 6 de setiembre aparece el número 1º del diario La VOZ, de la Editorial
Martes S.A., que, con un recuadro en tapa anunciaba: “La Voz se propone
ser la voz y la verdad del Pueblo”. Exactamente tres años después (y con
algunos cierres parciales), el 6 de setiembre de 1985, el diario ocupa por
última vez los estantes de los quioscos. El 15 de noviembre la Editorial
Perfil prometía a sus potenciales lectores una revista que les cambiaría
la vida. Era Perfil, dirigida por Jorge Fontevecchia. El 17 de noviembre
los quioscos venden por primera vez el diario Tiempo Argentino, que cerró
el 27 de setiembre de 1986. Salió la revista Uno mismo, de la Editorial Agedit.
1983 En marzo apareció la revista trimestral Reporte, dirigida por Patricio
Loizaga. El 15 de abril salió la revista dedicada a la informática Computer
world Argentina. El 29 de setiembre salió La Época. Su slogan era: “Diario
comprometido de la mañana”. Era la tercera vez que un diario salía con esa
marca, dirigido esta vez por Silvio Papi y Pascual Albanese. La derrota
del peronismo en las elecciones del 30 de octubre de ese año condicionó
su existencia. En 1945, antes de la llegada de Perón al poder, otro diario
también llamado La Época fue el único que lo apoyó. El 24 de octubre de
1983 apareció El Testigo, un quincenario editado por Diario Popular, dirigido
por Carlos Maggi, Carlos Ares y Horacio del Prado. Su edición fue de cincuenta
mil ejemplares. En ese momento, la editorial sacaba Destape (con una tirada
de 143 mil revistas), Shock (15 8 mil) y Femidiario. Ese mismo año Daniel Ripoll sacó otra revista destinada a los consumidores
de rock, Metal, de aparición mensual.
1984 En enero apareció en los quioscos el primer número del mensuario político
Claves dirigido por Carlos Quiroz, quien en la década del setenta editó
un mensuario con el mismo nombre en la provincia de Mendoza. El 1º de abril se fundó El Diario del Sur de Córdoba, en la ciudad de Villa
María. En junio inició su tirada la revista dedicada a la gastronomía Cuisine &
Vins. El viernes 7 de setiembre estuvo en los quioscos el semanario El Periodista,
de Editorial La Urraca, que dejó de aparecer el 2 de mayo de 1989.
1985 En junio el economista Javier González Fraga editó por primera vez
El Diario, que sigue saliendo los lunes y viernes. En noviembre Producción
García Ferré comenzó con la revista mensual Muy Interesante, de conocimientos
científicos y descubrimientos varios. Salió también la revista Eroticón, editada por Oskar Blotta.
1986 El Diario de Poesía de Daniel Samoilovich se abrió camino en el duro
invierno de Buenos Aires.
1987 Aparece el diario Página/12, dirigido por Jorge Lanata y Ernesto Tiffenberg
y financiado por Fernando Sokolowicz. El 24 de abril, y con la dirección
de Mario Diament, comenzó su circulación la revista económica Expreso. Durante
la primera semana de octubre el economista y periodista Alejandro Horowicz
lanzó el primer número de la revista cultural y política Consignas. En octubre
se conoció la revista Compu Magazine. En diciembre salió la revista Unidos
Universidad, que dirigía el entonces dirigente peronista Carlos Chacho”
Álvarez.
1988 El 8 de julio nace el diario El Ancasti de Catamarca, que todavía circula. La periodista Adriana Schettini, con su nota “Los caballeros de la memoria”,
sobre la Logia masónica en la Argentina, obtuvo el premio José Martí de
periodismo que anualmente otorga la agencia cubana de noticias Prensa Latina.
La nota se publicó en Página12. El 20 de octubre se distribuyó la revista
Mañana Profesional, dedicada a quienes buscan conseguir o mejorar su empleo.
En noviembre, Editorial Atlántida envió al mercado la revista Conozca Más,
dedicada a descubrimientos científicos y tecnológicos. Se construyó el primer
sistema trasatlántico de fibra óptica que conectó a Estados Unidos, Francia
v Gran Bretaña y que resultó decisivo en el periodismo europeo.
1989 En abril Osvaldo Vanoli y Miguel Ángel Quarterolo sacaron la revista
Zoom, dedicada a la fotografía. El jueves 13 de abril apareció el diario
de izquierda Nuevo Sur, financiado por el Partido Comunista, que dirigió
el abogado Eduardo Luis Duhalde. Dejó de aparecer por problemas financieros
el viernes 28 de diciembre de 1990, con el número 617. El periodista Luis
Bruchstein, de Página/12, obtuvo el premio José Martí, otorgado por la agencia
Prensa Latina, de Cuba, por su nota Ciento cincuenta años”. En junio retornó a los quioscos, tras varios años de ausencia, con su número
19, la revista Medios y Comunicación, dirigida por Raúl Barreiros. También apareció Estación 90, de Miguel Repiso (Rep) y Sergio Joselovsky.
Esta publicación tuvo una existencia breve. En julio apareció la revista Páginal3 que dirigió Jorge Lanata y editó la
misma empresa que hacía con éxito el diario Página12. Sucesivamente sus
jefes de redacción fueron Sandra Russo, Martín Caparrós, Eduardo Blaustein
y Rodrigo Fresán. El 1º de julio salió la revista mensual El Publicitario. El 4 de julio, en la localidad bonaerense de Benito Juárez, salió el diario
El Fénix. Ese mes apareció la revista de literatura Babel, cuya dirección compartían
Jorge Lorio y Martín Caparrós. El 1’ de agosto Juan Carlos De Pablo sacó
la revista de macroeconomía Contexto, todavía en circulación. En setiembre
de 1989 aparecieron nuevas revistas, con títulos legendarios: Informe de
Crisis, una nueva etapa de Crisis, y el quincenario Los Periodistas que,
en cooperativa, dirigió Eduardo Jozami. En este mes, por tercera vez en
su historia, reapareció Cerdos y Peces, dirigida por Enríque Symns. El domingo 12 de noviembre fue la fecha en que Editorial Perfil sacó el
semanario Noticias, presentado como una continuación de la desaparecida
revista La Semana que editó la misma editorial.
1990 En junio Editores Asociados lanzó la revista mensual Tema Privado sobre
sexualidad. El 5 de julio se registra una nueva Primera Plana. La dirige Gloria Bouché,
esposa del entonces vicegobernador de la provincia de Buenos Aires, Luis
Macaya. El 1º de agosto, un grupo de docentes y estudiantes de la carrera
de Periodismo de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ) puso
en marcha la Agencia Universitaria de Noticias (AUN). Dedicada exclusivamente
a la información del sur del Gran Buenos Aires, fue la primera de su tipo
en el país. El 10 de setiembre de 1990, apareció Extra, un vespertino editado
por El Cronista Comercial, en manos del empresario Eduardo Eurnekian. Tuvo
una tirada inicial de cuarenta mil ejemplares. “No competimos con Crónica.
Salimos a ocupar el espacio que dejó La Razón”, explicó Eurnekian. Dejó
de aparecer el 27 de junio de 1992. El 16 de noviembre se presentó en sociedad
en la ciudad chaqueña de Resistencia El Diario. En diciembre, un grupo de científicos sociales dirigidos por el entonces
vicerrector de la Universidad de Buenos Aires. Atilio Borón, hizo la revista
El Cielo por Asalto.
1991 El 2 de mayo apareció el diario La Voz de Zárate, de esa localidad
bonaerense. El 11 de mayo la Editorial Atlántida sacó la primera tirada de la revista
semanal Tele Clic, dedicada a la televisión y sus artistas. El 10 de junio, Editorial Atlántida lanzó la revista mensual Negocios. En el invierno salió la revista Delitos y Castigos, dedicada a casos policiales,
dirigida por Alberto Schiprepe y Mauricio Cohen Salama. La secretaria de
redacción era Miriam Lewin, hoy en Canal 13. El miércoles 28 de agosto se suicidó en México el periodista argentino Gregorio
Selser, conocido por sus investigaciones sobre las intervenciones norteamericanas
en América latina. El 5 de setiembre apareció el primer número del quincenario cultural La
Maga, que, tras un breve intervalo durante el verano de 1992, reapareció
como semanario con idéntico formato y contenido. El 16 de setiembre se conoció
en Formosa la primera edición del diario El Comercial.
1992 En enero, los cinéfilos tuvieron entre sus manos el primer ejemplar
de la revista El Amante. A mediados de abril se distribuyó El Libertino, revista mensual de relatos
eróticos que dirigió Juan José Salinas. El 29 de abril, reapareció Panorama,
esta vez convertida en una publicación de negocios, editada por el Grupo
Editor Brasileño Argentino (GEBA) y dirigida por Néstor Scibona. El 3 de
mayo los habitantes de Santa Rosa leyeron El Diario de La Pampa. En junio
el ajedrecista y periodista de la revista Humor, Jaime Einma fue encarcelado
luego de ventilar en sus notas irregularidades cometidas en el Banco de
San Luis. En octubre, Editorial Perfil sacó la revista semanal Caras dedicada a mostrar
aspectos de la vida privada de miembros de la farándula y la dirigencia
política. También ese mes, comenzó a editarse la revista mensual Man, que
desde hace años sale en España. Dirigen la publicación Pablo Ditbom y Juan
Sasturain. El 3 de noviembre reapareció el vespertino La Razón, marca que
compró un grupo empresario encabezado por el economista Juan Alemann. Ese año, el periodista político del diario Página12 Román Lejtman recibió
el premio Rey de España, rubro prensa, otorgado por la agencia española
EFE a su investigación del llamado Narcogate, que echó luz sobre las relaciones
entre la familia del presidente Carlos Menem y el lavado de narcodólares.
1993 El 2 de junio muere a los 66 años Oscar “El Negro” Díaz, renovador,
culto y talentoso diseñador gráfico que trabajó en el Centro Editor de América
Latina y en Eudeba. El 23 de junio se presentó en Buenos Aires la revista Co & Co (Comics and
Company) que el argentino Héctor Chimini editaba desde tiempo antes en España,
país donde estuvo exiliado durante la última dictadura. Ese mes, se relanzó la revista de fútbol Goles. El periodista César Volco,
que trabajó quince años en ese medio, le compró la marca a Editorial Abril
y la puso nuevamente en circulación. El 18 de setiembre concluyó de un modo abrupto la tira “El Negro Blanco”,
que con guión de Carlos Trillo y dibujos de Ernesto García Seijas ocupaba
el espacio superior de la contratapa de Clarín desde noviembre de 1987.
Blanco había reemplazado a “El Loco Chávez”, de Trillo y Altuna, y a la
vez su lugar lo ocupó “El Nene Montanaro”, de Horacio Altuna. La profesión
de los tres personajes es la de periodista. Porque eso me permite meterlos
en todas partes”, según su autor. El 10 de diciembre se fundó el diario Hoy en la Noticia de La Plata.
1994 El 11 de mayo, aparece Urgente & Especial, publicación de información
política y económica que dirige Edgar Mainhard. El 18 de mayo apareció el
diario Cuarto Poder, editado por el ex dueño de La Razón, José Pirillo.
El 19 de junio aparece la revista Viva, el suplemento dominical de Clarín.
Los directores son Roberto Guareschi y Jorge Ezequiel Sánchez, la coordinación
periodística la realizan Gerardo Heidel y Claudia Acuña, el diagramador
es Roberto Veiga y el jefe de fotografía es Daniel Merle. El 25 de junio el diario La Nación cambió el antiguo sistema de revelado
sobre papel fotográfico por el moderno scanner digital, que toma la imagen
directamente desde el negativo. Este sistema mejora el brillo, el contraste,
intensidad, y la calidad de las fotografías. El 9 de julio muere el periodista
Carlos Abrevaya. El 17 de julio muere el editor Boris Spivacow. El 29 de julio muere el fotógrafo Ricardo Alfieri. El 12 de setiembre el diario La Razón cambia su tradicional formato sábana
para pasar a ser tabloide. Con color en la tapa y en los suplementos. A
mediados de setiembre se conformó la agencia informativa Noticias de Comunicación
(NC), que depende de la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires
(UTPBA). El 23 de octubre salió en la ciudad santacruceña de Caleta Olivia
el diario El Tiempo de Santa Cruz. El 6 de noviembre se editó en Tucumán el primer número de El Periódico.
1995 El miércoles 5 de abril el animador Gerardo Sofovich sacó El Expreso
Diario de pequeño tamaño y en colores. Tuvo por objetivo apoyar el gobierno
de Carlos Menem y desapareció de los quioscos en junio de 1996. El 24 de
abril apareció la versión argentina de la revista femenina Elle, editada
por Clarín y un socio chileno, con la dirección de Ana Torrejón y con Mariana
Rapaport en la redacción. En mayo, la Editorial AZ, especializada en libros de texto, sacó una nueva
revista infantil que llamó AZ Diez. El 5 de junio las periodistas María
Eugenia Estenssoro y Norma Morandini presentaron en sociedad la revista
bimensual Mujeres y Compañía, dedicada a mujeres profesionales que trabajan.
Ese año murió el célebre periodista deportivo Luis Sciutto, más conocido
por el seudónimo de Diego Lucero, quien tenía el envidiable récord de haber
asistido a todos los mundiales de fútbol.
1996 El 23 de mayo el Grupo Clarín puso en circulación el primer diario
íntegramente deportivo del país: Olé, con la dirección de Ricardo Roa. En julio salió en Buenos Aires la revista cultural Los con la licencia de
la revista francesa Les Inrockuptibles. El 26 de agosto murió Juan Jorge Cubas, que llevaba sesenta y seis años
como cronista acreditado en el Palacio de Tribunales, cuarenta de ellos
trabajando para Clarín. Había pasado por Ultima Hora, El Cronista Comercial,
La Prensa, Noticias Gráficas, y la agencia Télam. A fines de agosto reaparece
El Nuevo Porteño. “Elegimos un nombre que alude a una de las pocas publicaciones
que en los años recientes se caracterizó por una verdadera independencia
de cualquier tipo de poder político económico”, escribió su director, Mario
Moldován. El rey de España Juan Carlos de Borbón entregó el premio prensa a Daniel
Santoro de la sección Política del diario Clarín por su investigación de
la venta ilegal de armas de Argentina a Ecuador en plena Guerra del Cóndor,
que en 1995 ese país sostuvo con Perú.
Tomado de Carlos Ulanovsky:
Paren las rotativas. Una historia de grandes diarios, revistas y periodistas
argentinos, Ed. Espasa, 1997.
Refiriéndose al inicio del periodismo en Hispanoamérica, el ya fallecido
genial historiador y profesor de la Universidad de Buenos Aires A. J. Pérez
Amuchástegui señala: “A fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, la América
española presenció la publicación de hojas de corte literario, que trataban
de los más diversos temas poniendo el acento en la necesidad de renovar
los esquemas mentales vigentes. En Nueva España (hoy México), aparecieron
La Gaceta de México, el Diario de México y una Gaceta de Literatura. En
Nueva Granada (hoy Colombia), el Papel Periódico de Santa Fe de Bogotá,
y más tarde una publicación que quería ser científica: Semanario del Reino
de Nueva Granada. En Quito, el Nuevo Luciano, Despertador de los Ingenios;
en Perú, una hoja cuyo nombre habla a las claras de los asuntos por los
que se interesaba: El Mercurio Peruano de Historia, Literatura y Noticias
Públicas que da a la luz la Sociedad Académica de Amantes de Lima. Buenos
Aires, tuvo su primer periódico en 1801: el Telégrafo Mercantil, Rural,
Político, Económico e Historiográfico del Río de la Plata, aunque antes
habían aparecido algunas gacetas aisladas” (Pérez Amuchástegui, Crónica
histórica de la Argentina).
Fue pues el Telégrafo Mercantil, hoja pionera y órgano oficial de la Sociedad
Patriótica, Literaria y Económica –fundadas ambas por el coronel y abogado
español F Francisco Cabello y Mesa, en colaboración con Juan José Castelli– el primer
periódico editado en suelo “argentino” (se recordará que entonces, la Argentina
tal como hoy se la conoce formaba parte del Virreinato del Río de la Plata).
La publicación, impresa en la Real Imprenta de Niños Expósitos, en Perú
y Moreno, comenzó a circular el 1º de abril de 1801. Tal vez por su precoz
orientación crítica y sus lúcidas plumas (entre los primeros columnistas
estuvieron el deán Gregorio Funes, Manuel Belgrano y Juan José Castelli,
entre otros), el Telégrafo cargaría el “honor” de ser el primer periódico
argentino clausurado, un año y medio después. Sin embargo y a partir de
allí, el periodismo rioplatense –tanto en sus enfoques críticos como en
aquellos serviciales a la Madre Patria– no cesó de generar nuevos informativos.
En efecto, un mes antes del cierre del Telégrafo, apareció en Buenos Aires
el primer número del Seminario de Agricultura, Industria y Comercio, fundado
por Juan Hipólito Vieytes y con pie de imprenta de los Niños Expósitos.
Ese medio se extendió hasta mayo de 1807. Dos años después, en octubre,
apareció la Gaceta del Gobierno. Su director fue el virrey Cisneros y la
publicación duró hasta enero de 1810. Dos meses más tarde, más específicamente
el 3 de marzo, Manuel Belgrano inicia –con autorización del virrey– el periódico
semanal titulado Correo de Comercio de Buenos Aires. Su objetivo principal
fue, tal como afirmó Belgrano en su autobiografía: “Popularizar los sanos
principios de la economía política […], impulsando a través de sus publicaciones
la Revolución” (Mario Belgrano, Historia de Belgrano). La portada de su
primer número llevó a modo de editorial una dedicatoria dirigida a los labradores,
artistas y comerciantes: “Labradores, que con vuestros afanes y sudores
proporcionais a la sociedad la precisa subsistencia, los frutos de regalo,
y las materias primas primeras para proveer lo necesario a los trabajos
provechosos al Estado! Artistas, vosotros que dando una nueva forma a las
producciones de la naturaleza, sabeis acomodarlas para los usos diferentes
a que corresponden, y les añadís un nuevo valor con que enriqueceis al Estado,
y aumentais su prosperidad! Comerciantes, que con vuestra actividad ayudais
al cambio así interior como exteriormente, y por vuestro medio se fomenta
la agricultura e industria, y el Estado recibe las utilidades con que poder
atender a sus necesidades y urgencias! A vosotros todos nos dirigimos a
ofrecer nuestros trabajos, sin tener otro interés, ni otras miras que las
de vuestros adelantamientos, pues que de ellos indispensablemente han de
resultar los que convienen al Estado […]”. La insistencia sobre rol estratégico
que debía tener el Estado, habla a las claras de la política económica que
Belgrano (y Mariano Moreno) consideraba necesario adoptar para asegurar
el progreso y la prosperidad en el Río de la Plata. Dicha posición se reflejó
aun de forma más contundente una vez acaecida la Revolución de Mayo. Por
ejemplo, en su número del 8 de septiembre de 1810, y después de señalar
que “la riqueza real de un Estado es el más grande grado de independencia
en que está de los otros para sus necesidades, y el mayor sobrante que tiene
para exportar”, Belgrano describe los principios básicos que habían forjado
la riqueza de Gran Bretaña, la potencia económica más grande de su tiempo:
“Yo expondré nueve principios que los ingleses, es decir, el pueblo más
sabio en el comercio, proponen en sus libros para juzgar la utilidad o la
desventaja de las operaciones de comercio: 1) La exportación de lo superfluo
es la ganancia más clara que puede hacer una nación; 2) El modo más ventajoso
de exportar las producciones superfluas de la tierra es ponerlas antes en
obra, o manufacturarlas; 3) La importación de las materias extranjeras para
emplearse en manufacturas, en lugar de sacarlas manufacturadas de sus países,
ahorra mucho dinero y proporciona la ventaja que produce a las manos que
se emplean en darles una nueva forma; […] 5) La importación de mercancías
que impiden el consumo en el país, o que perjudican al progreso de sus manufacturas
y de su cultivo, lleva tras de sí necesariamente la ruina de una nación;
6) La importación de las mercaderías extranjeras de puro lujo en cambio
de dinero, cuando éste no es un fruto del país como es el nuestro, es una
verdadera pérdida para el Estado; […] y 9) Es un comercio ventajoso dar
sus bajeles a flete a otras naciones” (Pérez Amuchástegui, obra citada).
Con respecto a este último punto, Belgrano señaló en otro número de su periódico
la imperiosa necesidad de crear una marina mercante propia: “Toda nación
que deja hacer por otras una navegación que podría emprender ella misma
disminuye sus fuerzas reales y relativas a favor de sus rivales”.
Casi paralelamente al Correo de Comercio, apareció la Gazeta de Buenos-Ayres,
periódico dirigido por el abogado Mariano Moreno y órgano oficial de la
Primera Junta mientras dominó el pensamiento jacobinista y su instrumento
de acción, el plan de operaciones. Ese plan, censurado y tildado de apócrifo
por buena parte de la historiografía ortodoxa, no fue ni más ni menos que
el programa económico y político de la Revolución, y por tanto, celoso de
los intervencionismos o las injerencias extranjeras sobre las decisiones
de las flamantes autoridades. En su edición del 16 de septiembre de 1810
y a raíz de la intrusión de un capitán inglés en los asuntos internos del
gobierno, Moreno escribió en la Gazeta: “Los pueblos deben estar siempre
atentos a la conservación de sus intereses y derechos, y no deben fiar más
que de sí mismos. El extranjero no viene a nuestro país a trabajar en nuestro
bien, sino en sacar cuantas ventajas pueda proporcionarse. Recibámoslo enhorabuena,
aprendamos las mejoras de su civilización, aceptemos las obras de su industria,
franqueémosle los frutos que la naturaleza nos reparte a manos llenas, pero
miremos sus consejos con la mayor reserva […]”. Pero como es sabido, al
aplacamiento jacobino o a la derrota de la línea Moreno-Belgrano poco tiempo
después de Mayo, le siguió el encumbramiento del sector liberal, sector
que al decir de Amuchástegui encarnaba la visión de “un mundo donde la vida
privada primara sobre la vida política, y en donde la absoluta libertad
de comercio independizara al individuo de la fiscalización del Estado nacional”.
Salvo honradas excepciones durante los años con posterioridad a Mayo, el
pensamiento nacional y popular, sus más ilustres representantes y su caudal
periodístico fueron perdiendo poder cuando no desapareciendo físicamente.
La reacción consciente y consecuente de la oligarquía porteña fue fulminante.
Moreno, desterrado a Europa, asesinado en pleno éxodo. Su continuador natural,
Bernardo Monteagudo, proscripto del Río de la Plata y asesinado años más
tarde en Lima por la fracción liberal afín a la porteña. ¿Y Belgrano? El
gran intelectual, economista y abogado de profesión se convirtió en un superlativo
militar y héroe de las luchas independentistas de las Provincias Unidas
del Río de la Plata. Como la gran mayoría de los de su estirpe, murió en
la pobreza e ignominia. Exceptuando la aparición en escena de Juan Manuel
de Rosas (buscó un equilibrio con las provincias mediterráneas pero coincidió
con la burguesía comercial porteña en el control de la Aduana) y la derrota
transitoria del mitrismo en 1874; exceptuando asimismo los gobiernos de
Yrigoyen y Perón en el siglo pasado, y el período kirchnerista del presente,
puede afirmarse que durante los doscientos años de historia “argentina”
el campo antinacional ha sido el gran vencedor, y por ende, la debilidad
política, social y económica del campo nacional y popular –y en consecuencia
su expresión e influencia periodística y cultural– ha sido y es una constante.
Esta inferioridad o desventaja condujo desde 1811 en adelante a que la instauración
de un proyecto industrial, democrático, popular y latinoamericanista requiriera
de la transformación estructural de la Argentina, no así la ejecución del
modelo opuesto, para quien el país estuvo siempre mejor adaptado y dispuesto.
Sin embargo y ya de regreso al presente, seis años de modelo productivista
y socialmente incluyente entre el 2003 y el 2009, bastaron para que una
nueva voz periodística levantara la toalla arrojada casi doscientos años
atrás por el Telégrafo, la Gazeta y el Comercio. En los prolegómenos del
Bicentenario –momento estratégico y bisagra en la resolución de la cuestión
nacional– el periódico Buenos Aires Económico promueve el forjamiento de
una conciencia industrialista en el país, la recuperación del rol del Estado
como actor excluyente del desarrollo nacional, la restitución del verdadero
federalismo, la alianza entre el movimiento obrero y el Gobierno, la nacionalización
de la cultura, la búsqueda del ser nacional en el marco de una Unasur desarrollada
y soberana, la formación de un capitalismo industrial autóctono de raigambre
popular y la explotación agropecuaria sujeta a fines socioeconómicos. Buenos
Aires Económico es, juntamente con las políticas económicas implementadas
desde el 2003, la creación del Ministerio de Industria, el innovador rol
de la ANSES en materia de asignación de crédito y agente inversor nacional,
el Instituto para el Desarrollo Industrial y Social Argentino, y las usinas
del pensamiento económico, cultural y periodístico heterodoxo como AEDA,
el Grupo FARO y Carta Abierta, una expresión categórica más del cambio operado
en el país, cambio que sin lugar a dudas y al margen de las contradicciones
y los errores cometidos, nos vincula de manera creciente a la Argentina
que Moreno y Belgrano añoraban construir. Como sucedió entonces, el periodismo
nacional y popular vuelve al escenario y a colocar en su centro el trascendental
pero irresuelto dilema argentino: desde la Revolución de Mayo dos modelos
antagónicos se disputan la conducción del país. Por cierto, un dilema que
presentado y comunicado correctamente, lejos de atemorizar a los hombres
y a las mujeres opuestas al neoliberalismo, promueve la toma de conciencia,
sitúa políticamente, reconoce y enfrenta enemigos, provee de nuevas herramientas
críticas y, fundamentalmente, apuesta por la total implementación de un
modelo industrial, estatista, socialmente equitativo y latinoamericanista.
En suma y glosando las palabras que Belgrano utilizó en el Telégrafo para
describir los objetivos de ese periodismo criollo y nacional que nacía con
la Revolución de Mayo (“Popularizar los sanos principios de la economía
política, impulsando a través de sus publicaciones la Revolución”), los
argentinos y argentinas del Bicentenario, amparados por la ley de medios
de la democracia y a través de nuestras publicaciones, debemos popularizar
los cambios revolucionarios en marcha para terminar de sanear la economía,
la política y la cultura. Porque sólo un pueblo informado, decidido y consciente
de sus intereses podrá derribar el paredón de la exclusión y el subdesarrollo
que los históricos enemigos de la patria han erigido y detrás del cual urden
su contrarrevolución.
* Director del Centro Latinoamericano de Investigaciones Científicas y Técnicas
Si en 1810 la Revolución de Mayo se dio, entre otros factores, como batalla
contra el monopolio comercial español, doscientos años después la disputa
antimonopólica es otra. Volvieron también los lenguajes jacobinos, en un
curioso giro de la Historia. Hitos, continuidades y rupturas en dos siglos
de periodismo argentino: del Facundo de Sarmiento a Arlt, de Walsh a la
dictadura, y de allí a la blogósfera.
Paradoja bicentenaria, con algo de forzada: si el nacimiento de La Gaceta
en el Año 10 tuvo mucho que ver con el proceso de una prensa europea nacida
como “tribuna de doctrina” de las burguesías en ascenso –disparador retomado
en la fundación del diario La Nación–, el jacobinismo que latía en los viejos
escritos de Mariano Moreno está de regreso, con otros modos. Sucede doscientos
años de periodismo después, en un escenario de polarizaciones y trincherismo.
Contra buena parte de las virtudes que se adjudica la moderna prensa libre
–objetividad, neutralidades, reproducción fiel de la realidad, defensa de
los intereses ciudadanos– hoy se verifica un curioso giro de la historia
construido, según de qué actor se trate, entre destemplanzas, manipulaciones,
dicotomías feroces y un mínimo envoltorio de corrección política diseñado
para enmascarar los intereses que se defienden.
La historia argentina en términos de publicaciones, periodismo, periodistas
e industrias culturales es riquísima y da para el regocijo. Tiras de nombres
posibles: Moreno, la generación del ’37, Alberdi y el joven Sarmiento, ese
librazo de nuevo periodismo que es el Facundo, así como lo es Una excursión
a los indios ranqueles de Mansilla. El Mosquito y la vieja Caras y Caretas.
Las publicaciones anarquistas o las de las colectividades inmigrantes. Y
Arlt y Crítica y González Tuñón y el Horacio Quiroga que colaboraba en La
Nación (como José Martí, desde el Norte). Y más adelante Scalabrini, Jauretche,
Selser. Todo Walsh y el diario de la CGT de los Argentinos. Y las plumas
admirables de La Opinión, Enrique Raab entre tantas. La ardua búsqueda de
un periodismo a la vez masivo y revolucionario en Noticias. Para hacer stop
en los ’70: el espanto de la prensa en dictadura.
Pioneros. Los nombres tienen su peso pero acaso importen más los contextos
históricos y culturales. Los señalaron bien Aníbal Ford y Eduardo Romano
cuando hablaban del proceso alfabetizador e integrador de un potente sistema
educativo público como generador de públicos preparados, ávidos de lecturas.
Argentina fue siempre pionera primero en el desarrollo de sus industrias
periodísticas, luego radiales, luego televisivas, finalmente en términos
de penetración del cable (por años tuvimos mayor desarrollo que varios países
europeos) y del uso de internet.
Si se trata de los viejos años del periodismo escrito, todavía en los ’70
nuestro país duplicaba el promedio de consumo de diarios y revistas en América
Latina (182 diarios por cada mil personas, contra los 80 por mil de la región).
Llegaron más tarde crisis, retrocesos, transformaciones culturales y un
ciclo de decadencia: la circulación de diarios bajó un 40% entre los ’70
y el ’90. De 2 millones (1970) a 1,2 millones de ejemplares (1990), pese
a un crecimiento poblacional del 50 por ciento.
Octavio Gettino señaló en sus trabajos sobre industrias culturales que en
los momentos históricos en los que se registró una mejor distribución de
la riqueza se dieron los picos máximos de producción y venta de publicaciones,
libros o películas. Si se trata de la circulación de revistas, en 1973 se
tiraban 233,8 millones anuales de ejemplares, con 337 títulos. En los ’40
y ’50 sólo las revistas de historietas editaban unos 70 títulos y 1,3 millones
de ejemplares. Hacia 1973 la editorial de Dante Quinterno tiraba 800 mil
ejemplares. En 1991, ese mismo rubro de las historietas se había reducido
a 270 mil ejemplares. Más de un semanario de interés general hoy puede darse
por satisfechísimo si vende 20, 30, 40 mil ejemplares.
La explosión de la televisión, el cable e internet explican sólo parcialmente
el descenso. La era mutó; asistimos al estallido de lo visual, los tiempos
de los “cansancios de lectura”, la imposición de textos cortos virando a
tontos, las lógicas del infoentretenimiento, el impacto, el vértigo sin
sentido, la banalización, la espectacularización. Si es por la función de
industrializar el miedo, habrá que transigir: tal como lo describe la historiadora
Lila Caimari en su libro La ciudad y el crimen. Delito y vida cotidiana
en Buenos Aires 1880-1940 (Sudamericana), el género policial y esa lógica
inherente de temor al Otro ya gozaban de buena salud en el siglo XIX. En
los años ’30 la crónica roja circulaba en diarios leídos por capas ilustradas
de la población. Otros añadirían con razón que, a su vez, esos géneros no
fueron más que el reciclado de viejas tradiciones populares.
Otro mundo, otras voces. Lo demás es sabido: la era de la concentración
mediática en todo el mundo y en nuestro país también. Las inequidades –el
recorte de derechos– en el acceso a la producción y la emisión de información
y cultura. El gran cambio que se está registrando no sólo en Argentina sino
en buena parte de nuestro continente, en términos de crítica de la comunicación
establecida y construcción de otros sistemas posibles, habla de una vitalidad
social perdida en los países centrales. En todo el mundo se habla de fenómenos
de degradación, pérdida de credibilidad y de penetración de los medios que
no obedecen sólo a nuevas pautas de consumo ni a la aparición de las nuevas
tecnologías. Termine como termine el proceso de judicialización de la Ley
de Servicios Audiovisuales, el debate generalizado ya forma parte de un
proceso cultural fantástico, de una nueva conciencia social y de nuevos
modos de resistencia cultural.